CAPITULO IX

Invasion de ingleses y mosquitos aI pueblo de Jinotega­Fortalezas en la costa del Norte -Ereccion del Arzobispado

de Guatemala

1741 a 1744

Noticias sabre amenazas de invasion POI parte de los ingleses ~Medidaspreventivas tomadas pOl el Gobernador Lacayo -Estado del armarnento existente en el almacen de Le6n -El Gobel nadar trata de mejoraI 10 -Regl esa Ii Granada y examina Ia situaci6n de aQuella plaza­Da los pasos necesmios para construir en ella una Sala de Almas­Formalidades con que se procedi6 a levantm este edificio -Fide elementas de gueIl a al Capitan General, y este los envia -Ingleses ymosquitos invaden el pueblo de Jinotega -Est! agos que en el causaronProvidencias que para pIotegello dict6 el Cornandante de Segovia -EICapitan Sebastian de la Cruz y el COl regidOl de Matagalpa no siguenel plan milital senalada pal el Comandante -Anal ece el enemiga porel Iio-Peliglo en que estuva d~ sel denotada par los nicalagilensesAstucia que eruple6 pUla salvalse-Logta escapal, dejando burlado alCorregidOl y sus fuelzas ~InfOlmaciones seguidas soble este sucesapor el Comandante de Segovia -Envialas el Gabernadot Lacayo ~ Guatemala -Opini6n del Fiscal de la Audiencia -SUPI imese la teneneia deCapitan Genet al en los COl regimientos -Dispone la COl te de Espanaque se levante una fOltaleza en la Costa NOlte de Hondmas-Examende los divel sas puntas en que pudiel a constl uil se, hecho par el ingenielO Diez Navallo-Senala este como mas Ii O1ooosito el riuelto deOmoa -Ventajas de este lugal -Limites can 60sta Rica -Nicoya -EIDesaguadel a -Esfuel zos hechos pm a la ereeci6n del Arzobispado deGuatemala -L6grase este objeto -Solemnidades can Que se di6 posesi6n al nuevo Arzobispo

SE diio en el capitulo anterior que por cartas del Gober­nador de Panama, dirigidas al de esta provincia, se sabia quelos ingleses no ocultaban su designio de ocupar los puertos deNicaragua, y cuanto convenia asegurarlos para evitar los pe­ligros que amenazaban al reino, sin desatender por otra partela fortaleza del San Juan, que de grande utilidad habria deser en ulteriores operaciones militares

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Con ordenes y avisos tan oportunos no habria podido e1GobernadOl eximirse de grave responsabilidad, si por descuidosuyo en ejecutar 10 conveniente a 1a defensa, hubiera tremo­lado en estas regiones el pabellon ingles EI poder maritimoque a la sazon tenia Espana, el desastroso resultado de lasexpediciones de Vernon en Cartagena y Cuba, el general en­tusiasmo con que la nacion espanola habia entrado en aquellaguerra contra su rival y las valiosas presas que sus crucelOshabian hecho al enemigo, causas eran de confianza para losempleados de este reino y capaces de enervar la firmeza conque debian emprender las disposiciones preventivas, \lfrecien­do oportunidad a la escuadra invasora para efectuar una sor­presa Pero el Gobernador Lacayo siempre fue activo Sa­biendo que sin elementos de guerla toda resistencia era im­posible, trato de conocer los que existIan en los almacenes rea­les, para determinar la extension que pudiera dar de momen­to a sus medidas, 0 en caso de falta pedirlos a la CapitaniaGeneral con la anticipacion conveniente para asegurar meiorlos resultados de una lucha

Ya se ha mostrado 1a incuria de la Corte de Madrid enmantener convenientemente armada esta provincia, no obstan­te que los mismos monarcas, en cedulas dirigidas al gobiernodel reino, habian reconocido su importancia topica para laguerra y los graves males que recibiria Espana si ocupandolael enemigo lograba desde este punto estrategico dominar losdos mares

Aflictivo era, por tanto, el deterioro del armamento exis­tente en los almacenes de Leon Aparece de un informe dadoal Gobernador por el Comisario general de la caballeria DonFrancisco Zapata, en 2 de Enero de 1741, que la infanteriaespanola, de que era Capitan Don Francisco Altamirano, te­nia cuarenta y ocho armas, veintisiete titHes y veintiuna intiti­les La compania de pardos de que fue Capitan Antonio Pa­dilla solo contaba con cincuenta y una, catorce buenas y trein­ta y siete inservibles La del Capitan Jose Perez, con cin­cuenta y dos, catoree de buen servicio, diecisiete con algunosdefel'tos y veintiuna enteramente arruinadas La del CapitanMelchor Toruno de F!~eroa tenia treinta y nueve armas, tre-

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ce de buen servicio, trece con defectos y trece inutiles Lacompania de mestizos, treinta, diez buenas para el servicio yveinte inservibles Existian tambien en la Sala de Armasveintiseis mosquetes, con cajas y Haves de cuerda, inservibles;veinticuatro arcabuces y diez canones de escopetas, sin cajasni llaves Las cuatro compaiiias solo contaban, pues, con se­tenta y ocho armas buenas para defender la provincia, si losenemigos trataban de invadirla por el puerto del Realejo

Tambien informo, en 7 de Enero, Don Agustin Garrido yMerino, ContadOl-juez oficial real de esta provincia y la deCosta-Rica, sobre los utiles de guerra que bajo su custodia sehallaban, por acuerdo del Gobernador Eran los siguientes:ocho Iibras de polvora, mil setecientas balas de fusil, arcabu­ces y mosquetes, ciento novena y ocho balas mas de hietro,calibre de artilleria, cuarenta y cinco granadas vadas y unaspocas cargadas, dos roHos de cuerdas, doscientas dieciseis ba­yonetas; sesenta y seis lanzas y lunetas, con astas maltrata­das, veintiuna horquillas, en mal estado; un rascador de hierropara Iimpiar fusiles, arcabuces y mosquetes; tres moldes parabalas de las armas expresadas, tres cajones con frascos ygarnieles inservibles, dos cucharas de hierro, un rascador, dosagujas y un Iimpiador para la artilleria

Entrego el Gobernador ados herreros los fusiles, arcabu­ces y mosquetes que algun repalO admitian, y mando des­encajonar las armas utHes y ponerlas en comodos armerosNo podia practicar otra cosa de mas valor, quien para hacerun gasto de exigua suma de dinero debia consultarlo previa­mente a la Capitania del reino, sometiendose a las cortapisasdel ministerio fiscal, de la Junta de Hacienda, y aun de lade Guerra cuando se trataba de asuntos pertenecientes a estelamo, las cuales Juntas, nimiamente celosas de la integridaddel real tesoro, apenas fijaban su atencion en la nec€sidadde los pueblos, temiendo acaso las mal intencionadas criticasde sus emulos y enemigos existentes en la Corte

Los acontecimientos anteriores y la necesidad de presen­ciar la organizacion y disciplina de las companias existentesy de otras que habia mandado alistar, aunque no en servicioactivo, habian obligado al Gobernador a permanecer en Loon

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mas tiempo del que pensara Pero en 19 de Enero de 1742se hallaba ya en Granada, arreglando las milicias, dando aaquella plaza la posible seguridad y tratando de enviar pro·visiones al Castilio, por ser el rio de San Juan el lado que masamenazaba siempre el enemigo

No tenian en Granada Sala de Armas Los empleados dehacienda habian tornado en arriendo un cual to por treintapesos al ano, y alIi se veian tiradas en el suelo las armas, lapolvora y demas enseres del servicio militar Los fusi!es per­manecian tornados de orin, podridos los correajes y cartuche­ras y hecha una masa humeda la polvora, inuti! para un Ian·ce repentino Todo se haliaba en completo deterioro, y eranecesario reformar, restablecer, levantar cuanto pudiera serelemento de resistencia al ingles y dar direccion eficaz y acti·va a los trabajos de defensa, en cumplimiento de ordenes einstrucciones de la Corte

En el mismo mes de Enero liego en visita a Granada DonClemente Rey Alvarez, Canonigo, por el Rey, de la Catedralde Leon, Juez de Capelianias y Visitador General del Obispa·do sedo vacante EI Gobernador presentole un escrito, en elcual Ie manifestaba, que en una de las esquinas de la plazaprincipal existia la pequefia casa de adobes, cubierta'de tejas,que habia pertenecido a Don PedlO del Castillo, ya difunto:que ese edificio, en estado de ruina, se haliaba glavado concapitales de capelianias destinados a obietos piadosos, y po·dia ser uti! al gobierno del Rey, si el Juez Visitador 10 vendiapara hacel en el lugar que ocupaba una Sala de Al mas de·cente y segura EI Sefior Rey Alvarez, reconociendo que si lacasa caia, como era probable, perdelia la iglesia los capitales,y que vendiendola podria utiIizarIos, acordo de conformidadcon la solicitud del Gobernador Don Jose Antonio Lacayo deBriones y comisiono pal a que procediese a la subasta al Bene·ficiado Don Jose Antonio Lacayo de Briones, Cura rector masantiguo por el real patronato No hubo otro postor que elCapitan a guerra Don Manuel de Solorzano, Alcalde Ordina·rio de la ciudad y apoderado del Gobernador, y en el se hizoel remate por trescientos cincuenta pesos

Por segunda vez copsulto Lacayo sus actos con el Capitan

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General, despues de ejecutados Sin manifestarle que la casaestaba comprada con todas las formalidades establecidas porlas leyes del reino, se Iimito a pedir autorizacion para hacer lacompra, en atencion a los grandes beneficios que recibiria laprovincia de la construccion de un cuartel y Sala de Armasen que con seguridad y decencia pudieran depositarse las delRey Pediale tambien su autorizacion superior para fabricarel edificio con los cuartos necesarios a su destino, y que sien­do el proyecto de su aprobacion, mandase Iibrar las correspon­dientes ordenes a los oficiales de la Real Hacienda, a fin deque pagasen el dinero que en la obra se invirtiera Todo lefue concedido, seiialandosele la suma de cuatrocientos pesospara la compra de la antigua casa y prescribiendosele llamaraIicitadores que edificasen 1a nueva, y celebrase el contrato conquien menor cantidad pidiera

Aunque diariamente se daban pregones llamando Iicitado­res, ninguno comparecia En 24 de Junio se presento el Sar­gento Mayor Don Simon Lacayo de Briones proponiendo 10 si­guiente Se obligaba a fabricar la Sala de Armas en el puntodesignado y entregarla concluida el dia que los contratantesseiialasen en el remate y en la escritura que otorgaran comola mejor garantia y mas eficaz constancia de 10 que se esti­pulara, debiendo levantar primero dos pretiles 0 antepechosde cal y piedra a 10 largo de las dos calles, con sus explanadasal fin, y en seguida, el edificio, de oriente a poniente, quecontendria la Sala en toda su extension, con una pHa de caly piedra en el centro destinada a almacenar la polvora Paraproceder a la construccion de la nueva casa, demoleria las pa­redes de la antigua, y las levantaria con nuevos materialesen la direccion y forma que se diera a la obra Se obJigabatambien a hacer los corredores de la plaza y los de adentro yun aposento de buena cabida para los pertrechos: a poner enel edificio cinco puertas, dos grandes y tres medianas, con lasarmas del Rey talladas en la que quedara al lado de la plaza,y cinco ventanas, colocando una al oriente junto a un granestribo de cal y piedra que diera consistencia a la pared aempedrar con lajas el corredor por donde pasase la artilleria;y por ultimo, a que todo el material fuese nuevo Don Simon

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Lacayo pidia pOl' remuneracian de todo 10 dicho, la suma dedos mil pesos, mil de presente y el resto cuando entregarala obra.

EI Alguacil Mayor Don Manuel de Icazbalceta mejora aque­lIa postura, pidiendo la suma de mil setecientos pesos, perose hizo el remate en el Regidor Don Jose de Baldelomar pOl'mil seiscientos (1)

ProCUl ando el Gobernador mejorar la condician en que losalmacenes se encontraban, pidia elementos de guerra al Capi­tan General, quien, cumpliendo las apremialltes ardenes diri­gidas pOl' el Rey, de ploteger las plOvincias contra los\ ataquesde las escuadl as enemigas, Ie envia 10 siguiente: cincuentaquintales de palvora, seis mil balas, cien fusUes, doscientas ji·netas, cien frascos y cuatrocientos pedelllales para las armasEsos pobres y mezquinos auxilios eran insuficientes para re­sistiI' a una armada illglesa, pero no podia hacer ot! a cosael gobierno del reino, porque de Espana no Ie venian elemen­tos, a causa sin duda de las guerlas que desde largo tiemposostenia aquella nacian con poderosos enemigos EI Goberna­dol' de Nicaragua quedo satisfecho, y asi 10 manifesto a1 Ca­pitan General en comunicacian de 8 de Febrero de 1743

No habian sido infulldados los temores de una proll'ima in­vasion, ni vanos los pasos del Gobernador para poseer armasy municiones en cantidad suficiellte con que repeler a los in­gleses Pero esta vez no aparecieron pOl' los puertos de SanJuan, Escalante a el Realejo, como en anos anteriores Esta­ban quiza informados de las prevenciones tomadas en Leony Granada, y como sablan tender la vista con acierto pOl' todala extensi6n de la provincia, para sorprender pueblos inde­fensos y obtener sin lucha 10 que no habrian podido porIa fuer­za sino recibiendo grandes males, 5e dirigieron a Matagalpay Segovia, distritos despoblados, lejanos del centro, que nocontaban con el auxilio de otros puebios porIa gran distancia

(1) Los pOlmenOles que acabamos de lelacional en el texto, aeasosean lnsigniflcantes pal a los lectOi es de fuel a; pew los nieRI agiiensespoduln compal 81 las fOi malidades antes Obsel vadas en la canstl uccl6n deobras nacionales. con las que ahOla se ptactican; y conocer el valOi deltIahajo, el de los matet iales y la fOl rna que se usaba en edificio~ de laclase del que se tI ataba de l~vantal

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que de unos a otros mediaba, y cuyos habitantes, careciendode suficientes medios de alimentaci6n, de armamento bueno ycompetentes municiones, sentian natural repugnancia a lasmarchas dilatadas y a la indefinida separaci6n de sus familias

EI dia 4 de Noviembre fue aciago para los mOl adores deJinotega, en el Corregimiento de Matagalpa Ingleses y mos­quitos en numero de ciento cincuenta, bien armados y segu­ros de no hallar formal resistencia, se introdujeron por elrio de Segovia y sorprendiendo a los vecinos, tomaron aquelpueblo sin dificultad de ningun genero, saquearon las casas,despues las incendiaron y se llevaron a sus embarcaciones cua­renta personas

No a muchas leguas de la ciudad de Segovia, residenciadel Sargento Mayor, Comandante de las armas, primer Alcal­de Ordinario y Teniente de Gobernador en aquella jurisdicci6n,Don Pedro Drualino, se halla el valle de Estell, en donde vivianel Alferez mayor Don Juan Antonio Donaire y los capitanesde caballeria Don Juan Montenegro y Don Miguel de ArmasDieron estos noticia al Comandante, de los sucesos de Jino­tega, advirtiendole que el enemigo recorda los trapiches, ha­ciendas de granado y casedos, robaba los intereses, incendiabalas casas y capturaba hombres y mujeres para reducirlos adura y triste esclavitud Entre los presos se hallaba el Co­rregidor de Segovia Drualino les orden6 que marchasen in­mediatamente con sus companias a proteger la comarca in­vadida

Tambien dispuso que el Capitan Sebastian de la Cruz sedirigiese con la compania de conquista al puerto de CiudadVieja y cortase la retirada a los ingleses y mosquitos EI mis­mo Drualino parti6 al siguiente dia hacia aquel puerto concuarenta y ocho hombres bien armados y con municiones su­ficientes, despues de haber dado parte de 10 que sucedia, alGobernador de la provincia, encareciendole la necesidad deauxilios, puesto que tras los enemigos que ya estaban dentrodel pais podian venir otros en numero mayor. Di6 orden alCorregidor de Matagalpa y capitanes que Ie acompafiaban paraque con una guardia de tres hombres de toda su confianza se

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dirigiera al puerto del Rio de Ciudad Vieja, donde ya encon­trarian al Capitan Cruz con su tropa

Esas debian ser las posiciones que ocuparan las miliciassegovianas, pero Sebastian de Ia Cruz, en vez de situarse enel puerto de Ciudad Vieja, cumpliendo las ordenes del jefe su­periol de las armas, acampo a una distancia de mas de tresIeguas Hicieronle juiciosas observaciones los oficiales de Iacompania, sobre 1a seguridad con que pasaria el enemigo porel rio sin ser visto y Ia gran responsabilidad que C6ntraeriasi por su culpa se frustraba el plan concebido por el Coman­dante general, de capturar a los que tantos males causaban enIa desgraciada comal ca, pero eI, enfurecido por Ia reprobacionde sus medidas, contestoles que fusilaria al que no Ie obede­ciera

En Ia misma faIta incurrio el Corregidor de Matagalpapensando mejorar el plan de campana ordenado por su jefe,no se detuvo en el puerto y tomo rio abajo hasta un puntoinmediato a Ia montana de Pantasma, donde Ievanto una trin­chel a de tierra y piedl as Bastante precavido se mostro aldejar una escolta de observacion a distancia de seiscientas va­ras pala que diera aviso cuando divisara al enemigo no tuvoque esperado largo tiempo A las pocas horas de estar alIioyo voces y el ruido de una embal cacion por el Iado del puel­to y en seguida aparecieron los invasores sobre una balsa, conlos vestidos mojados, las almas amarradas y casi dent:'o delagua y la polvora humedecida De Ia guardia de observacionse Ies dirigio un tiro de fusil, y el grito general de horrOl quedielOn demostro el concepto que instantaneamente se forma­ron de que serian capturados sin defensa y pasados en e1 actopor las armas

Pero 1a inteligencia obra maravillas en los lances mas apu­I ados de Ia vida EI ingles que comandaba la balsa dirigioIa palabra a los soldados de Ia emboscada, diciendoles en buencastellano "Cristianos no nos maten: se 10 pedimos por Diosy por Ia Virgen, no queremos pelear» Tomas Alvarado, cabode 1a guardia Ie contesto que espel ase un poco y que partia enel acto a dar parte a su General, que se hallaba en Ia ttin"chera Los de Ia balsa Ievantaron, en senal de paz, bandera

