reseÑas - el colegio de michoacán · many mexicos, con un rural mexico, ... de sus agencias...

14
RESEÑAS RELACIONES 79, VERANO 1999, VOL. XX

Upload: others

Post on 27-Dec-2019

0 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

RESEÑAS

R E L A C I O N E S 7 9 , V E R A N O 1 9 9 9 , V O L . X X

Page 2: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

JEAN PAVAGEAU, L'AUTRE MEXIQUE. CULTURE

IN D IEN N E ET EXPÉRIENCE DE LA DÉMOCRA­

TIE. LES JEUNES EN QUÊTE DE RECONNAIS­

SANCE, PARÍS, EDITIONS L'HARMATTAN, CO­

LLECTION "RECHERCHES ET DOCUMENTS

AMÉRIQUES LATINES", 1992, 164 P.

Los mexicanos contamos ya con un

M any M exicos, con un Rural Mexico, con un México Bárbaro, con un M éxi­co, tierra de volcanes, con un México pro­

fundo, con un México mágico, con un M é­

xico indio; acaba de salir M y Lost M exi­

co; muchos temen hoy el despertar de

un México bronco. ¿A qué México ig­

noto nos remite este A utre Mexique anunciado por el autor?

Este es un estudio de la comuni­

dad indígena de Tarecuato, Michoa-

cán, con el propósito de analizar el

poder político y sus transformaciones

en el medio rural mexicano. Desde

una perspectiva histórica y sociológi­

ca, el autor da cuenta de las contra­

dicciones sociales suscitadas en Tare­

cuato por la confrontación de las

tradicionales instituciones comunita­

rias indias con las comportadas por la

modernización tecnológica, económi­

ca, administrativa (civil y religiosa)

impulsada por el Estado nacional y la

Iglesia católica.

Tarecuato, una población purépe-

cha de la Meseta Tarasca, que tiene la

categoría de tenencia del municipio

de Santiago Tangamandapio en el Ba­

jío zamorano, sirve de muestra al au­

tor para su análisis de 'Tos fundamen­

tos antropológicos del poder político,

el fimcionamiento real del mismo y

las modalidades informales de la ac­

ción política" (p. 7) que contravienen

a los poderes socialmente estableci­

dos y legalmente autorizados. En la

emergencia de estas modalidades

"informales" de impugnación políti­

ca, el autor reconoce un papel prota-

gónico a diversos actores, entre los

que sobresalen las mujeres y los jóve­

nes de Tarecuato, cuya azarosa parti­

cipación en los procesos de decisión

es destacada como "balbuceos de prác­

ticas más democráticas" (p. 125).

Respaldado su estudio por un lar­

go trabajo de campo, el autor nos

ofrece a lo largo de los siete capítulos,

la introducción, las conclusiones y la

bibliografía que integran la obra, un

estudio de "antropología política"

complementado por un enfoque psi-

cosocial a fin de comprender mejor

los procesos políticos locales al ampa­

ro del análisis transaccional.

"Notre village fut un centre im­

portant de l'empire Porhépecha".

Tras las huellas del imaginario colec­

tivo tarecuatense, expresado popular­

mente bajo el registro de la utopía re­

trospectiva que titula el capítulo uno,

el autor se adentra en una explora­

ción hacia el pasado de Tarecuato en

Page 3: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

busca de "los fundamentos históricos

del poder político: períodos precolo-

nial y colonial". A lo largo de la lec­

tura se resiente en esta sección la

ausencia de los imprescindibles estu­

dios sobre el correspondiente tema

general y los subtemas particulares

implicados en éste.1 Ante ausencias

como las señaladas, la bibliografía

consignada bajo el título "III, Histoire

et géographíe du Míchoacán. Culture

Porhépecha", se revela de inmediato

desigual e incompleta. El tono suma­

rio del texto comprendido entre las

páginas 16-24 así lo confirma.

No obstante, la otra sección de

este mismo capítulo: "Institutions et

acteurs du pouvoir dans la commu-

nauté d'aujourd'hui" (pp. 25-30), pre­

senta los componentes fundamen­

tales del sistema sociopolítico local y

anticipa las contradicciones que sus­

cita el "dualismo interno-externo" por

el que, alegadamente, se produce "la

repartición de las instituciones y de

los actores del poder conforme a dos

principios y_dos lógicas diferentes"

(p. 25). Dentro de este esquema dual

indohispano, el autor trata en las pá­

ginas siguientes de captar las conflic­

tivas relaciones entre comunidad india

y pueblo, así como entre sus respecti­

vas instituciones. El capítulo termina

anunciando el análisis del crucial pa­

pel mediador de la evangelización y

de la religión en la organización de la

vida social y política colonial y con­

temporánea de Tarecuato.