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blanca, formada con Ia camisa de una de las prisioneras deJinotega Lleg6 el Corregidor de Matagalpa a las seis de Iamanana, con eI fin de l'0nerse en relaciones con eI jefe de losingIeses exigi6 a este, en cambio de Ia Iibertad que solici­taba, Ie entregase todos los prisioneros y despojos recogidosen su correria EI ingles, dando Iargas a las discusiones, ofre­ci6 devolver pequena parte, y despues de seis horas, pasadasen capciosas pIaticas, manifestando a veces voluntad de ceder,y a veces arrepentimiento de su Iargneza, se reconoci6 en ap­titud de emprender Ia Iucha Ya era tiempo las armas, Iapolvora y vestidos estaban secos y ellos tras largos trozos demadera coIocados a Ia orilla de Ia balsa, para resistir el ata­que Una descarga dirigida repentinamente sobre los solda­dos nicaragUenses di6 a conocer al incauto Corregidor eI en­gano del enemigo, eI cual impeliendo la balsa con poderosafuerza paso rapidamente por Ia trinchera, sin que sus confia­dos defensores tuvieran tiempo de descargar todas las armasCuando el Corregidor de Matagalpa voIvi6 de su estupor, noencontr6 enemigo con quien combatir un tiro de fusil queresono en Ia montana de Pantasma Ie persuadio de que todapersecuci6n seria inutil y aun peIigrosa

Trat6 DruaIino de averiguar judicialmente 10 que hablaocurrido en Ia invasi6n de los filibusteros, tomando declara­cion a los oficiaIes de la tropa y principales vecinos del corre­gimiento EI Gobernador Lacayo envio al Capitan General Iaactuacion del Comandante , y eI Fiscal de Ia Audiencia, a quiense dio en trasIado para que expusiera 10 que debla practicar­se, Ia devolvio diciendo, que los ingleses no hablan sido cap­turados, porque eI partido de Segovia carecla de un hombreLa disposicion que en 18 de Marzo de 1744 dicto el CapitanGeneral, por solicitud de Lacayo, pal a evitar que eI enemigose salvase con nuevos artificios, fue Ia de suprimir Ia Tenen­cia de Capitan General en los corregimientos, establecida pocoantes, reservando solamente Ia de Ia provincia EI gobiernosuperior dict6 esa medida, teniendo en consideracion las difi­cultades naeidas de Ia situacion politica de aquellos agitadostiempos, y eI sentido comun Ia sancionaba, porque los jefesmilitares, a cuya direcci6n se pone Ia defensa nacional, deben

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ser inteligentes y activos y tener en el mas alto grado amora la patria

La Corte de Madrid, reconociendo la inseguridad en quese hallaban los pueblos del reino de Guatemala por las nu­merosas vias de comunicacion que la costa Norte de Hondu­ras ofrecia a los filibusteros, sin que hubiera en la actualidadmedios de ningiin genero con que poder evitarla, penso queconvenia levantar una fortaleza de donde pudieran salir fuer­zas para perseguirlos POI ese tiempo comenzaron los ingle­ses a poblar la isla de Roatan, desde la cual podian lanzar ex­pediciones aun sobre las costas de Nicaragua, aprov~chandose

del aislamiento en que se haliaban los pueblos de Matagalpay Segovia y las dificultades con que siempI e tropezaba el Go­bernador de la provincia pala darles oportunos socOlros, ra­zon por que se queria que la fortaleza plOyectada cubrierahasta el lejano punto del Cabo de Gracias aDios, sacudiendocon esa medida eficaz y segura la dominacion inglesa que yaamenazaba a todo el reino, desde las montanas de los mosqui­tos por un lado, y desde las islas del mar caribe por otro

EI puerto que debiera ser fortificado fue objeto de largasdiscusiones en la Corte Don Pedro Rivera Villalon, Presi­dente, Gobernador y Capitan General del reino, haqia infOl­mado en su tiempo sobre las ventajas que ofrecian Trujillo yMatina para levantar la fortaleza, tomando en cuenta el pocovalor metalico que debia invertirse en la obra y prescindiendode toda consideracion militar Pero el ingeniero Don Luis DiezNavarro contradijo esa opinion con alguna dureza, en el in­forme que por su parte dirigio con fecha 30 de Mayo de 1744,y del cual se envio copia en 31 de Julio de 57 al Conde de Aran­da, Director general de la artilleria y cuerpo de ingenieros

No opinaba Diez NavarlO que se fortificara el puerto deTrujillo, porque no habia peliglO de que 10 habitaran los in­gleses por 10 abierto de su bahia y ser preciso gastar creci­das cantidades para defenderlo, y aseguraba que les selia taniniitil fortificado como sin fortaleza ninguna, y que hallimdosede uno ii otro modo prestalia su situacion abundantes facili­dades pala recobrarlo

EI puerto de Caballos, distante veintiuna y media leguas

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de la boca del Golfo, corriendo el rumbo de poniente a levante,se halla en la misma altura y longitud del puerto de Omoa:es formado de dos ensenadas: amplia la primera, da entradaa embarcaciones de porte mediano, la segunda, con la figurade una boIsa y cien varas de boca, no tiene en su entradaarriba de tres palmas de agua y carece de las condiciones in­dispensables a un buen puerto Por estas razones no conve­nia levantar en el una fortificacion estable y costosa, como laque se necesitaba para la defensa de la costa en la longitudapetecida

A veinticuatro leguas y media de la boca del Golfo, haciael levante, esta el rio Chemelecon, muy caudaloso: baja delque el a partido de San Pedro Zula, y por el desagua en sumayor parte Por ese rio habian subido en piraguas los zam­bos y mosquitos y robado los pueblos situados a sus margenesa distancia de treinta leguas Su proximidad a Trujillo habriasido peligrosa al castillo que en el se construyera

Tambien habria sido perjudicial el rio de U1ua Esta si­tuado, caminando siempre al levante, a distancia de treintay una leguas de la boca del Golfo es muy caudaloso y rec()rrela provincia de Comayagua en su mayor parte se Ie ',nenmuchos rios grandes y pequenos y pueden surcarlo embarca­ciones que solo requieran seis palmos de agua Muchas vcceslos zambos y mosquitos se internaron por el para robar lospueblos situados a sus inmediaciones

EI puerto de Sal se halla it treinta y siete leguas de laboca del Golfo, en altura de 15" 25', corriendo la costa con in­clinacion al Sudeste su desembocadura mira al Nordeste esmuy pequeno y no tiene fonda para navios en su entrada dela parte de levante En el se encuentra un farallon y las tie­rras son anegadizas e inhabitables

A cuarenta y seis leguas de la boca del Golfo esta el riode «Leon» 0 de «Los Leones», par el mismo rumbo que elanteriOl: es bastante caudaloso y crece notablemente duranteel invierno nace en las montanas inmediatas a la costa lIama­das de «Mulia y Leon» Pudiendo internarse en el hasta trein­ta leguas, servia a los ingleses para el comercio ilicito

Entre el rio Leon y Trujillo esta el playon denominado

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Triunfo de la Cruz Es una ensenada grande que se extien­de hacia el Sudeste, donde pueden dar fondo embarcacionesde gran porte al abrigo de tres farallones llamados los Ftailes:cerca de ese sitio hay tres rios con los nombres del Cangre­jal, la Patuteca y las Marias, todos de escasa consideraci6n

La fortaleza proyectada, por muy costosa que resultaraser, Ii. causa de las grandes terronteras que debian allanarsepara dar paso por crudas montafias Ii. las tropas de su custo­dia, era absolutamente necesaria, a fin de evitar que las ex­pediciones de filibusteros, lanzadas de Roatlin como aves derapifia, invadiesen el reino por aquellos rios y otr0s, que tanfacH entrada presentaban

EI puerto de amoa, situado en la costa de Honduras, yen­do de Poniente a Levante Ii. diecisiete leguas del Golfo, en al­tura de 15" y 23' Y 300" Y 10' de longitud, es una ensenadaque la tierra forma, con iilclinaci6n al Sur. De la parte deLevante sale una punta denominada Omoa, que se dirige delSursudeste al Nornoroeste, capaz de contener en ella amana­dos de veinte a veinticinco navios es seguro en todos tiemposy pertenecia Ii. 1ft, jurisdicci6n de San Pedro Zula, Tenientazgodel Gobierno de Comayagua Don Luis Diez Navarro 10 pre­sento a su General el Marques de Pozoblanco, en aguel infor­me, como el mejor puerto en que podia ser fabricad6 el Cas­tillo para vigilar la costa desde la boca del Golfo hasta el Cabode Gracias aDios Se procedi6 a examenes y comprobacionescientificas Ii. efecto de obviar algunas dificultades que aun pre­sentaba el proyecto enviado por el ingeniero, y por fin fue desig­nado el puerto de amoa para levantar la fortaleza par nohaber otro paraje en que pudiera recaer mejor elecci6n

En varios islotes y tierras anegadizas que llegan hasta lasbocas del rio de San Juan, comprendiendo el Cabo de GraciasIi. Dios, Punta Gorda y Bahia Grande, habitaban los indios mos­quitos con muchas incomodidades y recelandose tanto de losespafioles COT.lO de los ingleses Annque estos los trataban conesmewdas atenciones, ellos no deponian sus temores, porquesiendo barbaros nl podian calificar el merito de aquel porte,ni conocer el fin Ii. que se encaminaba

EI Castillo de amoa correspondia cumplidamente al prop6-

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sito del Gobierno, porque daba seguridad contra las invasionesque los ingleses residentes en RoaHm habrian podido ejecutarpor los numerosos rios que naciendo en el interior de las pro­vincias desembocan en el mar, con agua suficiente para la na­vegacian hasta de treinta leguas en embarcaciones de regularcabida

Pero la proteccian que el Castillo proporcionara no pOdriapasar del Cabo de Gracias aDios, el cual por el rumbo men­cionado es punto extremo de toda la costa de Honduras, si­tuado a ciento treinta y cuatro leguas de la boca del Golfo,en altura de 15' 55', y 305' 50' de longitud La punta de tien aque entra en el mar y un rio que por el desemboca, formabanun pequeno puerto poblado de ingleses y mulatos Ese rionace en la jurisdiccian de Segovia [y antes tambien de Mata­gaIpa, por haber estado unidasj, y 10 hacen caudaloso las aguasde ou'os rios que se Ie juntan Atraviesa los montes donderesidian los indios patucas, jicaques y mosquitos Los sego­vianos Ie daban desde entonces el nombre de rio grande dela Patlta.sma, y tambien de los Erwuentros por encontrarse conel que baja de Matagalpa, Sebaco y Jinotega

EI solo nombre de la Pantasma causaba horror a los ve­cinos del Corregimiento de Segovia Por las cOlrientes cau­dalosas de ese rio hacian los ingleses y mosquitos sus incur­siones casi anuales, con seguridad de buen exito, porque loshabitantes huian sin atreverse a presentarles resistencia deninguna clase Ya se ha visto que el Fiscal de la Real Au­diencia, tomalldo Ia palabra del Gobernador Lacayo, decia enel pedimento presentado al Tribunal, sobre los sucesos deldia 4 de Noviembre, que los invasores no habian sido captu­rados porque el partido de Segovia caredia de un hombre, yel ingeniero Diez Navarro, en su informe dirigido al Marquesde Pozoblanco, se pioducia de este modo:

.Las mujetes que tienen, asi esta nacian Oa Mosquitia)como los zambos e ingleses y demas, las han robado de nues­tras poblaciones inmediatas: por el ano pasado de 1743 saea­ron del pueblO de Jinotega, en el Partido de Matagalpa, cua­renta mujeres y nmos, cuya entrada hicieron cien indios mos­quitos y zambos y cuatro a cinco ingleses, y aunque el corre-

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gidor que entonces era les salia al encuentro con mas de tres­cientos hombres armados y les corta el paso de un rio, contodo, no se atrevia a embestirles Esto he querido decir paraque vea V E 10 que es la gente de aquellos paises y las em­presas que se podran lograr con ellos »

En el mismo infOlme se encuentra un pasaje de la mayorimpol tancia para conocer los limites del territorio, seiialadosantiguamente a Nicaragua y el ensanche de la jurisdiccianotorgada a sus empleados es el siguiente

«Del Cabo de Gracias aDios, caminando por el rumbo deNorte a Sur, hay mas de ochenta leguas hasta la boca del riode Matina intermedia Punta Gorda que esta poblada de in­gleses, Islas de Perlas y otras muchas, y en algunas de ellashay rancheria de ingleses en la pesca de tortugas y corte demaderas para sus servicios, el rio de San Juan, desague delas !am08as lagunas de Managua y Nicaragua, que tiene t1 esbooas llamadas la de San Juan, Twu e y Colorado y los, ios dela ReventazOn, Jimenez y Suer, e: y adelante del rio de Ma­tina, ocho leguas, esta el rio y puerto de Moin, que es hastadonde tengo visto por estar poblado de enemigos a del tododespoblados Me he informado con individualidad de los su­jetos mas practicos de la costa etc»

Y adelante prosigue asi«AI fin de esta iurisdiccian (la de Nicoya) comienza la de

Costa-Rica en un paraje y ,io llamado El Salto hay desde ela la ciudad de Cartago setenta y ocho y media leguas se ca­mina por el rumbo de Poniente a Levante y parte al Suestelos caminos son los mas llanos y mucha parte esta montuosaen todo el no hay pueblos ni ventas, se para en algunos hati­llos de los que van mencionados todo es temperamento calidoy costa del Sur La capital de dicha provincia es la ciudadde Cartago, sus terminos y jurisdiccian por el mar del Nortedesde las bocas del rio San Juan hasta el de Veraguas, quetambien confina con tierra Firme Esta dicha ciudad en elcentro de su provincia porque yendo de la de Nicara1l"ua, co­rriendo de Poniente a Levante con inclinacian al Norte, hayciento dos leguas a dicha ciudad, y de ella al rio de Omoa porel mismo rumbo, 10 mismo, desde el puerto de la Caldera a

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Esparza, que es todo uno y esta en el mar del Sur, treinta le­guas, y al valle y boca del rio de Matina, otras treinta por li­nea recta»

Dentro de los limites de Nicaragua y Costa-Rica, senaladospor el ingeniero Diez Navarro, se hallaba situada la AlcaldiaMayor de Nicoya Con referencia a los limites, decia asi elingeniero:

«EI dia 19 de Enero de 44 lIegue al monte de Nicaragua,que es una asperisima montana en donde remata la provinciade dicho nombre, hasta donde tengo explicado en mi primerviaje, y entre la jurisdiccion de Nicoya, que aunque es Alcal­dia Mayor separada del Gobierno de Costa-Rica, pero este pa­J:aje se reputa por de esta provincia Esta Alcaldia Mayoresta situada en la costa del mar del Sur en la altura de 10 gra­dos corre su jurisdiccion de Poniente a Levante con veintitresy media leguas y de Norte a Sur con veinte por la parte delPoniente tiene la provincia de Nicaragua, por la del Norte lalaguna de Granada 0 Nicaragua, que es 10 mismo, y unas es­pesisima~ montaiias despobladas, a las que lIaman la cordille­ra por ser unos montes que corren seguidos, haciendo frentecon el mar del Norte desde el Golfo de Honduras hasta Pa­nama Por la parte de Levante la jurisdiccion de Costa-Rica;y por la del Sur su mar esta toda esta jurisdiccion despobla­da de pueblos: no tiene mas que el de Nicoya, que es la ca­becera, que esta situado inmediato a un famoso rio lIamado deAlvarado a 14 leguas del mar Por dicho rio suben hasta cer­ca del pueblo navios de mediano porte, entrando primero enel puerto de la Caldera, que pertenece a la jurisdiccion de Cos­ta-Rica en el citado pueblo asiste el Alcalde Mayor y el Curaes de indios y mulatos No hay espanol ninguno etc»

Resulta del informe dirigido al Marques de Pozoblanco porel ingeniero Diez que la jurisdiccion de Costa-Rica no pasabadel rio del Saito y que la de Nicaragua se extendia hasta lagran montana del mismo nombre, quedando en medio de lasdos gobernaciones la Alcaldia Mayor de Nicoya

Hayen el documento de que esos trozos copiamos, una ex­presion vaga y aun opuesta a los hechos de la historia, y esla de que el paraje donde se hallaba la Alcaldia Mayor de

350 HISTORlA DE NICARAGUA

Nicoya era reputado de Costa-Rica No tuvo plesente el in­geniero que el cacicazgo de Nicoya fue conquistado mucho an­tes que la gobernacion de Costa-Rica y que no es razonablepensar hubiese querido el MonaIea obsequiar con el a quienesno 10 habian descubierto, ni conquistado, ni poblado: no tuvopI esente que la villa de Bruselas fne edificada en la costameridional del Golfo de San Lucas 0 de Nicoya, y que des­de 1529 decla..S el Rey de Espana que aquella villa perteneciaa Nicaragua y no a la provincia de Castilla del Oro, de la cualseguia formando parte el territorio de Costa-Rica, segun 10afirma Henera (Historia general y natural etc, de,cada IV,libro VI, capltnlo II): no tnvo presente que Diego Lopez deSalcedo, siendo Gobernador de Nicaragua, mando al CapitanGarabito con sesenta caballos ':I algunos peones a demoleI lavilla de Bruselas, para evitar cuestiones sucesivas con el Go­bernador de Castilla del Oro (1)

No existian en aquel tiempo mas que dos provincias limi­trofes Castilla del Oro y Nicaragua, y habiendose declaradopor el Rey que Bruselas, situada en Nicoya, pertenecia a Ni­caragua, es evidente que no pudo Costa-Rica, al seglegarse deCastilla del 010, tIaspasar los Hmites designados al Gobiel node que formaba parte \

Ese modo de pensar tiene un fundamento irrecusable esla real cedula expedida por Don Felipe II en el real sitio deAranjuez, a 18 de Febrero de 1574 Dice asi «Primeramenteos damos [se dirige al Gobelnador de Costa-RicaJ licencia yfacultad para que podais deSCltbri1 y poblm y pacificar la di­cha plOvincia de Costa-Rica y las atlas tierras y provinciasque se incluyen dentro, que es desde el mar del N01 te hastael del Sur en latitud y en longitud desde los confines de Nica­ragua pO? la pm te de Nicoya derecho a los valles de Chiriqui,hasta la provincia de Veragua, por la parte del Sur, y por ladel Norte desde el Desaguadero que es a la parte de Nicara-

(1) At citalse en el tomo I de esta Histotia el pasaje de Heuela aQue se haec ahOla Iefelencia se Ie supuso colocado en el libiO IV de10. Dec IV, estando en realidad en el VI La equivocaci6n plovino de queen Ja edici6n que tuvimos a 18 vista se cncuentl8. sin duda POl ell 01 ,

serialaria con el ntlmelD IV la pagina en que comienza el cap II <let Iibra VI

LIB VII -CAP IX -INVASION DE INGLESES Y MOSQUITOS, ETC 351

gUCt, todo 10 que COrle la tierra, hasta la provincia de Veragua,y os hacemos merced de la gobernacion y capitania generalde dicha provincia de Costa-Rica»

Si Costa-Rica se extendia hasta los confines dll NicaraguapOl la pal te de Nicoya, es fuera dc duda que los limites deaquella provincia no pasaban del rio del Saito, y que el terri­torio de esa Alcaldia Mayol pel tenecia a Nicaragua, pues dcutra suerte la real disposicion habria dicho que Costa-Ricacompl endiendo el partido de Nicoya, se cxtendia hasta la mon­tana de Nicaragua

Don Dicgo de la Haya, Gobemador de Costa-Rica, dirigioun informc al Rey de Espana, en 15 de Marzo de 1719, conanticipacion de veinticinco anos solamente al enviado por DiezNavarro, en el cual describia los limites de aquelia provinciaen estos terminos:

«La capital es Cartago, ciudad situada en la mediania deeste valle, que es centro de toda la provincia, porque del pUe?­

to de Matina a esta ciudad hay treinta leguas, y de ella alpuerto de Caldera otras treinta esto por 10 que hace a la la­titud, y por 10 que mira a la longitud, desde dicha ciudad alpueblo dc Boruca hay ochenta leguas, y las mismas desdeella al rio del Salto que divide su iU1isdicci6n con la de Nica­1 agua» Asi se entendia en aquellos tiempos la real cedulade Don Felipe II y asi siguio entendiendose en los posterioresanos, como 10 demuestra la opinion de diversos autores que,para no truncal la materia, citamos a continuacion, aunqueescribieron en epoca distinta de la senalada a este volumen

En el DiccionaJio de Don Antonio Alcedo, publicado en 1788,encontramos 10 siguientc

«Nicoya Provincia y Alcaldia Mayor del Reine de Guate­mala, en la America Setentrional, confina '\1 Este con la deCosta-Rica, al Norte con la laguna de Nical agua, por el Estey por el Sur con el Pacifico' es de muy corta extension, y setiene por un partido de la provincia de Nicaragua, cuyo Go­bernador nombra al Alcalde Mayor como teniente suyo »

En la Memolia del estado politico y eclesiastico de la Ca­pitania General y proyecto de division en ocho provincias paraotras tantas diputaciones provinciales, jefes politicos, inten-

352 HISTORIA DE NICARAGUA

dentes y ob!spos, presentada a las Cortes de Espana par elDoctor Don Jose Mariano Mendez, Parroco primero del Sagla­rio de la Catedral de Guatemala y Diputado por el partido deSonsonate, e impresa en 1821, se hizo presente el modo de seractual del Reina, senalandose las poblaciones de que se cam­pania cada provincia y los partidos y pueblos que debian sp·paral se para formar can elias otros nuevos Dio principio parCosta-Rica, y despues de mencionar a Cartago, se expreso enestos terminos

«Primera Esta ciudad es la capital de la provincia de Cos­ta-Rica, situada en el centro a ochDnta leguas de l~ .aya deNicaragua, y otras tantas de la Costa-firme, jurisdlccion deVeragua, a treinta leguas del puerto de Esparza en el mar delSUI y a igual distancia del de Matina en el Norte de suerteque el total del lalgo son 160 leguas y de ancho 60, en cuyoespacio tiene las ciudades de Cartago y Esparza, las villas deSan Jose, de Ujarras, ViJla-Vieja, Villa-Hermosa y los pueblosdel Espiritu Santo, Pueblo Nuevo, Escasu, Alajuela, Bagaces,Las Canas, Barba, San Fe! nando, la doctrina de Cot, Quirco,Tobosi, Curridabat, Boruca, Tenaba y Guadalupe Ag1egan­dole el Pal tido de Nicoya y su anexo Guanacaste, que hacenveintisiete pueblos, que cuentan 46,895 almas par el censo

\

dll 1748 etc»Despues habla de la provincia de Nicaragua, del modo si­

guiente:«Segunda Leon de Nicaragua, una de las cuatro intenden­

cias, tiene Diputacion plovincial, obispo, catedral con numerode canonigos, Colegio y Universidad qe tercera ensenanzaConviene que asi continue, y solo resta que se Ie nombre sujefe politico separado del intendente, y aun 5e juzga necesa­ria una Audiencia pOl distar de Ia de Guatemala 200 leguasSu extension, de 85 leguas de largo y 75 de ancho sepm an­dole' el Partido de Nicoya, Ie quedan los cuatro de Leon, Reale­jo, Subtiaba y Matagalpa, y en ellos cuarenta curatos en ochen­ta y acho pueblos y los puertos, en el mar del Norte, del Fuel tede San Carlos, en ellio de San Juan, Desaguadero de la lagu­na de Granada, y en el del Sur el del Realejo, Cosigiiina, SanJuan, Brito y Escalante Sus habitantes, por el censo de 1778,

LIB VII -CAP IX -INVASION DE INGLESES Y MOSQUITOS} ETC 353

y de algunos pueblos por el de 1795, ascienden a 103,943 al­mas etc»

Es indudable que si el Partido de Nicoya hubiera pertene­cido a Costa-Rica y no a Nicaragua en la epoca en que escri­bio el Padre Mendez, no habria este Diputado pedldo a lasCortes que fuese sepal ado de esta provincia y agregado aaquella

Don Miguel Gonzalez Saravia, ultimo Gobernador Intenden­te del Gobierno espaiiol en Nicaragua, dice que esta provinciatiene la figura de un triangulo casi isosceles, cuyos lados, enangulo un poco obtuso, corren por el Norte de Poniente aOriente desde el Golfo de Amapala 0 Fonseca (vulgarmenteIlamado Conchagua) en e1 Pacifico, a1 rio de Per1as en e1 mardel Norte: desde alli, dirigiendose a1 Sur, con 1a costa y con­fines de Veragua hasta e1 Pacifico, en la punta Buruca, y deella corriendo la base en diagonal hasta el Golfo de Amapala«Esta situada [continua], excluida la parte de Costa-Rica queocupa el angulo del Sur, entre los diez y trece grados con tresminutos de 1atitud Norte, y setenta y seis grados y treintaminutos y ochenta y un grados y quince minutos de longitudde Cadiz Confina al Norte con el Golfo de Amapala, que enparte baiia sus costas y recibe sus caudalosos rios, con laprovincia de Honduras y con las montaiias y territorios queocupan los indios no reducidos hasta la costa de Mosquitos'al Oriente, con el mar de las Antillas: al Sur, con la provinciade Costa-Rica, siendo su linea el rio del Saito, en el Golfode Nicoya, y al Poniente con el mar Pacifico (1)

Juarros asegura: que la «intendencia de Nicaragua con­tiene cinco partidos: de estos el primero, que es el de Leon,tenia titulo de gobierno: el Realejo, Subtiava, Matagalpa yNicoya, eran corregimientos Al presente estan todos los ex­presados cantones reunidos bajo la jurisdiccion del Intonden­te de la provincia, quien tione seis subdolegados, en la ciudadde Segovia, villa del Realejo y pueblos de Subtiava, Matagal­pa, Masaya y Nicoya, y por 10 espiritual estan al cuidado delseiior Obispo de Leon»

Adelante aiiade: «Nicoya, 01 partido mas oriental de la In-

(1) Bos(fuejo politico esfadistico de Nica? agua, 1823

23

354 HISTORIA DE NICARAGUA

tendencia de Nicaragua, h,H1ase situada en los confines de di­cha provincia y de la de Costa-Rica, sabre las costas del marPacifico de suel te que par el 0 tiene el partido de Subtiava,par el N la laguna de Granada, par el E el GobieIno de Cos­ta-Rica, y par el S su mar extiendese 23 leg E 0 Y 20 N S»

Y par ultimo, refiriendose a Costa-Rica, se expresa asi«La quinta provincia y la mas al Levante de todo el Reina,

es la de Costa-Rica, nombre que al presente solo par IIoniase Ie puede dar, pues es la mas miserable y despoblada de estedistrito Extiendese desde el rio del Salta, que la divide deNicaragua, hasta el partido de Chiriqui, jurisdiccion <;Ie Vera­guas, 160 leg de 0 a E y 60 N S de uno a otro mar Susterminos por el mar del Norte son desde la boca del Rio deSan Juan, hasta el Escudo de Veraguas, y par el del Sur, des­de el rio de Alvarado, raya divisoria de la provincia de Nica­ragua, hasta el rio de Burnca, termino del Reino de Tierra­Firme» (1)

Cumple a nuestro proposito examinar y conocer la exten­sion sefialada a la antigua provincia de Nicaragua, en diver­sas disposiciones realoo de aquella epoca, para demostrar lafacilidad con que podian hacer sus incursiones los ingleses,zambos y mosquitos y la imposibilidad de evitarlas c9P forta­lezas levantadas en algunos puntos, dejandoles comodas entra­das por otros muchos

La real cedula expedida par Don Felipe II en 18 de Fe­brero de 1574, transcrita anteriormente, sefiala los limites aCosta-Rica, por el mar del Norte, desde el Desaguade1O, quee8 Ii la parte de Nicaragua, todo 10 que cone la tiena hastala p' ovincia de Vewgua Par esa disposicion el Desaguaderoes parte de Nicaragua Ese rio tiene tres bocas denominadasSan Juan, Taure y Colorado Por manera que el Desaguaderocon sus bocas es un solo rio, como aparece en el plano quecorre entre los documentos de este tomo. La medida del te­rreno correspondiente a Costa-Rica debe tomarse a la orilla delmar hasta la provincia de Veragua por la parte de tierra EIpunto de partida, pues, para la medida es la boca del Colorado,por ser el mismo Desaguadero, que es a la parte de Nicara-

(1) Comp de la hist de ,Guatem Tlatado 1 cap :J"

LIB VII -CAP IX -INVASION DE INGLESES Y MOSQUITOS} ETC 355

gua, terminada en el punto que el Gobernador Don Diego Ar­tieda Chirinos designo al tomar posesion del territorio otorga­do a aquella provincia, segun consta de las diligencias segui­das en 1571, insertas en los folios 365 y siguientes del tomoprimero de esta histOl ia Los acontecimientos posteliores,que seran relacionados a su debido tiempo, confirman estemodo de pensar, por ahora concluimos esta materia de los an­tiguos limites de Nicaragua por el lado del Levante, con la si­guiente reflexion

La boca del Taure, como la del San Juan y el Colorado, esdel rio que se denomino el DesuguadelO si el San Juan y elTaure pertenecen a Nical agua por ser boons del Desaguadero.es evidente que por la misma razon debe pertenecerle el Co­lorado Y se ha visto en los capitulos anteriores, que al Go­bernador de Nicaragua se cometia la jurisdiccion y defensa detodo el Desaguadero Levanto la fortaleza del Taure, pusoguarniciones y atalayas y rindio cuenta de los capitales inver­tidos en los trabajos de foriificacion y en el entretenimientode las tropas No nos dice la historia que las autoridades deCosta-Rica se hubiesen visto nunca en aquellos jm ales, ni des­brozasen un solo palmo de los terrenos inmediatos al Colora­do, ni estableciesen guardas ni vigilancias pal a hacer la de­fensa ni emprendiesen guerra por ese lado para repeler a losingleses y mosquitos Los empleados superiores del reino seentelldieron siempre con los gobernadores de esta provinciapara todo 10 concerniente a la administracion y a la guerra enaquellos remotos lugales, y les constituyeron guardas constan­tes de la costa y cabezas principales en la construccion de todaobra uti!, a las que daban termino rodeados de dificultades ypeligros

Con el fin de aclarar las dudas qne pueden ocurrir sabrelos limites de esta provincia y la jurisdiccion de sus autori­dades por el lado del mar del Norte, conviene tener presenteque para apaciguar las conmociones de Granada, se construyoen las bocas del Desaguadero, por acuerdo de 9 de Diciembrcde 1602 y dtirante la administracion de Don Bernardino deObando, Gobernador de Nicaragua, el fuerte de Santa Cruz,en el cual se coloco uu presidio con guarnicion. Mas de dos-

356 HISTORIA DE NICARAGUA

cientos aiios hace, pues, que Nicaragua ootlt en posesi6n legaltanto del rio como de las tres bocas por donde el gran lagohace su desagiie It la mar No es de nuestro prop6sito empe­iiarnos en profundos razonamientos It este respecto, porqueabrigamos la convicci6n mas intima, de que nuestro examenno ofrece una opini6n ajena de toda controversia entre los de­fensores de los !imites territoriales de antiguo concedidos ItNicaragua y Costa-Rica Como historiadores nos limitamos Itpresentar los hechos, lugalOO, tiempos y leyes que pueden darluz en una cuesti6n par demas debatida sin resultados acepta­bles, y que par razones infinitas de conveniencia so<\ial, debeser resuelta par medios pacificos y fraternales (1)

Continuando el examen de la costa, restanos decir que alNorte de la Alcaldia Mayor de Tegucigalpa se hallan los mon­tes en que habitaban los zambos, mosquitos, chatas, payas,patucas y jicaques, y al Levante el partido de Segovia y Ma­tagalpa, tan hostilizado siempre par sus bal baros vecinos, sintener otro refugio que las fortalezas de los riscos y 10 esca­broso de las montaiias

Dividida la costa del Norte en dos fracciones, una del Gol­fo al Cabo de Gracias aDios, y otra de esa punta hasta Ve­ragua, se trat6 por el 'Gobierno de dar It la primera s.t;guridady defensa, levantando el Castillo del puerto de Omoa, desdeel cual podia emprenderse la persecuci6n del enemigo, tantopar mar como par tierra La segunda fracci6n qued6 comple­tamente descubierta, porque el fuerte de Santa Cruz en lasbocas del Desaguadero, ni fue estable par su mala construc­ci6n, ni bastante It impedir. las frecuentes invasiones que losmosquitos e ingleses, posesionados de la costa y albergadosen las montaiias vecinas, efectuaban par las numerosas entra­das que el terreno y los rios ofrecian, sin que pudiera alean­zarles persecuci6n de ning(ln genero, raz6n por que se ha di­cho repetidas veces, que s610 armando bien los pueblos y dis­ciplinando las milicias habria podido Nicaragua hacer frente

(l) En dos falletos publicados pm el autot de esta obta el anode 1872, con los titulos rle «Considel aciones sohr e la cu~sti6n de Hmiteslerriwriales entle las RepulJlicas de Nicalagua y Costa Rica» y «La Cuesti6n de limites territol iales enhe las Repiiblicas de Nlcroagua y CostaRica_, se ha tlatado con mayol extensi6n esta mateJia

LIB VII -CAP IX -INVASIOlif DE INGLESES Y MOSQUITOS) ETC 357

con ventaja a las hostilidades que ejecutaban con frecuenciaaquellas hordas barbaras, animadas por el apoyo de poderosanaci6n

Por el tiempo a que llega nuestra relacion historica, ocu­rrio un cambio feliz en las iglesias episcopales del reino deGuatemala, y con el se vieron cumplidos los vivos deseos delos pueblos, presentados a los monarcas durante el lapso dedos siglos, por los capitanes generales, los obispos y aun al­gunos ayuntamientos, sin que hubiesen podido obtener favo­rable resolucion Diremos otra vez, que al plincipio de Ill. do­minacion colonial, cuando comenzo el Gobierno espanol a eri­gir catedrales en America, las agrego como sufraganeas a lade Sevilla La de Nicaragua 10 fue despues a Ill. de Lima, ypor ultimo a Ill. de Mexico, perc nada se adelanto con esoscambios las dificultades para los recursos al Metropolitanoquedaron en pie por Ill. distancia de mas de setecientas leguasa que esos reinos se hallaban, los peligros de Ill. navegacion ylos embarazos de todo genero que presentaban los caminos

En cedula de 16 de Febrero de 1717 y en otras anteriores,habian los monarcas pedido informes a los arzobispos y obis­pos de Mexico y a los prelados de las comunidades religiosas,sobre Ill. conveniencia de elevar a metropolitana Ill. catedral deGuatemala Por mas de veinte anos se medito este asuntoDon Felipe V reconocio por fin Ill. necesidad de Ill. ereccion ydispuso que en su real nombre se pasasen oficios a Ill. Santi­dad de Benedicto XIV pidiendole se dignase hacerla, en aten­cion ll.l bien espiritull.l de estos pueblos Defiriendo a Ill. pre­tension expidio el Papa Ill. buill. de 16 de Diciembre de 1743 yconfirio el mismo dill. Ill. insignia del palio al apoderado delnuevo Arzobispo EI Supremo Consejo dio el pase a las letrasapostolicas en 2 de Junio de 1744, poniendo termino con esaformalidad a un asunto considerado como de los mas impor­tantes al progreso del culto religioso, a Ill. expedicion de losnegocios espirituales y eclesiasticos y a Ill. buena disciplina delclera, principalmente en aquellas diocesis en que por muerte uotra causa faltase el obispo y estuviesen accidentalmente go­bernadas por vicarios

Se hallaba en Espana el Obispo electo de Nicaragua, Doc-

3~8 HISTORIA DE NICARAGUA

tor Don Isidro Marin Bull6n de Figueroa, dispuesto a partirpara America, con el fin de tomar posesi6n de su obispadoSe Ie encarg6 la conducci6n del Palio, y 10 trajo basta Coma­yagua, en donde 10 entreg6 al Obispo de Honduras Don FrayFrancisco Molina Este PreIado 10 condUjo a Guatemala de­tuvose en eI pueblo de Jocotenango eI 27 de Octubre de 1745,Y al siguiente dia lIev6 el Palio a Ia ciudad, con asistencia dela parte mas notable del vecindario, y acompanado del Maes­tro Don Fray Jose Cubero, Obispo de Cbiapa, V del CabildoEclesiastico En setenta y cinco forlones se dit igi6 la concu­rrencia al palacio arzobispal, pasando par calles adornadas cangallardetes, colgaduras y flores, y recibiendo calurosos aplau­sos del pueblo entusiasmado En el Oratorio cant6 el Arzo­bispo un solemne Te Deum, y coloc6 soble el altar III area quecontenia la insignia arzobispal

EI dia 14 de Noviembre se bizo la imposicion, con solem­nidad no comun AsistielOn a ella el Tribunal de In Real Au­diencia, el noble Ayuntamiento de la ciudad, los Obispos deCbiapa, Comayagua y Nicaragua EI Alzobispo lIev6 la con­currencia a una casa de placel, en donde se celebr6 Ia exal­taci6n de la Iglesia episcopal a Metropolitana, con siete co-rridas de toros, comedias y esplendidos banquetes \