1 Tales estudios son, por ejemplo, los

debidos a Benedict Warren (La conquista de Michoacán 1521-1530, Fímax Pubis., More-

lía, 1977), Ulises Beltrán ("Estado y socie­

dad tarascos", en Pedro Carrasco, et al. La sociedad indígena en el centro y occidente de México, Zamora, El Colegio de Michoacán,

1986: 45-62), Pedro Carrasco ("Economía

política en el reino tarasco", en P. Carrasco

et a i 1986: 63-102), Hellen P. Pollard y

Shirley Gorenstein ("Agrarian Potential,

Population and the Tarascan State", en

Science, 2 0 9 ,1980:274-277; The Tarascan Ci­vilization: A Late Prehispanic Cultural S ys ­tem, Nashville, Vanderbilt Univ., Publica­

tions in Anthropology 28, 1983), Pollard

("Central Places and Cities: A considera­

tion of the protohistoric Tarascan State",

en American A n tiq u ity 45, 1980: 677-696;

"La cuenca del lago de Pátzcuaro: pobla­

ción y recursos durante el período prehis-

pánico y comienzos del hispánico 1500-

1520", en Revista de la Universidad, núm. 2,

Morelia, UMSNH, Nueva Epoca, 1983: 22-

33), Delfina López Sarrelangue (La nobleza indígena de Pátzcuaro en la época virreinal, México, u n a m , 1965), Ramón López Lara

[ed.] (El obispado de Michoacán en el siglo

xvu: Informe inédito de beneficios, pueblos y lenguas, Morelia, Fímax Publicistas, 1973),

J.J. Martínez de Lejarza (Análisis estadístico de la provincia de Michoacán en 1922, More­

lia, Fímax Publicistas, 1974), F. Foglio Mi-

ramontes (Geografía económica, agrícola del estado de Michoacán, 3 vols., México, Im­

prenta de la Cámara de Diputados, 1936).

Page 4: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

"Cest Fray Jacobo quí nous a sor-

tís de la sauvageríe". En el capítulo

dos el autor se propone desentrañar

"los fundamentos religiosos del po­

der político". El texto adolece de una

relativa confusión histórica de la pro­

blemática correspondiente, a pesar de

la distinción de períodos entre "la re­

ligión antigua", o prehispánica y la

"evangelización de Tarecuato" por

una parte, y por otra, el brinco al siglo

xx para hacer referencia a la Cristiada

y terminar abruptamente con la situa­

ción actual. El autor nos presenta las

instituciones religiosas de origen in­

dio y colonial, su evolución bajo la

administración eclesiástica y la gestión

laica a fin de aducir los elementos his­

tóricos y sociológicos necesarios para

fundamentar la serie de proposicio­

nes contenidas en las páginas finales

de este mismo capítulo (pp. 44 y 45);

estas páginas versan sobre la compo­

sición de la religión en Tarecuato, las

funciones sociales manifiestas y la­

tentes de la misma y la eficacia social,

etnicista y política de las instituciones

religiosas locales.

El seguimiento histórico hecho

por el autor da cuenta sucinta de los

temas propuestos, pero la fundamen-

tación etnohistórica y etnográfica se

nota deficiente no sólo por los saltos

en la periodización histórica, sino so­

bre todo, por la cuasi-gratuidad de las

tesis afirmadas en las páginas 44-45,

sobre la funcionalidad social de las

instituciones religiosas locales. Es

probable que las cosas sean, en efecto,

como el autor las afirma; pero ¿dónde

están los datos, o al menos, las refe­

rencias bibliográficas de apoyo? Ahí

se resiente la ausencia de ciertos tra­

bajos fundamentales.2

2 Estos son los de Carrasco ("The Ci-

vic-religious Hierarchy in Mesoamerican

communities: Pre-Spanish background

and Colonial development", en American Anthropologist, vol. 63, 1961: 483-497, re­

producido en R. Cohen y J. Middleton

(Comparative Political Systems, Austin, Univ.

of Texas Press, 1967), de E. de la Torre Vi­

llar ("Las cofradías rurales y sus aspectos

folklóricos" en AA.VV., Estudios de Folklo­re. Homenaje a Vicente T. M endoza y Virginia Rodríguez Rivera, Estudios de folklore 4,

México, iié -u n a m , 1971), de los cuatro

autores reseñados y discutidos por Jesús

Tapia ("Religión y cultura tarasca", en

Guillermo de la Peña (compilador) A ntro ­pología social de la región purépecha, Zamo­

ra, El Colegio de Michoacán y Gobierno

del Estado de Michoacán, 1987: 55-66) y

de los otros trabajos del mismo Tapia ("El

impacto de la Iglesia en la región de Za­

mora", en Guillermo de la Peña (compi­

lador) 1987: 153-190; "Religión, capitalis­

mo y sociedad indígena en Michoacán",

en P. Carrasco et a i , 1986: 285-305), así

como de los conocidos estudios de Agua­

yo Spencer y Miranda Godínez sobre la

organización social quiroguiana implan­

tada durante la Colonia en Michoacán y

cuyo legado institucional perdura.