Don Fray PedlO Pardo de Figueroa ultimo Obispo de Gua­temala, fue el designado para la dignidad de primel Arzobis­po Nacio en Lima, de padres nobles por sus virtudes y sa­ber y por eI celo con que promovio la ereccion de la nueva ar_quidi6cesis, fue considerado acreedOl al elevado puesto que enla jerarquia ecIesiastica se Ie concedi6

CAPITULO X

Nuevas desobediencias de las compaiiias de pardos de Leon

1745 a 1750

COlltinuan las llOstilidaues de Ins ingleses en las ('utonias espafiolas -Proyectan aquellos en Jamaica una expedici6n contla Nicaragua-Plov\'dencias que con este motivQ dietU la COlte de Espufia~Nomblamicnto

de Don Jose Lacayo pala Comandante geneial de esta provincia­Desagl ado que pIodujo en ]08 pm dos de Lc6n -Se reservan al GobernadOl Don Antonio C:iceles las funciones civiles-Nuevas noticins sobi e invasion de los ingleses, llegadas al Capitan genet al de GuatenwIHOldena este que el Ingeniero Don Luis Diez Navallo plDteja con fuerzas Buficlentes el Castillo d(·~ la Concepcion -Pide Diez Navallo noventa y GUatio homtnes al GohezuariOl Caceres - Este pasa la nota alComandante genel al -Actividad de Lacayo en este asunto -01 den<1 alMaestle rie Campo de Leon que envie heinta milicianos pardos al Castillo -Mala ejeeuci6n que di6 aQuel eml)Ieado a esta \>1 ovideneia '------.Desobediellcia de los paldos -Intentan asesium a Lacayo -PI udent(disposici6n del Comandante -Inforrna de estos sucesos al GobieI no Btl

peliOl del leino-Pedimento del Fiscal de la Audienca-Resoludolldel Capitan Gen~lal peldonando ii los sediciosos -Causas de dondeplovenia la tolel ancia de las autal idades supel im es Pal a can los pardos -Cesa Lacayo en las funciones de Comandante -Nomblamientosde Don Juan de Vela pata GalJelnadof y Teniente de Capitiin gencfHIintel ino, y de Don Alonso li'eInandez de Hel(~dia pata los mismos (ill

pleas en propiedad -Continua provisionalmente Lacayo en e1 ejelciciodel Gobielno civil y milital -Melitos y seIvicios de Don Jose AntonioLacayo -Don Alonso Fel mindez toma posesion de sus destinos -Apoderanse los ingleses pal sOIpresa del puelto de San Juan del NOlte­Su restituci6n al Gobiel no espailol POI efecto de In paz de AquisgJ <inIngleses y mosquitos invaden los pueblos de C'amoupa y Boaco -Ho~tilidades cometidas en esas poblaciones

GOBERNABA la Espana el Rey Don Fernando VI, hijo unicovar6n del primer m~,trimonio de Felipe V Cuando subi6 altrono, de edad de treinta y cuatro alios, Ofl ecia por su carac­ter juicioso, moderado y justo un reinado pacifico, en que ven­ci<§ndose las dificultades que presentaba la politica extellla, seconquistase la tranquilidad perdida desde tiempos anteriores

360 HISTORIA DE NICARAGUA

par las guerras sostenidas contI a las mas grandes potenciasde Europa No defraud6 eJ Rey Jas esperanzas de sus pueblos

Pero contra los deseos del Monarca, el Gobierno ingles con­tinuaba haciendo cruda guerra i1 Espaiia y extendia sus hos­tilidades a Jas colonias espaiiolas del Nuevo Mundo En Mayode 1745 lIegaronle noticias de que los ingleses preparaban unaexpedici6n en Jamaica para entrar por el rio de San Juan canembarcaciones construidas a prop6sito, acometer el Castillode la Inmaculada Concepci6n, pasar la laguna de Nicaragua yapodel arse de la provincia

Aunque las amenazas del tenaz enemigo, tenian hasta en­tonces el caracter de simples proyectos, era evidente la ne­cesidad de velar sin descanso en la defensa de esta tierra yacudir con presteza al asomo de cualquier peligro Con esefin dicta el Monarca varias providencias, consideradas efica­ces para malograr el intento de los ingleses y aun pal a re­sistirlos y escarmental10s en caso de insistencia Tales fueronlas de enviar cl1udales, armas de fuego y blancas, p61vora ymuniciones y los viveres necesarios para que en el Castillosiempre hubiese un repuesto: aumentar can cien hombres delas milicias y sus respectivos oficiales la guarnici6n de la for­taleza, procurando que unos y otros fuesen experimentados yentendidos en la disciplina militar mandar de la Habana cienhombres de tropa y sus oficiales, cuatI 0 6 seis artilleros e igualnumero de sargentos, y en su defecto cabos 6 soldados vete­ranos, pal a arreglar y disciplinar las milicias dar orden alGobernador de Campeche de hacer conducir al rio de San Juanuna galera existente en aquel puuto, pal a que unida a las em­barcaciones y piraguas armadas en el Golfo de Honduras, quetambjen debia haber enviado el Plesidente de Guatemala, pu­dieran hacer la defensa de Nicaragua remitir al Gobernadorde Ja Habana cuatrocientos fusiles y sus bayonetas, con orden'de transportarlos a esta provincia, auunciandose que muy enbreve saldria para el mismo puerto otra embarcaci6n con cua­trocientos fusiles, doce piezas de artilleria y las balas corres­pondientes, todo destinado al propio objeto Mand6 tambienel Rey que en Le6n, Granada y otros pueblos se organizase unbatall6n 6 compaiiias sueltas, aptas para servir con prontitud

LIB VII -CAP X -NUEVAS DESOBEDIENCIASj ETC 361

cuando 10 exigieran los movimientos del enemigo 0 hubierainminente riesgo de invasion, y que se construyera, sin per­dida de un instante, en Granada, una media galera con die­ciseis remos por banda, a fin de hostilizar con ella a los in­vasores extranjeros y a los zambos y mosquitos de que esta­ban infestadas nuestras costas

Para ejecutar esas reales disposiciones se necesitaba deuna persona respetable, 'de caracter resuelto y activa en el ser­vicio, y encontrando el Rey esas cualidades en Don Jose AntonioLacayo de Briones, Ie nombro Comandante General de las ar­mas y Ie expidio el titulo en Aranjuez a 4 del mismo mes deMayo, para que presentandolo al Gobernador, Oficiales realesy Ayuntamientos de Leon y Granada y demas pueblos y a loscabos militares, oficiales y soldados, fuese reconocido por talComandante y obedecido en las disposiciones que dictara

Las compaliias de pardos de Leon, conservando en la me­moria los acontecimientos ocurridos por los alios de 1740 y 41,andaban a vueltas nuevamente con don Jose Antonio Lacayode Briones No olvidaban la cruel ejecucion del Capitan DonAntonio Padilla, considerandola como natural consecuencia delcaracter violento que atribuian al ex-Gobernador, de una po­litica ambiciosa y temeraria y de odio frenetico a la raza delos descontentos Sujetos de valer por la posicion social enque se hallaban colocados y con no menos ambicion que laque suponian en Lacayo, a quien concedian capacidad para laintriga solamente, negandole las dotes de virtud civica y demando, enconaban los animos de aquellos soldados para lan­zarlos a nuevos alborotos, pensando sin duda que la mala vo­luntad de tan considerable parte del ejercito causaria en laCorte el desprestigio de su rival Lacayo tenia su residenciaen Granada, y por desgracia suya, y acaso tambien de losvecinos de Leon, habia caidole en suerte llegar a esta ciudaden ocasiones de conflictos, para ejecutar actos de rigor e im­poner severos castigos a personas de alta y baja condicion,ya en su caracter de comisionado de la Audiencia, ya cum­pliendo deberes que Ie imponia el empleo de Gobernador dela provincia

Con frecuencia se yen los hombres politicos arrastrados por

362 HISTORIA DE NICARAGUA

siniestro impulso a situaciones que no quieren, y en que ano­nadados sus legitimos deseos sacrifican los afectos generososy la pIOpia reflexion al deber de secundar 0 ejecutar opinionesajenas, tal vez mal encaminadas y absurdas, Bien puede pen­sarse que Don Jose Lacayo se colocase ahora mal su gradoen punto de iniciar plocesos contra enemigos suyos persona­les, pero que habtia de model ar sus procedimientos por el re­cuerdo de la frialdad con que el Capitan General aproi)o laejecucion del pardo Antonio Padilla

Don Francisco Antonio de Caceres Mollinedo ejercia lasfunciones de Gobernador y 'l'eniente de Capitan General, el anode 1745, a virtud de nombramiento hecho por el Rey (1) Noera Caceres mny diligente en el desempeno de su empleo, ysu poca actividad aparecia mas de bulto en 10 concelllienteal ramo de guerra, tal vez por no pertenecer al cuerpo militare ignorar las practicas legales y apremiantes del sel vicio Porel nombramiento de Lacayo quedaron separadas las funcionesmilitares, casi siempre anexas al Gobierno, y solamente las ci­viles fueron reservadas al Gobernador Caceres Repuntadosy cabizbajos andaban por la elevacion de Lacayo los milicianospardos de Leon Negabanle toda consideracion y confianza,creyendo que BU antigua enemistad Ie impulsaria a diqtar COn­tra ellos providencias hostiles No reflexionaban que nadamedraria con perseguirlos y que el origen de la desavenenciaestaba en las interesadas sugestiones de los que suponiendosedefraudados del elevado puesto que Lacayo ocupaba, no omi­tian medio de perderle, escogiendo siempre los mas ocultoscomo mas seguros

Los acontecimientos posteriores hicieron desbordar la co­lera de las companias de pardos en desobediencias parecidasa las que causalOn la ffinerte de Padilla

Por carta de 18 de Diciembre de 1744 comunico el Virreyde Nueva Espana al Capitan General de Guatemala que habian

(1) Galera Pelaez omlt16 a Cacetes Mollincdo en la lista de los Gobel mHIOl es de Nicaragua agt egada a BU Histo! ia de Guatemala; pero nopuedc dudmse que fue el sucesOi inmerliato de Don Jose Lacavo, comoconsla de la cOllesponciencia que mantuvo con las aUlOlidades del Icinoy con Jas de esta Pi ovincia y de ott as documentos autenticos (.!.ue existencn el antiguo archivo uQ l~ Capitan{a Genetnl

LIB VII -CAP X ~NUEVAS DESOBEDIENCIAS) ETC 363

manifestado los ingleses proposito de ocupar el Castillo de laPura Concepcion, situado a orillas del rio de San Juan ElCapitan General Don Tomas de Rivera y Santa Cruz dispuso,para evitar un ataque repentino del enemigo, que acampaseen aquella fortaleza con la tropa necesaria, el Teniente Coro­nel Don Luis Diez Navarro, Ingeniero ordinario, Inspector delas milicias y Comisario del Gobierno superior de este reino

Poco menos de un ano habia permanecido Diez Navarroen aquel puesto Durante ese tiempo sucumbieron al rigor delclima algunos soldados de la guarnicion, y el mayor numerose hallaba padeciendo a la vez de fiebres paludicas y otrasenfermedades causadas por los miasmas del rio Con el finde reemplazar la tropa, pidio noventa y cuatro hombres al Go­bernador Caceres MoIIinedo, pero este empleado considerando­se sin facultades para disponer de las milicias, paso la notadel Inspector al Comandante Lacayo, jefe de las armas reco­nocido por todos los funcionarios civiles y militares, y a quiencorl espondia el cumplimiento, aunque 10 hiciera provocandoel enojo de los pardos organizados eh Leon

No desmintio Lacayo en aquellas circunstancias su mere­cida fama de activo y diligente en el desempeno de las fun­ciones del empleo que ejercia En 11) de Octubre de 1745 di­rigio de Granada una orden al Maestre de Campo Don FelipeGamez Mesia, para que con dos sargentos Ie enviase treintasoldados milicianos, negros, mulatos 0 zambos, mOZDS y robus­tos, y que librase mandamiento a las autoridades del transitoa fin de que les diesen bestias y mantenimientos de las comu­nidades, como se acostumbraba cuando iban tropas al Castillo

La ejecucion de esa orden era para Gamez muy sencillaBastabale reunir las milicias, escoger en elIas los soldados queposeyesen las condiciones exigidas y hacerlos marchar a Gra­nada con dos sargentos, como 10 habia dispuesto el Coman­dante General No 10 hizo asi En 12 del mismo mes de Oc­tubre, con manoso y artero procedimiento proveyo un autoen que mandaba notificar a los tenientes y demas cabos delas coropanias de pardos, por falta de capitanes, la disposiciondel Comandante para que Ie diesen cumplimiento A las cIarasse veia el malicioso resentimiento de Gamez por las reyertas

364 HISTORIA DE NICARAGUA

anteriores Olvidando la obediencia debida al superior, quisoprovocar la colera de las companias, y que Lacayo, en vez desoldados para enviar al Castillo, recibiese injurias, hijas delrencor y la sana que aun fermentaban en los pechos de aque­1I0s soldados

No quedo en eso la artificiosa e hipocrita conducta delMaestre de Campo de Leon Insistiendo en la venganza quese proponia realizar, consigno en las diligencias levantadaspara el envio de la tropa, las contestaciones de los tenientesJuan Manuel Sequeira, Jose Luna y Santiago Rodriguez y delos cabos requeridos En 13 de Octubre el Ayundante, generalDon Apolinar Clemente Vizcay, encargado de las notifica­ciones, hizo constar que las companias estaban dispuestas aobedecer la orden Pero en un escrito que presentaron a Ga­mez Mesia mas de seiscientos pardos, manifestabanle «queluego al punto fue citada la tropa, a fin de escoger los solda­dos que la orden habia causado general desconsuelo y con­mocion de toda la gente, por los repetidos agravios que habianrecibido del Comandante que se habian denegado por esa cau­sa, ofreciendo dar cumplimiento si separaban del destino aLacayo, y de todo 10 cual daban conocimiento al Maestre deCampo Gamez Mesia para que determinara 10 que dehia ha­cerse»

Con 10 practicado hasta entonces creyo Gamez quedar exen­to de toda responsabilidad, y abundando en esa confianzaenvio testimonio de 10 actuado al Comandante General, comoquien habia agotado los recursos de la autoridad que ejercia,y pensando que todos yerian limpieza en su conducta, celopor su parte en la defensa del pais y respetuosa considera­cion al funcionario de quien emanaba la providencia no cum­plida

Encendiose Lacayo en calera con el descuello de los par­dos, pero trayendo Em su auxilio la reflexion y revistiendosede paciencia para alejar de sus relaciones todo sentimientoinnoble, se limit6 a dar a Gamez la contestaci6n siguiente

«Dicen que si me quitan de Comandante iran al Castilloes proposici6n de traidores desobedientes, porque a nadie Iees facultativo, cumpliendo con mis obligaciones, quitarme el

LIB VII -CAP X -NUEVAS DESOBEDIENCIAS} ETC 365

~mpleo, sino es al mismo Rey nuestro Senor que me 10 hadado con sola subordinacion en 10 militar al muy ilustre Se­nor Presidente, Gobernador y Capitan General del Reino; ytienen obedecido mi real titulo Y estemos que el Rey puedemucho y alcanza mucho Por el presente ordeno a vuestramerced, que de aqui adelante no los tenga ni repute por talessoldados milicianos, ni los ocupe en cosa alguna del real ser­vicio, 10 que ha de cumplir vuestra merced puntualmente De­jelos por ahora envueltos en sus desobediencias, que a su tiem­po proseguiremos 10 mandado: que 10 que se dilata no se qui­ta, y telmino tiene el pecar Tengo ordenes privadas del Rey,Nuestro Senor, para operar en todo con amplias facultades yjurisdiccion sin limitacion, y me manda que refuerce el Cas­tillo con cien soldados milicianos, los mejores, ademas de losde su dotacion Estoy esperando por horas orden del muyi1ustre Senor Presidente, Gobernador y Capitan General delreino para el retiro del Inspector e Ingeniero con la gente quetiene en el Castillo, y entonces avisare a vuestra merced sinecesitare algunos soldados espanoles de las companias de esaciudad Hoy han lIegado los treinta soldados milicianos quepedi al Teniente de Nicaragua, y con otros los estoy embar­cando en el barco de S M Muchisimo pudiera decir a vues­tra merced en la sujeta materia, dejolo para su tiempo y adonde convenga »•

Antes 'que lIegara esa resolucion del Comandante General,la c6lera de los mulatos amenazaba con romper el valladar delas leyes, para lanzalios contra todos los que en conversacionespublicas increpaban el escandalo de la inobediencia. Don Fe­lipe Gamez, Don Pedro Sarria y Don Jose Briceno levantabanel animo de aquellos mal contentos, reuniendolos en casa delprimero para persuadirlos de ser rigurosa, injusta y dictadaeon siniestra mira la orden del Comandante Lacayo Aun co­nocida aquella disposicion las companias no se aquietaronJuan Benavides, vecino de Granada, lIego a Leon con corres­pondencia para el Gobernador, y por ese hecho quisieron ase­sinarlo, suponiendolo portador de resoluciones expedidas con­tra ellos por Lacayo Deseoso de evitar un atentado, el Go­bernador Caceres Mollinedo Ie dio las cartas que habia con-

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ducido, para que mostrandolas a su placer se divulgase el con­tenido de elias y se pusiese coto a las amenazas que a Bena­vides apenaban

EI Dean de la Catedral paso como a las once de la nochedel 24 de Octubre a casa del TesOlero Don Juan Morras yMaule6n, con objeto de manifestarle que en esos momentoshabia recibido aviso de persona fidedigna, de que se alistabandoscientos mulatos del barrio de San Felipe para ir al caminode Nagarote a encontrar al Comandante General y asesinarloCiertamente se proponian ejecutar ese atentado, pero desis­tieron del viaje al saber que Lacayo permanecia en ,Granaday que era fals~ la noticia de haIIarse en camino para Le6n

Graves eran las dificuItades que a cada paso suscitaban lospardo'S a los gobernadores y a otros empleados supel iores dela plovincia, dando clara muestra del cal{Leter subversivo deque estaban poseidos pOl' intereses que no eran de ellos, y deque servian de instrumentos a pasiones extranas

Durante el curso de pocos arros habian dado origen a per­tm baciones y delitos muy trascendentales En 1725 resis­