Page 5: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

Las deficiencias en la documenta­

ción etnohistórica y etnográfica hasta

aquí reseñadas quedan, sin embargo,

relativamente subsanadas en el capí­

tulo tres con el tratamiento dado a la

cuestión agraria en Tarecuato. Ade­

más, en contraste con la superficiali­

dad con la que el autor ha recorrido el

itinerario histórico de la realidad so­

cial de Tarecuato, el análisis adquiere

profundidad en los capítulos cuatro y

cinco que tratan de "la moderniza­

ción del poder político" local y de las

modalidades como de hecho se dan

las relaciones de poder en la localidad.

En este tramo de la lectura, resul­

ta evidente que el propósito del autor

ha sido ir directo al tema que estruc­

tura al texto y dota de significado a la

problemática general de su estudio:

la reproducción de la comunidad in­

dia de Tarecuato a través de la histo­

ria y de las vicisitudes políticas loca­

les y nacionales, así como su progresi­

va vinculación a los procesos genera­

les de cambio económico, político y

cultural, sobre todo en la época con­

temporánea.

En este sentido, en los capítulos

3-5 parecen quedar resarcidos los de­

fectos de construcción de los capítu­

los precedentes. El análisis sociológi­

co destaca varios procesos: la secular

defensa colectiva de los bienes comu­

nales, la conflictiva implantación lo­

cal del dominio político nacional, las

luchas internas por los cargos indios

y por los puestos de administración

pública. Estos procesos sobresalen

como resortes integrativos de la co­

munidad sustentados por referentes

ideológicos que apelan reiteradamen­

te a la unidad comunal y a la identi­

dad étnica de los de Tarecuato a lo

largo de los cambios, y más allá de los

conflictos intracomunales, interco­

munales, interétnicos e interjurisdic­

cionales.

"Depuis toujours notre terre a eté

convoítée" se titula el capítulo tres

que nos aporta una disquisición his­

tórica y sociológica sobre la cuestión

agraria en Tarecuato con el propósito

de "conocer las representaciones del

espacio y del territorio comunitario en

el pasado y en la actualidad" (p. 48).

Se nota, sin embargo, la ausencia de

referencias bibliográficas sobre la de­

samortización de los bienes comuna­

les y sobre los conflictos agrarios en el

área purépecha que recientemente han

estudiado varios investigadores.3

3 Entre otros, Heriberto Moreno ("Un

documento sobre las comunidades indí­

genas del Distrito de Zamora durante el ll

Imperio", en P. Carrasco et a l , 1986: 213-

235), Moisés Franco ("La desamortización

de bienes de comunidades indígenas en

Michoacán", en P Carrasco et al. 1986:169-

187), Carlos García Mora (San Antonio

Charapan. El conflicto agrario-religioso en

una comunidad de la sierra tarasca, tesis,

Page 6: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

"Notre vñlage pourrait être une

vñle à part entière", contiene una sec­

ción titulada "L'histoire récente et la

'modernisation' du pouvoir politi­

que". Como complemento al análisis

sobre la cuestión agraria, el autor ana­

liza en este capítulo cuatro la progre­

siva vinculación de la comunidad in­

dia al desarrollo nacional siguiendo

la trayectoria de la formación de los

municipios, la implantación local del

dominio del Estado nacional a través

de sus agencias administrativas y por

medio de la introducción de obras de

infraestructura y la prestación de ser­

vicios públicos. Paralelamente el au­

tor da cuenta sumaria de la obra "mo-

dernizadora", de los ministros de la

Iglesia católica y del impacto local de

la escuela y de los medios de comuni­

cación masiva; a este triple respecto

-acción cultural de la Iglesia, escolari-

zación y comunicación radiofónica y

televisiva-, parece necesario situar lo

que pasa en Tarecuato en el marco de

lo que pasa en el resto del área puré-

pecha; mas, de ello, el autor guarda

silencio, no obstante la existencia de

estudios publicados sobre los tres

temas.,

Las páginas que contienen la

"Conclusion" preliminar (75-78) al

cabo del capítulo cuatro resumen el

"estudio de las bases antropológicas

del poder político en el medio rural

mexicano", antes de adentrarse en el

anáüsis del funcionamiento real del

poder a lo largo de los capítulos res­

tantes, 5-7. Son tres páginas en las que

el autor muestra "la riqueza y la com­

plejidad del modelo mexicano de or­

ganización" [política], fundado sobre

tres bases: la comunidad y el territo­

rio indio, transformados por el mode­

lo colonial, la religión indocristiana y

el municipio mexicano, indoespañol,

con influencias de los modelos fran­

cés y americano, transformado por la

Revolución mexicana y reciclado por

la racionalidad técnica y económica

moderna. Estos tres fundamentos se

superpondrían formando en el plano

local un conjunto coherente compues­

to por la comunidad, la parroquia y la

mimeo., México, ENAH, 1975), Jaime Espín

("Ecología y política: el impacto del repar­

to agrario en la Meseta y la secularización

del poder", en P. Carrasco et a l 1986: 237-

261; Tierra fría. Tierra de conflictos en M i­choacán, Zamora, El Colegio de Michoacán

y Gobierno del Estado de Michoacán,

1986) y Luis Vázquez ("La comunidad in­

dígena tarasca. Sus recursos naturales y su

adaptación sociocultural. El caso de Santa

Cruz Tanaco", en P Carrasco et a l , 1986:

263-284; "Cambio y continuidad en la co­

munidad indígena tarasca de la sierra. La

evolución política de Santa Cruz Tanaco",

tesis de maestría en antropología social,

mecanoscríto, Zamora, El Colegio de Mi­

choacán, 1987), cuyos trabajos, todos, han

sido publicados con anterioridad al estu­

dio del autor.

Page 7: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

municipalidad en correspondencia

con la unidad social elemental india

(wapanekwa) asentada en un territorio

linásticamente delimitado, a la vez

barrio puesto bajo advocación cristia­

na y circunscripción administrativa

civil.

Conforme a este triple esquema

homologado, el autor interpreta tanto

la coherencia y funcionalidad de lo

que él llama "el modelo mexicano de

organización" [política], como las in­

coherencias y contradicciones del

mismo. Tales, son analizadas en los

capítulos siguientes al tratar del mer­

cado de fuerza de trabajo, de tierras y

de productos (capítulo cinco), de los

procesos electorales, alegadamente

protagonizados por las mujeres (capí­

tulo seis) y de la movilización de los

jóvenes autóctonos en búsqueda de

reconocimiento social (capítulo siete).

Sobre la coherencia y funcionali­

dad, así como sobre las incoherencias

y contradicciones, tal como el autor

nos las señala unas y otras en los he­

chos sociales, no se puede estar en

desacuerdo. Pero el problema antro­

pológico planteado por la considera­

ción atenta de tales realidades socia­

les queda sin explicación plausible,

sea porque la recopilación de datos

pareció innecesaria a la luz de las teo­

rías aplicadas, sea porque los datos,

que efectivamente fueron recopila­

dos, no fueron integrados dentro de

un modelo heurístico más inclusivo y

esclarecedor.

En efecto, en el capítulo cinco, ti­

tulado "Todo se vende..., se vende

todo..., todos se venden!", se resiente

la necesidad de describir con proliji­

dad las relaciones entre la cabecera

municipal y las tenencias; se revela

necesaria la etnografía de las estrate­

gias más importantes sobre las que

reposa la economía informal aludida;

se percibe un gran vacío informativo

acerca de la inserción laboral cíclica

de los jornaleros tarecua tenses en los

cañaverales de los ingenios azucare­

ros de Los Reyes y Tocumbo, en los

campos agrícolas del Bajío zamorano,

en las plantaciones de la costa del Pa­

cífico y en el Norte; se nota la ausen­

cia de información sustancial sobre

las relaciones de parentesco y el ma­

nejo de éstas junto con las de coter-

raneidad como recursos para facilitar

las emigraciones y la colocación labo­

ral de los de Tarecuato en los Estados

Unidos; además, la importante y pre­

datoria enajenación de tierras y bos­

ques de la comunidad india en favor

de forasteros está insuficientemente

documentada.

"Ce sont les femmes qui font les

élections", es el título del capítulo seis.

En la página 111 aparecen referencias

a La Cantera, al igual que en el capí­

tulo anterior a San Angel. Sin embar­

go, con todo lo históricamente empa­

Page 8: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

rentados y geográficamente próximos

que están entre sí los pobladores de

esos sitios y los de Tarecuato, entre

unos y otros confrontan situaciones

conflictivas. A partir de los solos

datos vertidos en el texto, no quedan

claras las relaciones entre esos tres

núcleos de asentamiento, se descono­

ce que son aquellos sitios en el marco

de la tenencia de Tarecuato y del mu­

nicipio de Santiago Tangamandapio;

por qué La Cantera se desgajó de Ta­

recuato; de la lectura salimos igno­

rando por qué son tan conflictivas sus

mutuas relaciones, aparte de la dispu­

ta por las tierras, y si acaso existen ne­

xos estructurales entre estos poblados.