.tieron con arma en mano a Don Tomas Duque de Estrada,habiendose sublevado a causa del nombramiento de Maestrede Campo hecho en Don Vicente Luna y Victoria, Con egidorde Subtiava designado Lacayo pOl' e) Gobierno superiOl paraque con el caracter de Comisario pesquisara sobre los tumul­tos y motines de las milicias de Leon, se vi6 en la necesidadde proceder contra algunas personas, pOl' 10 que se CI io el Pes­quisidor crecido nfunero de desafectos y de enemigos enbe losmulatos Poco despues contribuyeron a la muerte de Don An­tonio Poveda, y semejante atentado qued6 impune a DonBartolome Gonzalez Fitoria Ie faItaron al respeto muchas ve­ces a Don Antonio Ortiz 10 ultrajaron hasta arrojarle dentrode la casa una bomba encendida, y con una piedra hirieron enla cabeza al que ejercia las funciones de Alcalde Ordinaiio dela ciudad POl' ultimo mas de ochocientos pardos acaudilIa­dos pOl' Antonio Padilla se opusieron a la posesion de Lacayocuando fue nombrado Gobernador interino de la provinciaCon rawn, pues, se abstenia en 1745 de pasar a Le6n parahacerse obedecer, y se limit6 a dar cuenta circunstanciada al

LIB VII ~CAP X -NUEVAS DESOBEDIENCIAS, ETC 367

Capitan General, de 10 que a la saz6n ocurria, pidiendole pu­siese eficaz remedio a las turbulencias de los pardos

«Hallandome [Ie decia en 17 de Octubre] con la honra quela innata piedad de Su Majestad, Q D G por su sola digna­ci6n hace a mi humildad con el empleo de Comandante Generalde las armas de esta provincia, con dos mil pesos de sueldo,con sola subordinaci6n a Vuestra Senoria, por real titulo Ii­brado en Aranjuez a los cuatro dias de Mayo de este ano, elque tienen obedecido el Gobernador, Oficiales Reales, cabildos,cabos y oficiales militares, y estoy en posesi6n con regocijogenel al de toda la provincia, plocedi a juntar noventa v cua­tro soldados militares, que por carta del Castillo, 18 de Se­tiembre, pide el Inspector, Ingeniero y Comisario de VuestraSenoria, para remudal los que tiene en la campana, libre or"den para que el Maestre de Campo de Le6n Don Felipe GamezMes;a pidiese treinta soldados a los tenientes [por no habercapitanes] de las. tres compan;as de pardos de dicha ciudad, yse han denegado a remitirlos, sin mas motivo ni fundamentoque porque soy Comandante general, y que si me quitan delempleo vendran los soldados En vista de esta grave desobe­diencia, prove; orden privandolos del fuero militar y que elMaestle de campo no los ocupase en cosa alguna del real ser­vicio, que los dejase envueltos en su desobediencia y que a sutiempo se 1emediarian etc »

Tambien esta vez, como tramite de derecho, se di6 cono­cimiento del proceso al Fiscal de la Audiencia. Servia ese des­tino cl Lie Roque Ibarra, quien con vista de los documentosenviados por Don Jose Lacayo, pidi6 en 15 de Noviembre quese admitiese la renuncia dirigida por Don Felipe Gamez Mesiadel empleo de Maestre de Campo, mandandose librarle despa­cho de ,efOlma que para restablecer el sosiego en esta ciudadfuesen confinados a Granada Gamez, Sarria y Briceno, dondedeberian permanecer a las 6rdenes del Comandante General,mientl as la Real Audiencia no dispusiese otra cosa: que sedieran instrucciones a Lacayo para que procurase atraer a lospal dos con la sagacidad que su prudencia Ie dictara, hasta so­meterlos a su obediencia, sin que lIegal an a entender que laautoridad flaqueaba, y que si conocia que habia quienes tra-

368 HISTORIA DEl NICARAGUA

taran de impedir el cumplimiento de sus determinaciones, losseparase del cuerpo de uno en uno y los colocase donde nohicleran dano, ocultfmdoles el designio

EI pedimento del Fiscal Ibarra se diI igia a remediar elgrave mal de las sublevaciones, removiendo las verdaderascausas Consideraba necesaria Ill, separacion de los instigado­res Gamez, Sarria y Briceno para que el Comandante pudiera,sin dificultad, someter a su obediencia las companias de par­dos Pero el Capitan General Rivela y Santa Cruz penso quecon mas seguridad se lograria el objeto, siendo con todos in­dulgente Esta fue Ill, resolucion que dicta

«No obstante que por cartas-ordenes de fecha 'once 'elcorriente se tiene dada la providencia al Comandante General,Don Jose Lacayo de Briones, al Gobernador de Ill, provincia yOficiales reales, SObl e el principal punto de Ill, buena corres­pondencia y cumplimiento de sus cargos respectivamente, lasque paran en el cuaderno de autos seguidos en esta CapitaniaGeneral sobre intentar los ingleses invadiI el Castillo de Ill,Inmaculada Concepcion del liD de San Juan, Iibrense los des­pachos correspondientes a los mencionados ministros con Ill,inserclon del parecer del Asesor, librandose otro al Ayunta­miento de Leon, para que por su pal te ponga los medios maseficaces a contener a los sugetos expresados en el citado pa­recer, a quienes par ahora, usando de conmiseracion, no meconformo con Ill, salida de ellos de Ill, ciudad de Leon a parajedonde ni aun remotamente puedan influir, apercibiendoles queal mas leve antecedente que se tenga en esta Capitania de nohabel se contenido y cesado en sus influencias y coadyuvadopor sus partes a Ill, ejecucion y cumplimiento de 10 que orde­na,re el Comandante General en puntos tie guerra, remisionesde gente al Castillo y demas que por razon de su empleo pueday deba, se proceedra a Ill, punicion con todo ligor»

Siempre politico Don Jose Antonio Lacayo, rindio las gra­cias al Capihin General por el acierto de su sentencia , perodebe presumirse que en su ulcerado corazon quedo indeleble­mente impresa Ill, repugnante indiferencia con que aquel fun­cionario habia visto los ultrajes y amenazas que sin razon nirespeto Ie infirieron sus mortales enemigos

LIB VII -CAP X -NUEVAS DESOBEDIENClAS) ETC 369

Corresponde al objeto de Ill. historia seiialar las causas porque los capitanes generales se abstenlan de castigar como eradebido a las desenfrenadas compaiilas de pardos, hasta pre­sentar singular contraste con la conducta observada por DonJose Lacayo en la ejecucion del Capitan Padilla

Antes de la introduccion de los negros habla en Nicaraguatres razas Ill. indlgena, la espaiiola peninsular y Ill. criolla de­rivada de esta Muy poco hablan progresado las dos ultimas,porque era corto el numero de espaiioles y corto debla ser elde sus descendientes, y la primera, como 10 demuestra el tes­timonio de los Obispos Las Casas y Carrasco, estaba casi des­trulda por las muchas causas anteriormente seiialadas.

La escasez a que Ill. raza indlgena habla quedado reducidapor la destruccion sistematica que en mala hora emprendieranlos conquistadores y sus inmediatos descendientes, hizo pensara los pobladores de estas tierras en la introduccion de africa­nos para el laboreo de las minas y demas trabajos del campoEl Obispo Las Casas habla creldo que eran necesarios, y elObispo Carrasco los pidio con instancias en memorial dirigidoal Rey «Que su Majestad, decia, mande dar licencia paratraer seiscientos mil negros y los mande dar pagados en tresaiios por el coste, con los cuales se podrian hacer grandes he­redamientos de cacao que es la riqueza de las Indias, y en estaprovincia se han perdido grandes heredamientos de ello porse haber consumido cuasi todos los indios y no habia antesotra riqueza Esto es la provincia de Guatemala, rica solopor tener cacao tres 0 cuatro pueblos de indios, que lIamanlos Izalcos, en solo espacio de tres leguas Y tiene esta pro­vincia sesenta leguas continuadas y mucho mejor tierra paracacao Podrianse hacer grandes heredamientos de seda y gra­na y de otras muchas casas que valiesen mucho en todas lasIndias y en Espaiia, y por falta de negros no hay hombres entoda la provincia, porque los indios solo sirven para hacermaizales y algodon para pagar sus tributos, y aun para estono son.»

El Obispo de Nicaragua pinto con vivos colores los benefi­cios de la inmigracion, seiialandola como primera de las ne­cesidades de este pais, como elemento de vida en Ill. formacion

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370 HISTORIA DE NICARAGUA

de nacientes sociedades, como fuente copiosisima de la rique­za nacional y como suplemento de poblaciim, indispensable parael cultivo de estas fertiles tierras, que sin abonos ni riegosproducen en prodigiosa abundancia el cacao, el indigo, el cafe,la cana de azucar, que encierran en sus entranas ricas minasde oro y plata, que presentan facH y comodo transite de unoa otro mar, poniendo en contacto pueblos de distintas zonas,y que con su variada y exuberante riqueza ofrece opimos fru­tos a los que empufian el azadon y el arado para extraerlosde su inagotable seno

El Ayuntamiento de Guatemala habia pedido permiso alMonarca en anos anteriores para introducir Ilegros afrkanosque se dedicasen a los trabajoa de las minas, del anil, del cacaoy otras producciones de la tierra, pero no habia podido obte­ner una resolucion favorable, y antes bien se prohibio que sinIicencia expresa del Gobierno pasasen a Indias algunos escla­vas negros Ilamados gelofes Sin embargo, con Iicencia 0 sinella, venian negros en abundancia tal, que habiendose alean­zado el permiso general de introducirlos en America, a losveinte alios se consideraba que en el reino de Guatemala exis­tian mas de los necesarios al fin propuesto

«Deede aquel momento, dice el sabio publicista Don JoseMaria Samper, se decidio el porvenir de la Colombia espanolao latinizada i Inmensa revolucion en la civiHzacion y en lapolitica! De seguro, ni Las Casas, ni el Rey de Espana, nisus ministros y lugal tenientes Ilegaron a sospechar que al rea­lizar semejante medida obraban como revolucionarios, servianla causa de la unidad cosmopolita del progreso y preparabanen Hispano-Colombia el leinado de la Republica democrati­ca» (1)

EI Senor Samper clasifiea la poblacion de la America Es­panola, del modo siguiente

«Las razas y variedades espanolas,Las razas y variedades indigenas;

'(1) Ensayo SOb1 e las ~ evoluciones polfticas y lo condicion social delas Republicas de Cblombia El mitOt da el nO!11ble de Colambia a laparle del Nuevo Mundo QUe se extiende desde el Cabo de HOI nos hastala frontel a septenb iona) de Mexico y llama Colombia Central a los Jstmas de Panama y Cent! Q Am~Iica

LIB VI! -CAP X -NUEVAS DESOBEDIENCIAB, ETC 371

Las castas de diversas razas indigcnas confundidas por laaccion de la conquista y la colonizacion,

La casta mulata 0 derivada de blancos y negros,La casta zamba nacida del cruzamiento de indios y negros,En fin, la gran variedad de castas secundarias, nacidas del

cruzamiento sucesivo de negros y mulatos, mulatos y blancos,indios Y l1,'ulatos, indios y zambos etc»

En el fondo de esta diversidad se ven solamente tres ra­zas primitivas la europea, la indigena Y la africana Peroes un hecho por todos reconocido que merced a las modifica­ciones formadas por el cruzamiento, siempre inevitable en so­ciedades incipientes, la gran mayoria de los nicaragUenses per­tenecio a las castas mixtas, y por amistad 0 deudo generalizosus influencias de un modo prodigioso Los espaiioles penin­sulares y aun los criollos eran inferiores en numero, y si masfuertes en tiempos normales, por su arrimo a la autoridad,mas debiles en los momentos de trastornos publicos, en quela autoridad misma careeia de poder bastante para refrenarla efervescencia de la muchedumbre

Debe suponerse, pues, que el Capitan General trataba conblandura a los pardos 0 mulatos, para evitar funestos esean­dalos que habrian podido revolver las provincias de este reino,colocadas en igual situaeion que Nicaragua, y aun causar dis­turbios en otlos de Hispano-America, nada satisfeehos del or­den existente por la faita de igualdad en su eondicion politieay social (1)

Ceso Lacayo en el destino de Comandante General euando

(1) En cl capitUlo Xl del 1iI11 0 I, P'.lI te 2' de In Histoiia de: EspanaPOI T nfuente se eneuentta In nota que dice asf (fEstas mUlados (de dondevilla nuestl a voz ?nUlato), mllzlilas, inozlemi{as 11 mcwludincs, el an lOShijos 6 nietos de musulmanes no pm as sino C!U(' habi3n sido ct istian081 enegados 6 hijos de Cl istianas y musulmanes 6 de 111usulmana y Cl istianoComo el numer 0 de los espanoles et a infinitamente mayO! que el de lasfamilias at ahes y se fuel on haciendo matI imonios mixtos; 81 cabo de algunas genet aciones ('1 an ya mas los mulados que los al ahes pm as: deaqui las rivalidades de familias y muehas guerras de que herons dadoeuenta II

Be ve, pues, que 1a palahl a mulato fue tl as1adada a Amel iea por analogia Desde algunas genet aciones se hallaban en gl an mayOl ia los mulatos En ellos se apoymon nuestlos padtes pata a1eanzal Ia indepl'ndencia:can ellos In sostuvieIOn en dilatado tiempo; y ellos son e1 mayOl numerode los habitantes de las Repllblicas hispUI10 amel icanas, sin difelenciade CI iolIos mestizos, etc

372 HISTORIA DE NICARAGUA

se hizo innecesario conservarle en el, por haberse extinguidolos temqres de guell a que impulsaron al Monarca a hacer esenombl amiento y porque de Espana habia de venir quien de­biera subrogarle

Por cedula de 23 de Agosto de 1745 fue nombrado el Co­ronel Don Juan de Vel a, Gobernador y Comandante Generalinterino de la provincia, con facultades de tomar a su cargo elgobierno 0 depositm 10 en persona de buenas dotes, mientrasDon Alonso Felnandez de Heredia, nombrado propietado enla misma fecha, y encargado de la defensa contra los filibus­telOs, no llegal a por el lado de Panama con artillerill;' tropa ymuniciones Los documentqs que tenemos a la vista no danrazon de las causas que hayan impedido a Don Juan de Veraposesionarse de sus empleos, pelO si de que en vi! tud de la fa­cultad otorgada en su nombl amiento los deposito intednamen­te en el Sargento MayOl Don Jose Antonio Lacayo de BrionesPOl manel a que si este ces6 como propietal io continuo en elgobierno civil y milital en calidad de suplente

Elste es el lugar en que oportunamente puede darse noti­cia del origen y meritos de Don Jose Antonio Lacayo de Brio­nes Injusticia grande sel ia guardar silencio sobre las rele­vantes dotes del hombl e publico, que desde simple soldado pres-

. \to importantes servicios al 1eino, hasta subir al ultimo grademilitar que podia obtenerse por merecimientos adquiridos enestas provincias

Segun informe que al Rey dirigio el Cabildo y Regimientode Granada, en 6 de Febl era de 1711, consta que era hiiodalgonotorio, nacido y bautizado en las ciudades de Estella y Bianadel leino de Navarra Siendo Alferez de la infanteria espa­nola del numero, fue promovido a Capitan en 22 de Marzode 1707 Despues ejercio el destino de Tesorero del papel se­llado de las provincias de Nical agua y Costa-Rica En 12 deSeptiembre de 1710 fue nombrado Sargento Mayor de las mi­licias de infanteria y caballeria, y en 11 de Diciembre de 1712,Justicia Mayor y Capitan General de la provincia de Costa­Rica, por muerte del Gobernador Don Lorenzo Antonio de laGranda y Balbim Fue sindico general y dos veces primerAlcalde ordinaria de Granada y Teniente de Gobernador En

LIB VII -CAP X ----:-NUEVAS DESOBEDIENCIAS} ETC 373

la causa que se Ie sigui6 por la imputaci6n de comercio iIi­cito con los extranjeros por el valle de Matina, fue absueltoa virtud de sentencias de 28 de Mayo y 12 de Junio de 1720,y declarado recto, Iimpio y justificado ministro, digno de queel Monarca Ie honrase con los empleos que fuesen de su realagrado Esos fallos fueron confirmados en todas sus partespor la Real Audiencia, en 16 de Agosto En ese mismo anoobtuvo e1 nombramiento de Teniente de Capitan General yGobernador de la provincia, destino que ejerci6 en los anos sub­siguientes

En 1729 Don Jacobo Valdivia Marin de Velasco, Don JoseAntonio Lacayo de Briones y Don Teodoro Caceres de 1a Vega,pretendieron ante el Ayuntamiento de Granada, cada uno parasi, el oficio de Regidor y Alcalde provincial Se forma un ex­pediente para determinar la preferencia hubo cxtensos escri­tos y acaloradas discusiones Valdivia era persona de granvaler, pero residia en Segovia como COl regidor y Teniente deCapitan General, y sus influencias, que estando presente quizahabrian sido decisivas, lIegaban debiles a Gl anada desde tanlal ga distancia EI Ayuntamiento 10 elimin6 del concurso,fundandose en que no era veclno de la provincia, y quedaronsolos en el palenque Caceres y Lacayo Por fin triunf6 esteliltimo si Valdivia, situado en Granada habria sido rival po­deroso de Lacayo, este en toda situacian 10 era de Caceres

Largo seria enumerar los importantes serviclos que en cir­cunstancias dificiles prest6 a Nicaragua como militar experto,activo y de indisputable valor, hasta lIegar a 1745 en que Iehemos visto ejerclendo interinamente las funciones de Gober­nador y Comandante General, por dep6sito que en el hizo elCoronel Don Juan de Vel a Baste consignar que en el juiciode residencia que se Ie siguio par el Juez Don Antonio Ibanez,se declaro que habiendo servido por espacio de cincuenta anoscontinuos a satisfaccion de los superiores, era acreedor a quela Real Audiencla 10 tuviese presente para 10 que se ofre­clera en el real servicio (1)

(1) Ocho ai\o~ halJ[an ltatlSCLUlidu upcnas desclc tos :gUc..eROS anibalelacionados en 10f'; que Don Jose Antonio fue principal Y mas distingUido pelsonaie Y ya la advcl.:;a fOltuna }e tenia sepultado hajn las luinasde su antel iOI pi estigio sin que bastasen a salvalle ni sus gl andes facul

374 HISTQRIA DE NICARAGUA

En Diciembre de 1746 tom6 posesi6n del Gobierno politicoy militar de esta provincia el Mariscal Don Alonso Fernan­dez de Heredia, a quien confiri6 asimismo el Monarca ia Co­mandancia de armas de Costa-Rica, dejando el mando civil acargo del Gobernador Don Francisco Fernandez de la Pastora

tades inlelectualcs, ni los irnlJOl lantes sel vicios que habia pi estado dulante su latgu(sima vida publica con pelsevelante patiiOlismo nl I...altut a de su P8sada nomhl allia EI tot cedOl de la pobl eza hadale tI aba10S0S los postr elOs dias de 8U fatigarla existencia; y es de pI esumil seque cBtaba de~alentado POt las muchas deccpciones Que Iecibia en lavelez, principalmente pOI 111 negativa de los sueldos Clue en su entendelse Ie adeudaban .