¿Por qué se asienta que "las muje­

res hacen las elecciones"? ¿Qué justi­

fica el título y qué explica el predo­

minio de las mujeres?; un predominio

presumiblemente no sólo cuantitati­

vo, sino progresivamente protagóni-

co en el ámbito de lo público y de lo

doméstico. Ahora bien, el protagonis­

mo político de las mujeres y la partici­

pación de otros actores no-legalmente

autorizados en los procesos políticos

(cura párroco, técnicos agrícolas, en­

cargados de la gestión de servicios

públicos y representantes de grupos

de influencia o de grupos de presión,

tales como los profesores y los líderes

indigenistas) (pp. 120-123), son expli­

cados por el autor mediante alusiones

pasajeras a factores insuficientemente

documentados; a saber, la composi­

ción demográfica de Tarecuato y la

densidad social sobre los espacios; los

volúmenes, la composición y los ci­

clos de los movimientos migratorios;

las redes de parentesco -se habla de

clanes y de linajes, jamás se aducen

los datos correspondientes-; la asime­

tría en las relaciones de género y sus

respectivos correlatos en la división

social del trabajo; y, en general, cuan­

to es enunciado sumariamente en los

párrafos segundo y tercero de la pági­

na 124, que el autor resume como ma­

nifestaciones de una "crisis de legiti­

mación", de las instituciones del po­

der comunitario tradicional y de las

instituciones políticas del Estado na­

cional. De no contar con datos de pri­

mera mano, se impone un mínimo de

necesarias referencias bibliográficas

al apoyo.

"Nous sommes indiens... Nous

sommes mexicains", es el título del

capítulo siete que resume en su enun­

ciado la intrínseca dualidad que tensa

la condición social de los jóvenes de

Tarecuato divididos entre su indiani-

dad relativamente autónoma y su he-

terónoma incorporación a los proce­

sos nacionales. Por su tema, por los

sujetos de estudio anunciados en el tí­

tulo de la obra y por el tratamiento

psicosociológico dado a la cuestión

juvenil, es esta la porción más intere-

i sante del trabajo.

Page 9: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

El autor se propone analizar aquí

"los procesos de emergencia de 'otras7

culturas socio-políticas, incluso, de

anti-poderes". En la aprehensión de

esta alteridad el autor tiene compro­

metida "la comprensión de los jóve­

nes indios, de los jóvenes mexicanos

en busca de reconocimiento". ¿Da de

sí el método etnológico para com­

prender "los procesos a través de los

que los jóvenes analizan su situación

y la de su sociedad; toman conciencia

de su lugar y de su rol; sueñan indi­

vidual o colectivamente en la trans­

formación de su sociedad, manifies­

tan otras formas de participación,

practican otras formas de relaciones

sociales y emprenden a veces accio­

nes colectivas"? No, según el autor.

Por ello recurre a la psicosociología.

A la luz del análisis transaccional,

entiende que "la desestructuración de

la vida social y el poco aprecio en el

que se tiene al caduco modo de fun­

cionamiento de la vida socio-política

comportan formas de repliege en la

indiferencia o la sumisión [...], formas

de huida de la realidad social" (p.

128). Entre ellas Pavageau reconoce el

apego a la televisión, las peregrina­

ciones y las migraciones cíclicas -in­

cluso si éstas son también procura­

ción de empleo y búsqueda de sí-, las

numerosas e interminables fiestas,

cierta religiosidad narcotizante y el

refugio en la trinidad maldita, la dro­

ga, el alcohol y la violencia (cfr. pp.

128-129).

Los jóvenes de Tarecuato ¿son so­

lamente sujetos pasivos de los efectos

de la desestructuración del sistema

social? No, pues ellos actúan, y sus

acciones conforman "los modos de

reestructuración de la vida social" (p.

129) que el autor analiza bajo el su­

puesto de que "los procesos de emer­

gencia de prácticas sociales, cultura­

les, económicas y políticas diferentes"

que tuvieron lugar en la localidad y

en el país entre 1980 y 1989, "tradu­

cen los sueños, las ideas, las energías

y los proyectos innovadores, a la vez

que marcan la evolución de las men­

talidades en el medio rural y contri­

buyen a la transformación de la socie­

dad" (p. 133).