Debemos recoal.u que en el noml.H8miento de Comandante Gencla) seIe asign6 la lenta de clos mil pesos nouales EI sostenia Que eBa pensionuel>Ia ser vitaticia; pOlqUC con ella habia OUCI ido el Monalca lemuneI aI Ie los SCI vicios de toda clase Pi estados a 1'1- naCi6n: los Oficiales Realesalegaban que los dos mil pesos elan sueldo del destino, y que estabancolocados en la n~cesiuarl fie suspendet el pago. en raz6n de hailel c~sad~en BU desempeiio En tal sltuacion cleyo el ex t'omandanlc Q.ue Ie haliajusticia el Gobiel no, y dit igi6 al ('apitan Genel alia leptcsentacion Quepasarnos a inser tal

«Excelentisimo Serim: Can el mayOl lendimiento OClUIO a v E paIaque se digne mandai a Oftclales Reales de Le6n me paguen el sueldoque gozo POI melced del Rey de Comandante de las miliclas de esta PIOvinela de NJcaragua. en premio de cincuenta y ties afios de continuosselvicios en di(elentes empleos, a satisfacion de mis supetiOles, comoinfol mal a a VEla adjunta relaci6n ajustada y el testimonio de la sentencia de mi ) esidencia del tiempo que Cui Gohel naum interino de estaplovincia Espeto de la glamleza de V E se apiadaui oe O1i :pvanzauaectad; Que por ml rm taleza no me impicle pal a cl sel vicio. pues no tengootta cosa con que mantenel me Dins guarde a v E muchas aoos enmas elevado:3 empleos-C[udad de Glanada y EnclO 8 de 1753-J08";Lacayo ))

Pala resolvel en esa solicitud dispuso el Ptes!dente GolJelnador y eapitAn Genelsl del Reina Don lose Vasquez Plcgo l\lotllaos y SotomayOloft al Fiscal Licenciado Lopez de UII uela y pidio if01 me al ex Gouel nadOl de Ntealagu<I Don Alonso Felnandez de Heledia Ambas conteSlaciones ruelOn favOiables a Ia peticion de Lacayo; pelO en 10 de FehlclO delplopio ana, el Capitan Genel alIa desech6 pm sentenda que dice aSl:

IIlNo ha lugat la contlnuaci<'in de sueldo de dos mil pesos o_ue estapalte pide; y tespeclo de (JUt' ('(lI)1)ecuentc a la explesa clausula del titulode Comandante Genelsl lte las almas de la plovincia de Nic81agua queS M fue selvldo confelitle, esta bien patente que el explesado sueldo de dos mil pesos que con dicho empleo se Ie seftu16 solamentedelle gozmlo POI el tiCll1JJO que 10 silvi6 como (tue desdc el dia que cesl!>cn el eXPlcl'ado mantIo no debi6 uhnnall::iele mas dicho sueldo, lil)lese despacho comeliuo al Gobel nador :} Ofidales Heales de In plovlncia de NlcaI agua. pal a que dent! 0 de un bl eve l(~l mino infm men a cste SUP(!t lmGoblerno con justificacion en vii tud de que 01 denes 6 Pi ovidencias seha cstado pagando a Don Jose L<1(~'\YO cl sucldo de dos mil pesos dcsdeque ceso en ci C31go de ('omandantc Genelal de las allnas de aquella plOvincia, hasta ah0l3 explesando can documemO::l iudicial<.'s de quien hanpIocedido Ia:; oldcnes pala la satisfaccion de l:iemejante sueldo que COilforme a In Ical mente de So M dell16 ccsat deliue el dia llue entIa Don

LIB VII -CAP X -c--NUEVAS DESOBEDIENCIASJ ETC 375

Poco tiempo hacia que Fernandez de Heredia desempenabasu destino, cuando ya tuvo que tomar las armas para repelela los ingleses que por sorpresa se apoderaron del puerto deSan Juan del Norte en 1748 Pero la paz de Aquisgran, queen Europa puso fin a las fatigas de la guerra mantenida granb echo enb e las principales potencias, trajo tambien hastaAmerica sus influencias beneficas, aunque no con la plenitudestipulada en el tratado definitivo de 18 de Octubre de aquelano En uno de los principales capitulos del convenio se es­tipulo la restitucion mutua de las conquistas hechas desde elprincipio de la guerra, y en fuerza de ese solemne compromisoel gabinete Ingles mando devolver a Espana el puerto de SanJuan, poco antes ocu,Pado por sus fUelzas navales

Para completar esta materia, veamos el estado en que sehallaba la Mosquitia durante los ultimos diez anos a que lIegael presente libro

La proteccion que los ingleses residentes en Jamaica dabana los zambos y mosquitos para sus incursiones en pueblos deNicaragua y Honduras, y el trafico inmoral que con ellos sos­tenian, proporcionandoles armas de fuego, polvora y municio­nes a cambio de indios esclavoS", excitaban justamente la in­diguacion de la Corte de Madrid, la que por medio de su em­bajador en Londres se qllejo al Gobierno britiinico, en 28 deOctubre de 1739, por aquellos procedimientos

En 1740 el Gobernador de Jamaica, Trelawney, dirigio unacarta al Duque de Newcastle, en la que Ie aseguraba que a lasazon existian como cien ingleses en la costa de Mosquitos,y Ie sugeria el plan de ocuparlos exclusivamente en excitar alos zambos para una sublevacion general contra los espano­les EI Gobierno britanico se propuso dar otro paso de mas

Jose Lacayo a sel Teniente Genewl del COlonel Don Juan de Vela Yliquidandose Ia cuenta desde aquel dia hasta el en que dej6 de abonarselese expresal a asimismo el total de la cantidad Que ha pel cibido, par a convista de todo tomar la plovidertcia Que parezca mas confOl me a indemnizar la Real Hacienda de todo pel juicio La cual provey6 el Excelentisimo Senor Don Jose Vasquez Plego Montaos y SotomayOl, CaballelO dela Olden de Santiago, 'Teniente Genelal de los Ieales ejelcitos de S M,Gobel uadOl y Can,itan General de este Icino y Presidehte de esta Real Audiencia -Jose Antonio de Aldama)l (Testimonio de las reales oulenes de5 de mayo de 1745, comunicadas a Don Jose Lacayo de BIiones etc Ar~

chivo Nacional )

376 HIlJTORIA DE NICARAGUA

avanzadas consecuencias: la sublevacion era solamente unamedida hostil que podia colocar it Espana en dificultades se­cundarias y que concluyendo con la guerra, solo habria ofre­cido it los ingleses una utilidad transitoria y baladi EI mismoGobernador en su comunicacion deiaba entender toda la exten­sion que podia darse al proyecto, cuando decia que la insurrec­cion debia genmalizarse en todas las Indias, para lwnzar deellas Ii los espaiioles Este plan consistia en la ocupacion de­finitiva de la costa POl' parte de Inglaterra

Con objeto de realizar tan vastos propositos, comision6 elGobernador a Roberto Hodgson, pal a que pasando it la Mos­quitia, emprendiese los trabajos preparatorios que debian darpOl' resultado la usurpacion de aquella costa, a cuya conserva­cion y defensa no baataban las fuerzaa de las autoridades es­paiiolaa L1ego el Comisionado it su destino el 8 de Abrilde 1740 En 16 del mismo mes convoco it los principales indiosde la comarCa it una junta general que el presidio Hizolesverla conveniencia de darse publicamente pOl' subditos del Mo­narca bribinico: les leyo las bases que el habia redactado re­lativas al mismo objeto les pregunto si tenian algo que opo­ner, y habiendo conteatado ellos que no, mando izar la banderaingleaa y tomo posesion del tel ritorio, ofreciendoles defender­los y proporcionarles recursos de Inglaten a Este acto, it quelos ingleses dieron el nombre de cesi6n del tenitorio de Mos­quitos fue solemnizado can disparos de artilleria, y concluido,el Comisionado obsequi6 can licores al Rey de los Moscos y de­mas concurrentes

Envio Hodgson loa al'ticulos al Gobernador de Jamaica, yen comunicacion que Ie dirigio posteriormente, fechada en lalaguna de Chiriqui, Ie pidio que confirieae nombramientos dealmirantea y generales a faVOl' de algunos moscos Solicitoaaimismo Ie mandase soldados que custodiasen su persona yla defendiesen contra toda asechanza de los espaiioles, y aunde los indios, it quienes temi!l/ el Comisionado mas que itaqueJloa

A la Hamada cesion del terri torio se siguio la traslacion decolonos de Jamaica it la costa de Mosquitos, el envio de tro­pas de aquella isla el) auxilio de los usurpadores [1744], Y mas

LIB VlI - C:P x - NUEVAS DESOBEDlENCIASj

ETC 377

tarde [1748J el de un refuerzo de artillerla para defender losestablecimientos ingleses En el propio ana de 1744 fue nom­brado Hodgson, en premio de sus servicios, Superintendentede la Mosquitia, con dependencia del Gobernador de Jamaica

En 1749 [22 de Diciembrel, ingleses y mosquitos invadie­ron los pueblos de Camoapa y Boaco, sin que el Gobierno bri­tanico se dignase fijar la vista en el teatro de esos desorde­nes, con los cuales se perpetuaba la lucha en estas rcgiones,despleciandose las clausulas del reciente tratado Saquearonlos enemigos la primera de aquellas poblaciones, y las desgra­cias que hicieron experimental' a la segunda fueron tan gran­des que originaron su destruccion EI Gobernador de la pro"vincia dispuso que se hiciera una incursion en la montana parahostilizar a los indios caribes, que constantemente amenazabana aquellos pueblos y otros inmediatos asi se hizo, y las fuer­zas expedicionarias capturaron a cien enemigos, los que con­ducidos a Granada lograron escaparse y regresar a sus guari­das Con auxilio de los ingleses y zambos vinieron sobre Boa­co, rodearon la poblacion y penetrando en ella dieron muerteados misionelos que administraban como curas y aprisionaronochenta moradores

Tales hechos provocaron nuevas reciamaciOlles pOl' partedel Gobierno espanol, y en 1750 y 51 las autoridades legiti­maS de estas provincias se proponian anojar aun poria faerzaa los invasores Es probable que Trelawney no creyera bas­tante asegurada la posesion de la costa el espiritu de los na­tivos, refractario a la dominacion inglesa, y el desaliento queaun se sentia pOl' el mal exito de las expediciones de Anson yVernan, de que se hablo en el capitulo VIn de este libro, eranmotivos mas que suficientes para que el Gobernador temieseno poder conservar poria fuerza ias recientes adquisiciolresque habia proporcionado a su soberano Penso, pues, valersedel disimulo y del engaiio, y con este fin dio instrucciones alSuperintendente Hodgson para que hiciese entender a las au­torldades espaiiolas que su permanencia en la costa solo teniapor objeto r.efrenar a los nativos e impedir que cometiesen de­predaciones en los pueblos de la Capitania General De esemodo se pretendia encubrir con el manto de favor 10 que era

378 HISTORIA DE NICARAGUA

una UBurpacion injustificable, y recibir demostraciones de gra­titud en vez de arranques de justa y natural indignacion Losespaiioles creyeron en esa supercheria, y aun el Gobierno con­firio a Hodgson el grado de Coronel de las milicias reales enrecompensa de sus buenos oficios, pero pronto salieron delengano y comenzaron a prepararse para anojar a los inglesesHabia entre tanto cambiadose el GobernadOl de Jamaica aTrelawney sucedio Knowles, quien mas prudente 0 menos am­bicioso, solicit6 del Capitan General de Guatemala una sus­pension de hostilidades, y escribio Ii su Gobierno manifestlm­dole que si no separaba a Hodgson de la Superinten<).encia seharfa inevitable un rompimiento entre espaiioies e ingleses, yque el resultado de la lucha era muy dudoso porque los indiosunas veces se incHnaban a aquellos y otras a los ultimos

Hacia ya mucho tiempo que el ministro espanol, Marquesde la Ensenada, abrigaba el designio de ordenar un ataquegeneral contra los establecimientos britanicos en el Golfo deMexico En carta de 30 de Junia de 1753 exponia al Condede Holdernesse su plan de expulsion de los ingleses de la costs de Mosquitos, que debia ejecutar Don Pedro Flores de Sil­va La muerte de este l!-Csecida en Febrero del ano siguientey las gestiones diplomaticas iniciadas entre eI Goberl)ador deJamaica y el Capitan General de Guatemala contuvieron depronto el torrente de acontecimientos que se precipitaba enla Capitania General, y aun pareci6 vislumbrarse un terminopacifico y favorable a los derechos de Espana, por la lIegadade varios jefes moscos a la capital del reino con objeto dearreglarse can las autoridades espanolas Perc la efervescen­cia que habian producido tan acaloradas disputas y eJ espiritugeneral de la politica inglesa produjeron por fin la rupturaentre Inglaterra y Espaiia, a la que puso termino el tratadode Paris celebrado a 10 de Febrero de 1763, en que se estipuloque el Gobierno de la Gran Bretaiia destruyera todas las for­tificaciones que habia mandado levantar en las provincias es­paiiolas. La Corte de Madrid entendio que esta obligacion seextendia a las posesiones que Inglaterra pretendia tener enla costa de Mosquitos, y de esa suerte quedaron aparentemen­te zsnjsdas todss las dificultades y los pueblos de esta Ca-

LIB VII -CAP X -NUEVAS DESOBEDIENCIAS, ETC 379

pitanla pudieron lograr algun descanso, suponiendose Iibresde futuras dllpredaciones

Tal era Ill. situacion de Ill. Mosquitia en Ill. epoca a que haIlegado nuestra narracion, y si hemos extendido esta un pocomas aca del ano de 1750, ha sido con objeto de suspenderlaen un punto a donde podamos volver con facilidad cuando tra­temos de enlazarla con Ill. de los sucesos posteriores En ellugar oportuno se vera cuan infundada era Ill. confianza de losespanoles en las c1ausulas del tratado de Paris, y cuantos pa­decimientos Y desastres reservaba el destino a nuestros des­graciados pueblos, vlctimas de Ill. codicia de ltmbiciosos go­biernos

CAPITULO Xl

Situacion general de Nioaragua al promediar el siglo XVIU

1750

C01 regimiento del Realejo: Realejo -Chinandega -El Viejo Chichigalpa -em 1 egimiento de Subtiava; Subtiava. -Posoltega -Posolteguilla ­Quezalguaque -Telica -Pm tido de Segovia: Segovia -Somotillo -V~llanueva -Pueblo Nuevo -Yalagtiina -Tepesomoto - Totogalpa - Mosonte -Jalapa,-Jlcm 0 -Cornalteca -Sitelpaneca..-Palacagiiina -Condega - Estell - Gm? eyimiento de Matagalpa: Matagalpa - Sebaco - SanRam6n -Jinotega -Mul mui -Boaco -Teustepe --Comalapa -JuIgalpaLovigiiisca y L6vago -Gabie, no de Le6n: Le6n.-8auce -Pueblo Nue-­va -NagaI ate -Matem e -Managua -Nindit i - Masaya -NiquinohomoLas dOB Namotivas -Masatepe -Jalata y Nandasmo -Diriamba -Jinotepe -Nandaime -Dit iomo -Dit ia -Metapa -Acoyapa -Gt anada -- ElCastillo -Rivas -NicsI agua -Ometepe -Conclusion

DATOS positivos hay del estado en que se hallaba esM pro­vincia al promediar el siglo anterior, ora con relacion a suprogreso material, nada envidiable por cierto, pues era el pro­pio de las sociedades inferiores, ora en cuanto a las divisionesjurisdiccionales, siempre modificadas por reclamos de la poll­tica 6 por exigencias del pro comtin, 6 por deferencias 0 ca­prichos del que gobierna que no son otros los m6viles de lasuprema potestad en el ejercicio de sus funciones, moviles queseglin su causa y direcci6n dan vasto campo al contento 6 ala ira de los pueblos

Comenzaremos esta revista general de la situaci6n en quese encontraba Nicaragua, por el extremo occidental del terri­torio, para terminarla al lado del Oriente, comprendiendo enella las poblaciones mas importantes de todos los corregimien­tos y partidos mtermediarios

CORREGIMIENTO DEL REALEJO -En el capitulo I de este li­bro se hizo extensa relaci6n del estado de prosperidad rela-

382 HISTORIA DE NICARAGUA

tiva a que habia Ilegado el puel to del Realejo y de la desven­tura de sus habitantes a causa de la completa destruccion delos edificios ejecutada par los filibusteros en dos de sus masdevastadoras invasiones La magnitud de aquellos reveseshubo de ser funesta no solo a la provincia en que se efectua.ron,sino tambien al reino todD, por habersele privado de uno desus principales puertos en el Mal del Sur

Despues de tan lamentables sucesos, que aUll deplora lageneracion actual, solo ruinas podian presentarse a las sabiasinvestigaciones del viajero Tres edificios publicos de escasaconsideracion eran los unicos que, aunque mal parado~ por suantigUedad, alg6n servicio prestaban al empobrecido vecinda­dario, a saber, la Parroquia y los conventos de San Franciscoy la Merced La primera tenia por titular a Santiago sus pa­redes de cal, piedra y ladrillo dieronle alguna solidez, pero elarco toral estaba hendido por la violencia de un temblor detierra, rota la sacristia y arruinada la pared del bautisterioel techo, apuntalado porque se inclinaba al suelo, era de tejasli~~)1taaas sobre canas, y de madera los pilareS' en que descan­saba la nave principal Dos pequenas capillas, prolongacionesdlKJas naves laterales del templo, can puertas hacia el pres­biterio, servian de sacristias Remataba la torre COli \In cim­bQFrio que por su buena COllstrucclon hacia aplu ecer elegantela rachada principal del edificio

En 1748 quitaron a Is iglesia los novenos y excusados: esde creerse que la gran decadencia en que se hallaba y la pocao ninguna esperanza de remediarla, y aun tal vez mala inver­si6n de los fondos producidos por aquellas subvenciones, fue­ron causa de semejante providencia, y de que se Ie dejasensolamente los mezquinos recursos de un real por cada bautis­mo y un peso por cada entierro, 10 que demuestra que el su­perior eclesiastico veia como extinguida aquella antigua villay que Iimitaba los gast9s del culto a 10 que podia exigir elcorto numero de habitantes que aun quedaba

Como a una cuadra de la parraquia, hacia el Sur, estabasituado el convento de San Francisco, que habia quedado re­ducido a una iglesia msta tenia, en el tiempo a que nos re­ferimos, la b6veda rajada Era de tres naves, la de en media

LIB VII ~CAP XI!-SITUACION GENERAL DE NICARAGUA, ETC 383

sostenida por columnas toscas de madera que en el pais Hamanhorcones, y el cuerpo principal techado solo en parte, razonpor que habian trasladado las imagenes a la sacristia, en don­de se celebraban las misas Las paredes de cal y piedra, eransolidas y elegante la fachada Asistia al templo por la cua­resma y en otras festividades 11ll religioso con titulo de guar­dian, sin mas lCntas que sesenta y cuatro pesos de censos

EI convento de la Merced se haHaba al Poniente de la Pa­rroquia, con la plaza de por medio por toda distancia y sinmas ingresos que siete pesos de censos Su estado ruinosoimpedia que en la iglesia se dijera misa

Del edificio destinado al Hospital solo habian quedado loscimientos 19norabase aun entonces la fecha de su ruina,pero se la suponla ocurrida en 1685, a consecuencia de la in­vasion de los ingleses, y se crela generalmente, aunque confundamentos poco razonables, que todos los muebles y demasmenesteres de aquel establecimiento y los fondos con que es­taba dotado, hablan sido trasladados al Hospital de Leon

En una casa de tejas situada a tres cuadras de la villa cs­taban depositados cuatro canones de dieciseis, algunos pedre­ros de bronce montados en sus curenas, balas, cueharas y otrosobjetos pertenecientes al usa de las armas Esa casa serviade cuartel euando se reunla la unica compania existente, com­puesta de doscientos ocho soldados y sus oficiales, con cua­renta y nueve fusiles, bayonetas y garnieles Ados cuadrasde la villa se hallaba el astillero del puerto, donde se fabri­caban las embarcaciones que recorrlan el estero, las que, acausa de su mala construtOCion, poco e imperfecto servicio pres­taban al escaso comercio que de productos exportables se ha­cia Las naves del Peru, Tierra-Firme y otros reinos y Pro­vincias del Sur, se habian ausentado decididamente, por el ex­cesivo rigor con que las auto! idades del puerto trataban a loscomerciantes de fuera, y por la absoluta falta de expertos ma­rineros que condujeran la carga sin causar averias

Pobre y poco numerosa era la poblacion entonces existel1­te, por haber abandonado el lugar y trasladRdose a otros pue­blos las familias ricas que en el residlan; razon por que en elespacio de cuatlo leguas habla solamente doce hatos, cuatro

384 HISTORlA DE NICARAGUA

trapiches y algunos tell enos preparados para la siembl a demaiz, frijoles, yucas y otras lablllllzas destinadas a la alimen­taci6n de los vecinos Debe suponerse que todas esas fincaseran de escasa importancia

EI pueblo de Chinandega, situado a cuatro leguas del Rea­lejo en una fertil y extensa llanura, ya tenia alguna signifi­cacion por el numero de sus habitantes y el a contado entrelos principales del Corregimiento Su clima bastante calido,pero sana Existian en la poblaci6n doscientas cuarenta y unacasas de indios y ladinos, dos de tejas y el lesto de paja, ocu­padas pOl doscientas sesenta y ocho familias y Ull total demil ciento once personas que pagaban anualmente de tributodoscientos cuarenta y cinco pesos un leal Formaban el Ayun­tamiento dos alcaldes, alguacil mayor, tres regidores y unfiscal La iglesia parroquial, glande y comoda, constaba detres naves, la de en medio sobre pilales de madera sus pa­redes eran de cal y piedra y el techo de tejas asentadas sobrecanas Vnas celdas construidas en forma de convento, consus claustros de tejas y otras oficinas de paja, servian de casacural ejercia las funciones de cura un religioso, con la rentade ochocientos pesos anuales, asociado de otros dos, el uno contitulo de vicario y el otro de companero EI terlit9rio julis­diccional de Chinandega comprendia nueve leguas de longitudy dos de latitud, y en el se contaban nueve haciendas de ga­nado mayor, algunas chacras y labores de los vecinos

Aun era de mayor importancia el pueblo del Viejo, situadoa una legua de Chinandega Antes de hacel la narraci6n desu contenido, indicaremos cual fue el plObable origen de laextrana denominaci6n que tl ae, desde el punto a donde alcan­za la tradici6n EI Senor Morel de Santa Cruz asegura habervisto un atestado expedido por el Obispo Don Fray Juan deRojas [1684], en el que dice que vino al lugar un venerableanciano, hel mano de Santa Teresa de Jesus, conduciendo con­sigo una imagen de la Inmaculada Concepcion, y que habien­do fallecido en el, la dej6 a la iglesia, donde fue colocada Deesa circunstancia casual result6 que se diera el nombre deEl Viejo al pueblo, a la iglesia y a la efigie de la Virgen Ma­t>ia Es justo suponer que en aquella epoca remota, cuando

LIB VII -CAP Xli -SITUACION GENERAL DE NICARAGUA, ETC 385

se efectuo la llegada del anciano, haya sido la poblacion unainsignificante aglomeracion de casas pajizas, sin nombre par­ticular, puesto que no hay tradicion del que tuviera antes deaparecer con el que hasta ahara es designado

La situacion del pueblo era y aun es en exceso apreciablepara la aglicultura, por hallalse en un hermoso llano de fer­tilidad extraordinal ia y en aquel tiempo cubierto de arbolesfrutales y de algun monte baja, docil a los golpes del mache­te Todo el territorio jurisdiccional de este pueblo abrazabae1 espacio de treinta leguas de longitud y seis de latitud, yen el habia veintiocho haciendas de ganado mayor, dos tra­piches, cinco obrajes de tinta de anil y doce chacras

Se contaban en EI Viejo trescientas cincuenta y seis casas,cinco de tejas y las otras de paja, todas colocadas en desordeny habitadas por trescientas sesenta y seis familias, 0 sean milseiscientas noventa y ocho personas, fuera de los ninos En eltenia su residencia el Conegidor, por la decadencia del Rea­lejo, y ejercian la autoridad local dos alcaldes ordinarios, in­dios, alguacil mayor, cinco regidores y el fiscal Los vecinospagaban par tributo la suma de trescientos treinta y tres pe­sos un real y formaban una compania de ladinos, compuestade ciento noventa y cinco soldados con su capitan y oficialesPara armallos solamente contaban con cuarenta y cuatro fu­siles, cuarenta y tres bayonetas y catorce lanzas, porque aun­que habia sido mayOl el armamento, se quemo en el incendiode las casas de cabildo, ocurrido en 7 de Diciembre de 1749,Y apenas pudielon salvarse aquellos restos

La construccion de la iglesia era con poca diferencia comola de las parroquias de otros pueblos con tres naves, descan­sando la de en medio en altos pHares de madera, las paredesde cal y ladrillo y el techo de tejas, asentadas sobre caiias Detodas las provincias concurrian devotos a visitar la Concep­cion del Viejo y obsequiarla con limosnas, y era tanta la ri­queza acumulada por la piedad de los fieles, que segun la ex­presion de los historiadOl es, podian haber fabricado e1 templode plata maciza «Un trono primoroso y elevado, de maderatallada y dorada sobre cuatro columnas, abriga en su centro aott 0 pequeno con una vidriera por delante y sUS andas de pla-

2S

386 HISTORIA DE NICARAGUA

ta en que esta la Senora Un circulo que la rodea por fuera yuna media luna que tiene a los pies son del mismo metal: elvestido es de tela muy rica, sembrado todo de presiIIas de oro,perlas y diferentes piedras preciosas, gran numero de estassirven de realee a la corona, que es de oro delicadamente tra­bajada Hallase, en fin, de pies a cabeza tan IIena de alhajasy primores que puede competir con otra cualquiera de las masadornadas del Ol be EI altar es de cuatro frentes: la prin­cipal, que mira al pueblo, tiene su frontal de plata con tresefigies y una puntilla sobredorada, conchas y otros juguetesbastantemente pulidos de la misma materia y co~strucci6n,

con dos atriIes, otras tantas lamparas, seis araiias, ocho bu­jias y seis blandones que estan en el mismo altar y capillaen la sacristia se encuentran ott as alhajas para la celebraci6ndel Santo Sacrificio de la Misa, es en suma el templo de ma­yor riqueza que se conoce en la Di6cesis, sin mas rentas nifondos que las Iimosnas contribuidas por la piedad y devoci6nde los Cl istianos» Se han copiado textualmente las palabrasanteriores del Senor Obispo MOl el, quien asegura haber co­nocido todas aquellas riquezas, para que pueda compararsela impOl tancia que entonces tenia EI Viejo con la que hoy Ieha quedado \

EI cuidado eclesiastico del pueblo estaba a cargo de cincofraiIes franciscanos, uno con titulo de doctrinero y mas deseiscientos pesos de lenta, y los otros como simples auxiliaresdel primero

Chichigalpa carecia entonces de notable importancia es­taba situado, como abOl a, ados leguas escasas de Posoltega,en un llano montuoso tenia buena agua y clima un poco tem­plado La iglesia antig ua era de paja, de un solo cuerpo bas­tante estrecho, pero se trataba ya de hacerla de tejas y demayol es dimensiones, porque la existente se haIIaba en estadoruinoso Componiase el pueblo de cuarenta casas de indios yladinos estos sujetos directamente al Corregidor, y los pri­meroS a un Ayuntamiento compuesto del alcalde, alguacil ma­yOl, dos 1egidores y fiscal, y pagaban anualmente de tributociento once pesos Habia sesenta y dos famiiias [doscientasnoventa y dos personas], que obtenian la subsistencia cultivan-

LIB VII -CAP X!t-SITUAc10N GENERAL DE NICARAGUA, ETC 387

do algunas chacras y labores, en un terreno de cuatro leguas.CORREGlMIENTO DE SUBTIAVA -Subtiava ela una de las mas

grandes poblaciones de la plOvi!1cia y la que mejOl habia con­servado los edificios publicos que tanto contribuian a datleimportancia Situada en un llano al occidente de Leon y divi­dida de esta por una calle titada de Norte a Sur, ha sido pro­piamente un barrio de esta ciudad y uno de los mas frecuen­tados puntos de esparcimiento y I ecreo Babia ochocientassetenta y cuatro casas de paja, con ott as tantas famiIias, 0 seacuatro mil ciento veinte habitantes, sin contal los nilios LaParroquia se consideraba como la ptimera del obispado pOl susolidez y decencia, y aun se decia que nada Ie faitaba pal asel vit de catedral Existian ademas cinco inglesias San An­dl es, Veracruz, San Pedro, Santiago y San Sebastian, todasen buen estado de conselvacion En la plaza principal estabanel Cabildo y las casas del COllegidor y del Cura, con los cuar­tos necesarios para el servicio a que todos esos edificios erandestinados AlIi residia el Corregidor, con independencia delos empleados de Leon, y ejercian la autoridad del pueblo dosalcaldes Ol dinarios, un alguacil mayor, seis regidores y vein­ticuatlO mandones, correspondientes a las das parcialidadesdenominadas Pueblo grande y Jiquilapa La fuerza publicaconstaba de dos compaliias de indigenas montados, con sus ca,pitanes y oficiales subaItelllos Tenian los del pueblo en untell enO de cinco legnas catorce haciendas de ganado mayor,doscientas chaClas y lugates prepatados para las labores Eltributo anual ascendia a cinco mil ciento nueve pesos cuatlOreales, peru pagaba la !teal Caja al cUta setecientos pesoslas misas, la racion duplicada y el numeroso servicio pel sOHaldaban un total de mil pesos al alio

El Selior MOl el califica este pueblo como el mas distingui­do y apreciable de la Di6cesis, peru agrega, que en aquellacpoca tenia la tacha de que sus moradol es eran los menos ins­tt uidos en religion y los mas torpes en el idioma castellano

EI pueblo de Posoltega, situado como el anterior y distan­te de Posolteguilla un octavo de legua, tuvo antignamente unapoblacion numelosa, como 10 dejan comprendel el helmosotemplo de cal y piedra con su capilla mayor de bOveda, y los

388 HISTORIA DE NICARAGUA

fuertes reclutamientos que en el hizo, 10 propio que en Telicay Chichigalpa, el Maestre de Campo Don LOlenzo GonzalezCalderon, para impedir la invasion con que los filibustelDsamenazaban por el lado del Realejo En Ia epoca a que hallegado esta Risto! ia, todas las casas el an de paja, en numerode ciento dos, habitadas por ciento cincuenta y cuatro fami­lias con un total de seiscientas cincuenta y una personas detodas edades Habia cuatro parcialidades con los nomblesde Posoltega, Guazama, AbangasquiUa y Moyogalpa, todas so­metidas a la jm isdiccion de un alcalde, alguacil mayor, dosregidol es y fiscal Pagaba de tributo la suma de trescientosdiecinueve pesos un real

Ningun dato existe en los archivos, ni los da la tladicionde estos pueblos, sobre el estado en que el de Posoltegltilla sehallaba en los pl imelDs afios del siglo anterior SeguramentepOl su pequefiez pasaba inadvel tido, aunque de el no se olvi­daban cuando las amenazas de invasion obligaban a las auto­ridades a reunil soldados pala la defensa En el tiempo deque se viene tl atando la Iglesia era de tejas sobre horconesy de embarro las paredes, las cuales, fuera de sus quicios, es­taban al caer En un sitio llano pelD montuoso habia sesentay dos casas habitadas por noventa y dos familias de indios,con un total de cuatrocientas veintiseis personas de todas eda­des Ejercian la autOl idad un alcalde, alguacil mayor, dos re­gidores y fiscal Pagaba el pueblo de tributo cuatrocientos se­senta y dos pesos dos 1 eales, suma sobrcexcedente a la pobla­cion y acaso tambien al producto del habajo

EI pueblo de Quezalgullqlte se conserva en el mismo estadoyue en aquella leiana epoca Esta situado en un llano mon­tuoso pero alegre, con un clima hiimedo y muy calido Teniaveintiseis casas, treinta y siete familias y cienta sesenta y ochopel sonas ladinas e indigenas, y ejercian la autoridad un al­calde, el alguacil mayor y dos legidores Pagaba el hibutoanual de sesenta V ocho pesos cinco reales La iglesia, comotodas las parloquias del obispado era de tejas sobre canas, lanave principal asentada en pilares de madera V las paredeslaterales consh uidas de cal y piedra

En epocas aun ll)as remotas estaba formado de indios el

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pueblo de Telica, pero en el promedio del siglo decimoctavo,pocos de esa raza habian quedado y 10 poblaban ladinos, ensu mayol numero Atribuian esa disminucion a las aguas, ma­las par ser azufradas y al clima, par humedo, mal sana EIterreno era llano y montuoso Se campania el pueblo de ochen­ta y una familias, can un total de trescientas seis personas,las cuales habitaban en casas de paja, esparcidas sin orden,entre arboles frutales Los ladinos se hallaban sometidos alas autoridades de Leon, los pocos indios estaban gobernadospar un alcalde y un regidor Este pueblo pagaba el tributoanual de treinta pesos, siete reales y medio

PARTIDO DE SEGOVIA -Dependia dlrectamente del Gobiernode Leon el Gobernador mantenia en el un teniente 0 subde­legado La ciudad de Segovia, aunque de cOlta poblacion, elaen aquel tiempo una de las principales de Nical agua, como 10indican sus edificios publicos La Parroquia no carecia de de­cencia y habia tambien un convento de la Mel ced, Hospiciode Sau Flancisco y casa de Ayuntamiento, todos en buen es­tado y aptos respectivamente para el culto religioso y el Sel­

vicio de las autoridades EI Ayuntamiento se campania de dosalcaldes ordinarios, alferez mayor, alguacil mayor, dos regi­dares, escribano, procuradol general y dos alcaldes de la her­mandad EI mas antiguo de los ordinarios lesidia en la ciudadcan titulo de Teniente de Gobernador, y el otro en el pueblode Esteli, pero los dos moraban en la hacienda 0 pueblo queles parecia conveniente, can el ejercicio de la jurisdiccion Eseabuso, dafioso al Olden judicial y gubelnativo del Partido, dioorigen a ot! a practica, todavia mas inconveniente par sus con­secuencias Acostumbrados los vecinos de la ciudad a tenersu Ayuntamiento, y no quel iendo que este faltase, el dia dela eleccion daban tambien el nombramiento de alcaldes ordi­narios a los dos de la helmandad, que residian constantemen­te en el lugar, para que presidiesen el Cabildo, administraranjusticia en 10 civil y criminal, y extendiesen el ejercicio de susfunciones al gobierno politico y economico De la residenciade los cuatro alcaldes en distintos puntas, lesultaban ordenesy lesoluciones contI arias, que no se cumplian

Una de las piezas del Cabildo servia de sala de armas, en

390 HISTORIA DE NICARAGUA

que habia ciento sesenta y ties fusiles, eincuenta canones demosquetes y alcabuces, den garnieles y cal tuchel as, cincuentaporta-fusiles, cincuneta bayonetas, doscientas lanzas y lune­tas, quinientas libl as de polvora, dos mil balas, tambores yotros utiles de guerla Residia en la ciudad un Sargento Ma­yor encargado de custodiar todas esas provisiones, y en ella,en la villa de Esteli y pueblos de Condega, Jicaro y Jalapaejel cia Ill, jurisdiccion milital Era el jefe de tres companias,dos Ol ganizadas con doscientos hombres, sin capitanes, y latel cera con capitan y sin soldados, porque en lances de guerrase reclutaban fuera de aqnellas comprensiones \

Las casas de que se componia la cindad eran treinta yuna onCe de tejas y veinte de paja, y en ellas vivian setentay cinco familias, con el numCl 0 de tl escientas setenta y ochopersonas de todas clases Las autoridades provinciales y aunIll, Chancilleria de Guatemala empleaban sus esfuerzos en quela pobHwion se aumentara, pero las providencias que dictabancon ese laudable objeto, quedaban sin efecto, porque los queen el campo tenian su 1 esidencia no consentian en pasar a laciudad