Pavageau discierne en esos com­

portamientos una tipología de los jó­

venes de Tarecuato según su modo de

participación en la vida social; tipolo­

gía que reflejaría de algún modo el

sistema local de clases sociales (p.

130). El autor describe los rasgos que

tipificarían a cada una de las cinco ca­

tegorías juveniles locales (pp. 129-132)

y reconoce en la configuración de

ellas y en la formación y aliento de los

mitos y aspiraciones, de los sueños y

los deseos, de las necesidades percibi­

das y de las frustraciones sufridas por

los jóvenes de Tarecuato, varios facto­

res: la influencia de la escolarización

Page 10: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

y del indigenismo, las facilidades de

desplazamiento territorial, el contac­

to cultural en el extranjero, la penetra­

ción de los medios audiovisuales y la

especialización profesional de algunos

coterráneos (pp. 133-136). El lideraz­

go, la agrupación de jóvenes y las rei­

vindicaciones por la tierra, por la ho­

nestidad en la administración de los

bienes comunales, por el cambio de

estatuto administrativo subordinado

de Tarecuato, por la escuela, por acti­

vidades deportivas y culturales y por

el respeto a su condición de indios

(pp. 137-142), no se han producido,

ciertamente, sin obstáculos surgidos

de todas partes: desde la reprobación

de ciertas actividades por los propios

padres de familia y la divulgación de

chismes y rumores atemorizantes,

hasta las amenazas a la seguridad

personal y el asesinato de los líderes,

pasando por la oposición de las auto­

ridades civiles y religiosas locales y la

recuperación política de la moviliza­

ción juvenil (pp. 142-147).

Pese a todo, el saldo de las accio­

nes, aunque escaso, sería positivo (p.

147) como "experiencia de la demo­

cracia" para los jóvenes que, habiendo

partido asociativamente "en busca de

reconocimiento" durante los ochenta,

al cabo de la década, al tener ya entre

22 y 35 años, se encuentran disgrega­

dos. El legado de éstos a la nueva ge­

neración -la de aquellos que comien­

zan la década de los noventa con eda­

des que fluctúan entre los 15 y los 25

años-, consistiría en "una experiencia

cultural original", concretizada en

mejores facilidades educativas, en una

mayor libertad vestimentaria y fes­

tiva, en la disminución del alcoholis­

mo y de la violencia interbarrial, en

una mayor participación en la vida

pública local desprovista, sin embar­

go, de la organización colectiva y de

la exaltación indianista e indigenista,

en fin, en la conquista de nuevas for­

mas de legitimidad social para los jó­

venes.

Al cabo de la década de los

ochenta el desenlace de la moviliza­

ción se resumiría, por lo tanto, en "la

normalización de los comportamien­

tos" de aquellos que, como grupo de

edad, habiendo partido de "los sue­

ños individuales a la aventura colecti­

va", están ahora de regreso "del gran

sueño colectivo a las aventuras indi­

viduales" (pp. 148-150).

Extraña paradoja ésta la de ir

como investigador en pos del conoci­

miento de los jóvenes, que andan a su

vez, "en busca de reconocimiento" y

encontrarse, uno y otros, con una "di­

námica cultural" inscrita en el porve­

nir de Tarecuato consistente en la "ad­

ministración de la incertidumbre", en

la reforzada cohesión de la comuni­

dad, en la ultimada reconciliación del

estatuto de indio con la condición de

Page 11: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

ciudadano y en la heterónoma incor­

poración de la comunidad y pueblo al

exterior por la economía, la escuela, el

trabajo, las comunicaciones y la admi­

nistración. Tal es la interpretación an-

cilar alcanzada por el análisis transac-

cional en auxilio de la etnología

("Conclusions" pp. 152-156).

No estoy sugiriendo que el autor

debía aplicar el ecfuilibrium model y el

extended case method de los procesua-

listas manchesterianos que tan fecun­

dos se han revelado, no en el análisis

de los procesos históricos de largo al­

cance diacrònico, pero sí en el análisis

del conflicto político en sociedades

clasistas-estamentadas, divididas in­

ternamente por oposiciones faccio-

nales, separadas exteriormente por

antagonismos interétnicos e interco­

munitarios, tironeadas de todos lados

por líderes y burócratas, ministros re­

ligiosos u hombres políticos y someti­

das al abarcador dominio de los esta­

dos nacionales.

El autor, sociólogo de formación,

ha realizado un estudio sociológico

con el mérito excepcional de haber

realizado un largo trabajo de campo

conviviendo con los lugareños en Ta­

recuato; gracias a ello generó múlti­

ples simpatías y obtuvo una cantidad

enorme de invaluables informaciones

de primera mano, sin caer en las

trampas de las rivalidades interfac-

cionales que acechan a todo antropó­

logo en el trabajo de campo. El esque­

ma teórico y metodológico que con­

dujo la búsqueda y llevó a la inven­

ción de la realidad social de Tarecuato

que el autor aquí nos entrega, ha sido

inteligentemente aplicado y los resul­

tados de este estudio revelan los al­

cances logrados, tanto como las limi­

taciones, insoslayables, propias del

funcionalismo sociológico. En tal sen­

tido, el estudio del autor es académi­

camente excelente con la virtud adi­

cional de estar escrito con un estilo

literario claro, conciso y que contagia

la simpatía con la que el autor acogió

y fue acogido por los de Tarecuato.

Una explicación adicional a las limita­

ciones informativas e interpretativas

de este trabajo es la tiranía de los cri­

terios comerciales que rigen el merca­

do del libro.

Mas, en virtud de la proposición

inicial externada por el autor en el

sentido de llevar a cabo un análisis de

"antropología política" (p. 6), propo­

sición refrendada hacia el final (p.

127), la problemática planteada por el

autor demanda una solución metodo­

lógicamente acorde. Ahora bien, esta

es particularmente compulsiva en el

tratamiento al que debían haber sido

sometidos los temas desarrollados en

los capítulos 4-7, en los que el autor

analiza el funcionamiento real del po­

der a través de la organización del es­

pacio y de la economía, y a través de

Page 12: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

los procedimientos por los que los in­

dividuos y los grupos intervienen en

los procesos políticos locales.

En efecto, he aquí una serie de fe­

nómenos -generalizables en mayor o

menor grado a toda el área purépe-

cha- que ineludiblemente reclaman

una explicación mayor que la ofreci­

da por el autor: a) el surgimiento de

movilizaciones, que bien pueden ser

o tender a ser simples reclamos de au­

tonomía administrativa o claro indi­

cio de verdaderas reivindicaciones

etnicistas o, acaso, sólo luchas contra

la desigualdad social y la discrimina­

ción; b) las conflictivas relaciones en­

tre tenencia y cabecera municipal,

entre representantes autorizados del

Estado nacional y autoridades indias;

su conflictividad refleja algo más que

una pura inconformidad por la disi­

metría administrativa o que una mera

cuestión de honor; c) las tensiones

entre los grupos de interés comuni­

tario y las presiones ejercidas por in­

dividuos y grupos externos a la loca­

lidad, entre comuneros y "gente de

afuera", cuyas tensiones se inscriben

en la dialéctica del voraz mercado de

los bienes comunales, de la caduci­

dad de las normas de derecho y de la

corrupción administrativa; d) el con­

tinuo reacomodo o realineamiento de

dirigentes civiles y religiosos y de sus

respectivas clientelas faccionales, en

las arenas del poder definidas por si­

tuaciones coyunturales; e) la recorpo-

rativización estamental de las institu­

ciones indias ante los efectos social y

culturalmente disolutorios de la mo­

dernización tecnológica, mercantil,

administrativa, comunicacional, en

breve, política y moral, comportados

por la libre expansión interna del ca­

pitalismo y por el abarcador dominio

del Estado nacional.

Estos fenómenos no pueden ser

plenamente inteligibles sin explícitar

la dialéctica que mantiene en tensión

a los componentes de la índole con­

flictiva de los procesos sociales en ese

medio, a saber, la organización social

que estructura a la comunidad india y

al pueblo en el marco de la municipa­

lidad, la normatividad jurídica consti­

tuida y la de usos y costumbres que

teóricamente rigen las relaciones ha­

cia dentro y hacia fuera de ésta, y las

pautas de comportamiento colectivo

inscritas en las diversas prácticas de

los actores sociales. Los hechos repor­

tados por el autor podrían ser explo­

tados con mayor fecundidad some­

tiéndolos a un análisis más riguroso y

unitario mediante una periodización

histórica determinada no sólo por los

grandes factores de la historia nacio­

nal, sino por aquellos que pautan la

pequeña historia local y regional, me­

diante estudios profundos de caso, la

elaboración de historias de vida, la con­

tras tación sistemática de situaciones

Page 13: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

sociales de ataraxia y crisis, mediante

el análisis comparativo de fenómenos

regionales y de procesos sociales, me­

diante la delimitación de arenas polí­

ticas para alumbrar en la intelección

de los lectores el foco de los conflictos

en Tarecuato.

¿Cómo, de otro modo, entender,

si no, por ejemplo, la perenne aspira­

ción a la autonomía municipal, las

apariencias de reivindicación etnicis-

ta, los conflictos agrarios y de intere­

ses, las emigraciones, las diversas

modalidades de producción llamadas

de economía informal, la politización de

las manifestaciones festivas, la moral

social imperante y la perdurabilidad

de antiguas instituciones indias bajo

el embate del mercado y de la moder­

nización tecnológica y administrati­

va, si no se describen suficientemen­

te, ni se analizan con detenimiento y

profundidad las cuestiones siguien­

tes: a) las relaciones de Tarecuato con

su cabecera municipal, los viejos y en­

conados antagonismos con sus her­

manos de La Cantera y de San Ángel;

b) el lugar del etnicismo tarecuatense

dentro del etnicismo reavivado en el

área purépecha; c) la importancia eco­

nómica y laboral que para los de Tare­

cuato tienen las plantaciones cañeras

y la agroindustria azucarera de los

vecinos municipios de Los Reyes y To-

cumbo, la agroindustria fresera y hor­

tícola del Bajío zamorano; d) el im­

pacto económico, laboral y ecológico

de la incontenible expansión de las

huertas de aguacate sobre la población

y el medio de Tarecuato, especial­

mente en relación con el mercado de

trabajo, el cambio en el uso de los sue­

los, el uso y abuso de insumos quími­

cos, la abusiva explotación del bosque

y la escasa disponibilidad de agua;

e) las redes de relaciones sociales so­

bre las que se fundan las migraciones

de los trabajadores y el itinerario de

los comerciantes tarecuatenses que se

desplazan de feria en feria, de tian­

guis en tianguis, a lo largo del año

por el Altiplano Central y la Costa sur

y oeste del territorio nacional; f) los

arreglos sociales por los que es posi­

ble integrar trabajo familiar, trabajo

asalariado, producción artesanal, co­

mercio, migraciones, y aprovechar, ¿de

qué maneras? los recursos obtenidos;

g) las inconsistencias que se desplie­

gan ante la mirada extraña del obser­

vador atento debido a las aparentes

contradicciones entre la impronta de

las instituciones religiosas, la preca­

riedad de los recursos económicos, el

derroche en las exuberantes celebra­

ciones festivas, el consumo conspicuo

de alcohol y la violencia doméstica y

política, con bastante frecuencia cul­

minada en asesinatos. En breve, al re­

currir -como lo hace el autor- sólo al

esquema funcionalista de análisis ins­

titucional -con todo lo logrado-, aun

Page 14: RESEÑAS - El Colegio de Michoacán · Many Mexicos, con un Rural Mexico, ... de sus agencias administrativas y por medio de la introducción de obras de infraestructura y la prestación

con el auxilio del análisis transaccio-

nal -con todo lo innovador y promi­

sorio que esto pueda ser-, quedan en

pie muchas preguntas por contestar,

suscitadas tanto por su propio esque­

ma de investigación -lo que paradóji­

camente demuestra los alcances y las

limitaciones heurísticas del análisis

funcionalista de las instituciones-

como por la riqueza de los hechos

sociales generados -lo que prueba la

pertinencia de Tarecuato como objeto.

El autor suscitó cuestiones suma­

mente importantes que se han queda­

do sin respuesta. Habiéndose pro­

puesto un análisis de antropología

política del medio rural mexicano, el

saldo obtenido al final es la mono­

grafía sociológica de una localidad in­

dia sólo parcialmente representativa

de la compleja y diversa ruralía me­

xicana.

El estudio monográfico de locali­

dad que el autor nos ofrece bajo el

prometedor título L'autre Mexicjue. Culture índienne et expérience de la dé- mocratie. Les jeunes en c¡uete de recon- naissance, reclama, para ser un autén­

tico estudio de antropología política

centrado en la cultura india y en el

aprendizaje juvenil de la democracia,

varias cosas, a saber: una amplia y

profunda inserción del tema en la

problemática sociológica regional, so­

bre todo en los aspectos relativos a las

relaciones interétnicas, a las relacio­

nes de mercado y a la implantación

de los dominios políticos. El análisis

institucional practicado por el autor

está exigiendo, para acabar de parir

todas sus implicaciones, una sistemá­

tica descripción etnográfica y el se­

guimiento crítico de los procesos so­

ciales, no sólo una documentación

historiográfica y fragmentaria infor­

mación de campo. Frente al análisis

transaccional al que el autor innova-

doramente apela, acaso de forma pio­

nera en el campo de la sociología que

suele hacerse en México, es preciso

decir que las costumbres son, cierta­

mente, más determinantes, por su

arraigo colectivo y por su durabilidad

institucional, que las pasiones.

Jesús Tapia Santamaría

Universidad de Puerto Rico