Somotillo -Este pueblo, distante cuatro leguas del de Villa­Nueva, el a solo de indios en otros tiempos y se hallapa situadouna legua mas adentro hacia el Sm, a Ol illas de los rios de­nominados El Dulce Nomble de Jes.us y Rio Neglo Un acon­tecimiento infausto coloco a los vecinos en la necesidad demudar puesto y establecerse en el lugar donde hoy se halla,que es el mismo que ocupaba en el tiempo a que esta llall a­cion alcanza Los rios explesados elan caudalosos y duranteel invielllo aumentaban sus aguas En un tempOl al crecieronhasta llegar al pueblo y destruyeron la mitad de las casasfue el tiempo en que los moradores determinaron retirarseLos indios, por desconocidas causas se extinguieron y quedopoblado de mulatos Y se dice por desconocidas causas, por­que no obstante ser el terreno cenagoso, calido y humedo, pu­dielOn vivir en el largos anos, y despues los nuevos morado­res, sin sentir las influencias mOl bificas de esos malos ele­mentos Sel via de iglesia una casa de paja, reducida y vieja,pero ya estaban fablicando otra, capaz, de tres naves, con pa-

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redes de adobes y techo de tejas Habia cincuenta bohios,ocultos en los montes, y en estado de luina De los vecinosde Somotillo y los de Villa-Nueva formabase una companiade ciento cuarenta hombles desalmados, can su capitan y ofi­ciales, la cual sel via para las funciones de los dos pueblosSe campania el vecindario de cincuenta y ocho familias, canun total de doscientas veinticuatro personas Poseian dieci­siete haciendas de ganado mayor, algunas chacras y ten enosde labranza

Hallabase situada la Villa-Nueva en el mismo terreno queactualmente ocupa, el cual es un llano de monte bajo, tem­pestuoso, calido y humedo, con aguas pesadas y nocivas Ha­bia cuarenta bohios, dispersos y escondidos en el monte Lapoblaci6n se componia de seiscientas sesenta y seis personas,fOi mando noventa y seis familias, de todas castas, sin un soloindio Un capitan y un teniente, sin tropa organizada, re­unian a los hombres que a la mano encontraban, para las mar­chas La iglesia era de tejas con paredes de adobes

A ocho leguas de la Villa-Nueva esta fundado el PuebloNuevo, el cual, segun la expresi6n del Obispo Morel, era nnode los mas calamitosos que habia visto En un terreno mon­tuoso, caJido y humwo, se halla situado, recibiendo un aspec­to triste de los elevados cerros que 10 rodeall y que natm al­mente impiden la circulaci6n del aire Su colocaci6n actuales la misma que en aquella epoca tenia La iglesia, de tresnaves sabre hOi cones, techo de tejas y paredes de adobes,era muy reducida y por su antigiiedad se encontraba bastantemalt! atada Cuarenta y cuatro familias, con el total de dos­cientas tres pel sonas, todas ladinas, habitaban en catorce cho­zas, la mayor palte sin embarrar y algunas caidas No tenianjuez en el lugal, sin embargo de no ser muy miserable la pro­piedad rural can que contaban, puesto que poseian cincuentay dos hatos, siete trapiches, seis chacras y tierras de laborPagaban al cura ochocientos pesos al ano,

Tampoco era aventajada la situaci6n del pueblo de Yala­gUina, par hallars€ en un terreno, aunque llano, humedo, cali­da, malsano y poco ventilado a causa de los cerros que 10 ro­deau SP. componia de cuarenta y cuatro familias, con ciento

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ocho personas, que habitaban en treinta y cuatro chozas casiescqndidas dentro del monte Ejercian la autOlidad dos alcal­des, el alguacil mayor, dos regidores y el fiscal Pagaban detributo ciento cuarenta y tres pesos cinco reales La iglesia,de tIes naves y de tejas, tenia las paredes de adobes

A tres leguas de Yalagiiina se haUaba situado el pueblo deTepesomoto, en un llano de monte pequeno, extenso por el Sur,estrecho y dominado de altos cerlOS por los otros lados Laiglesia era de tres naves sobre pilales de madela, con techode tejas y paredes de adobes Poblabanlo noventa y nuevefamilias, con un total de quinientas nueve persona~, indios yladinos, que pagaban de tributo trescientos noventa y tres pe­sos cinco y medio reales, y vivian en noventa y ocho bobiosDe tejas no habia otra casa que la del cura Dos alcaldes, elalguacil mayor, dos regidores, y el fiscal gObernaban a losindios, los ladinos, que tal vez eran pocos, no tenian juez

Poco difieren unos pueblos de otros en ese partido Toto­galpa, situado a cinco leguas del anterior, tenia su asiento enun llano cel cado de cerros, aires frescos, cielo despejado yaguas saludables Servia de iglesia una casa de paja, vieja ymaltratada, y aunque se habian dedicado a levantar la parro­quia de adobes y cubierta de tejas, en el espacio de \veintiseisunos apenas habian podido acabal la cap ilIa mayor y la sa­cristia Tenia el pueblo sesenta y ocho casas metidas dentrodel monte, ciento noventa y slete familias con seiscientas se­senta y slete personas, dos alcaldes, alguacil mayor, dos re­gidores y fiscal, y pagaba de tt ibuto la cantidad de trescientossesenta y dos pesos, dos reales

Mozonte ela un caserio miserable, en una llanura rodeadsde cerros altos y montuosos hacia el Oriente y bajos por elOccidente Una casa de paja, vieja y redllcida servia de igle­sia, sin sacristia Doce anos habisn transcurrido desde quesus moradores, todos indios, empezaron a edificar su templode cal y piedra, y al cabo de ese tiempo estaban concluldas lasparedes y compradas las madelas, canas y tejas Pero el tra­bajo se hallaba suspenso por faltal un cal pintero inteligenteque 10 cOlltinuase, y porque los indios, con ser pocos, cranconstantemente ocupados en repartimientos y obligados a ser-,

LIB VII -CAP Xll-SI'l'UACION GENERAL DE NICARAGUA) ETC 393

vir en la ciudad En cincuenta y tres casas vivian cientoveintiseis familias, 0 sean cuatrocientas cuarenta y siete per­sonas, que pagaban doscientos sesenta y seis pesos de tributoannal y eran gobel nadas por dos alcaldes, alguacU mayor, dosregidores y el fiscal

EI pueblo de Jalapa era de indios antiguamente, pero sehabia extinguido casi en la totalidad, hasta quedar reducido itdos familias, con el numero de ocho personas, tI es familiasmas trasladadas de Mozonte, y sesenta y dos ladinos No te­nian iglesia y supliala, con mengua de la veneracion que sedebe a Dios, una casa de paja, que segun la calificacion delObispo Morel, ni aun para cocina servia, y acaso en no remotatiempo se dedicara para el baUe profano de la sawbanda Losbohios no pasaban de veinte, situados en un terreno montuosoy Ileno de pantanos, con cerros por Oriente y Poniente, perocon campos amenisimos por el Norte y el Sur Carecian deiuez y ni aun estaban sometidos a los de la ciudad, como ha­bria sido conveniente a la moralidad y buen regimen de aque­lIos desamparados habitantes Un capitan, sus oficiales y cin­cuenta hombres con seis fusUes, sel vian para guardar un puer­to Iindante con la montana y situado a tres leguas del pueblo.EI Senor Morel, reconociendo la importancia de los lugares enque estaban los pueblos del Jicaro y Jalapa, pal a la defensade aquel Partido contra las frecuentes invasiones de los mos­quitos, diIigio dos cartas al Capitan General del reino, propo­niendole medidas eficaces a fin de mejOl arias En documen­tos que a la vista tenemos consta el resultado de esos proyec­tos, y de el se hablara en su oportunidad

EI pueblo del Jicaro, poco ha mencionado, estaba fronte­rizo a la montana donde residian los caribes Se hallaba fun­dado en un llano como de dos cuadras de Oriente a Ponientey una de Norte a Sur Serviale de iglesia una casa de pajavieja e indecente, y se componia de veinticinco bobios ocultosen el monte y sesenta y dos en los campos, habitados por cien­to veintitres familias 0 quinientas ochenta y siete personasentre negros y mulatos Una compania de doscientos noventahombres alistados y otra de ciento diez sin 01 ganizaci6n, conochenta armas de fuego, inservibles en su mayor parte, custo-

394 HISTORIA DE NICARAGUA

diaban tres puertos pOl' donde podian entrar los de la monta­na, la cual se hallaba a cuatro leguas POl' valientes eran loshabitantes del Jicaro el terror de los enemigos esa buena famalos habia salvado de las invasiones can que molestaban y afli­gian a los otros pueblos del Partido EI c1ima era templado,y buenas las aguas de los rios, en los cuales se encontraba oro.

EI pequeno pueblo de Gomalteca se componia de diez bo­hios, en que residian trece familias, can el numero total decuarenta y dos personas La iglesia era de paja, estrecha ysin sacristia Tenia pOl' autoridades un alcalde y un regidory pagaba de tributo veintiocho pesos \

Sitelpaneca era un pueblo excepcional Situado en un vallede tres cuadras de largo y dos de ancho, 10 que demuestra lapequenez, tenia sin embargo su iglesia de cal, ladrillo y te­jas, can tres naves y sacristia decentes y capaces Goberna­banlo dos alcaldes, un alguacil mayor, dos legidores y un fis­cal, y se notaba que los habitantes llevaban una vida menosmiserable que los de las otras poblaciones del Pal tido y eranobedientes a la ley y a los preceptos religiosos Aunquc s6lotres leguas mediaban entre el pueblo y la montana, jamas fuemolestado pOl" los caribes, aun teniendo estos la facilidad desorprenderlos par el rio. Se campania la poblacion, de ciencasas de paja habitadas par doscientas seis familias, 0 seanseiscientas diecinueve personas, poseian algunos hatos y paga­ban de tributo treinta y cuatro pesos siete reales

A siete leguas de Sitelpaneca y ocho de ]a montana se ha­llaba el pueblo de Palacaguina, can un vecindario de indigenassujetos al alcalde de la ciudad de Segovia y a un alguac;! ma­yor, dos regidores y un fiscal que residian en el lugar Secontaban en el noventa familias can doscientos noventa y ochopersonas, las que habitaban en treinta y cuatro bohios Paga­ban de tributo anual treinta y cuatro pesos, suma casi iguala la del tributo de Sitelpaneca, auuque Palacagiiina tenia me­llor poblacion y escasisima riquC2a la Iglesia era de paja

Gondega se hallaba colocado a cuatro leguas del puebloanterior Una casa de paja servia de templo, y un cclesiasticoadministraba como C\ll a en el mismo Condega, en Palacagiiina,en Sitelpaneca y Comalteca, con ochenta pesos de rentas, in-

LIB VII -cAP XI ~SITUAClON GENERAL DE NICARAGUA, ETC 395

c1usos el Sel vicio personal y la racion Los primitivos funda­dares ftieron indios, y par muerte de estos ocuparon el lugarlos mu1:J.tos, que a la sazan 10 habitaban Habia en el cin­cuenta y cinco casas de paja, en que Iesidian ciento cual entay tres familias can seiscientas dieciseis pelsonas Para la de­fensa del lugar tenia el Gobierno de la provincia organizadaen este pueblo una compafiia de montados compuesta del ca­pitan, oficiales conespondientes y sesenta y cinco hombres,sin otras armas que veinticinco lanzas

EI pueblo de Esteli se hallaba en muy malas condicionesCon un clima calida y humedo, aguas nocivas y temperamentomaisano, nunca habria podido tener numerosa poblacion Solohabia cincuenta casas de paja, en un terreno pantanoso y tris­te, habitadas por ladinos EI resto de la poblacian, compuestode quinientas veintitres familias, can dos mil cuatrocientastrece personas de todas edades, se hallaba dispe,so en las ha­ciendas de la jurisdiccian del pueblo La fuerza publica or­ganizada en el se componia de tres compafiias de caballeria,con sus capitanes, oficiales y trescientos cincuenta hombres,pero sin ob as armas que ciento treinta y siete lanzas

CORREGlMIENTO DE MATAGALPA -Comprendia casi todos lospueblos que forman el actual departamento del mismo nombrey la mayor parte de los de Chontales EI Corregidor nombrabatenientes que representaran su autozidad en las poblacionesmas importantes

Matagalpa, situado en un terreno desigual y montuoso,pero fertil y fresco, se componia de tres parcialidades de in­dios: una can el nombre del mismo pueblo, otra con el de Si­lingalpa y otra, en fin, can el de Molagiiina La iglesia prin­cipal se hallaba en la primera era de tres naves, la de enmedio descansaba en pilares y tenia techo de tejas SObI e ta­bias, las de los lados de tejas sabre cafias, y sustentadas parparedes de cal y piedra EI cura de esta Parroquia adminis­traba tambilm las de Sebaco,. Muimui y Jinotega Ademas delas tres parcialidades mencionadas, habia ladinos y forasterosEI numero de casas era de doscientas noventa y cuatro, todasde paja, habitadas par setecientas familiaS' y mil novecientastres personas Se deaia que el numero de habitantes era rna·

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yor, pero que los indios huian de ser empadronados, para eva­dirse del pago del tributo Residia alii un Corregidor quedisfrutaba del sueldo de doscientos cincuenta pesos y cuya ju­risdicci6n se extendia a sesenta legulUl de longitud y veintede latitud Con excepci6n de Acoyapa y Metapa, los diez pue­blos restantes situados en este territorio eran gobernados porel Corregidor, quien tenia tambien el mando de las armas.l1:stas eran dos caiioncitos de a dos, ochenta y siete fusiles, noen buen estado, cuarenta y tres mosquetes, doce sables, cua­renta y ocho ba)1onetlUl y ciento siete lanzas Una compaiiia,con su capitan, los respectivos oficiales y cien montados ma­nejaban esas armas En cada parciaJidad habia Un alcalde,alguacil mayor y fiscal Pagaban de tributo anual novecien­tos treinta y siete pesos un real y daban al CUla raci6n yservicio

Sebaco era en la epoca a que nos referimos un pequenopueblo con treinta y seis bohios de indios y dos de ladinos,gobernados pOl un alcalde, alguacil mayor, dos regidores y elfiscal La poblaci6n se componia de dieciseis familias deladinos, con un total de doscie)ltas cincuenta personas Losindios se contaban en mayor numero Pagaban estos u!timosel tributo anual de cuarenta y dos pesos tres reales, y al curala raci6n y servicio personal los ladinos satisfaciah las pri­micilUl Sebaco habia sido en 10 antiguo un pueblo muy nume­roso, con trece parciaJidades, y servia de residencia al Cozre­gidor, que, andando el tiempo, fue trasladado a Matagalpa.Pero se destruyeron los vecinos casi completamente por labarbara costumbre de quitarse la vida unos a otros con mor­tiferos venenos

San RamOn era un valle compuesto poco mas 6 menos decien indios, con su iglesia de paja y con otras anexas a estepueblo, aunque sin coadjutores que en e.lIas residiesen y sinel gobierno correspondiente a la feligresia Por disposicionesposteriores del Obispo quedaron corregidas esas faltas

Jinotega -Este pueblo que abundaba en inconvenientespara establecer en el una residencia tranquila, tenia por asien­to el rinc6n de una sabana montuosa y triste y combatidapor los vientos frios de la montaiia, que estaba como ados

LIB VII --CAP XD-SITUACION GENERAL DE NICARAGUA, ETC 397

cuadras Servia de Iglesia una casa de paja con tres divi­siones en forma de naves, 16bregas, estrechas y bastante in­decentes, como 10 eran tambien la sacristia y el unico altardestinado a la celebraci6n de la Misa y demas solemnidadesreligiosas Hacia como cuarenta anos que aI lado Izquierdode Ia iglesia se habia comenzado a construir otra cuyas mu­rallas de cal y ladriIlo tenian una vara de alto a la saz6n, ex­tensa y bien delineada La falta de dinero y las frecuentesinvasiones de los zambos y mosquitos, que en cuatro incur­siones al pueblo se habian lIevado a muchos de sus morado­res, impedian la continuaci6n de los trabajos del templo AUIlen la epoca a que nos referimos se mantenian sobresaltadoslos del pueblo, temiendo cacr en manos de los barbaros Lapoblaci6n era de indios y ladinos estos gobernados por un te­niente del Corregidor, y aquellos por su alcalde, alguacil ma­yor, dos regidores y el fiscal Los primeros pagaban al curaanualmente ciento noventa y siete pesos dos reales y ciertaracion y servicio los ultimos la primicia de sus frutos Trein­ta montados, COn sus armas de fuego y algunas lanzas, eranparte de la compaiiia de Matagalpa residente en Jinotega:mandabalos un sargento, pero no se contaba con ellos para ladefensa del lugar, porque vivian dispersos en sus haciendas ylabores, de que resultaba que facilmente podian ser sorpren­didos por el lado de la montana de Pantasma Las casas deindios y ladinos eran cincuenta, las famiIias ciento veintinuevey las personas seiscientas cuarenta y tres

Mui-mui, pueblo bastante pequeno, pues no tenia mas quecuarenta bohios dispersos, habitados por treinta y seis fami­lias 6 ciento ochenta pel sonas, estaba gobernado por un al­calde, un alguacil mayor, dos regidores y un fiscal La igle­sia era de paja, con altar que de toda decencia carecia Po­cos pueblos fueron tan hostiIizados de los zambos y mosqui­tos, como 10 fue Mui-mul Estuvo antes situado en otro lu­gar a cinco leguas de la montana, pero habiendo sufrido tresinvasiones de los barbaros, con perdida de hombres y muje­res que se lIevaron, traslad6se al sltio en que ultlmamentese encuentra Aun asl era grande la zozobra en que se man·tenian 'los vecinos, temiendo nuevas sorpresas Por esa pe-

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nosa situacion carecian de cura, y cuando el coadjutor Ilegabaa celebrar la Misa los dias festivos, tenian que poner centi·nelas avanzadas Movian a compasion aquellos infelices con·sideraban con horlor la triste suerte de sus parientes plisio·neros y temian verse de un momento a otro en el mismo es·tado Con ser tan misel abIes pagaban de tributo anual vein·tidos pesos y el servicio personal al sacerdote destinado aadminish ar los sacramentos

Boaeo -Las desgracias que este pueblo experimentoen 1749, relacionadas anteriormente, obligaron a sus habitan·tes a buscar otro sitio donde establecerse, que alguna segu·lidad les diera por la distancia, contra ulteriOles ataques desus enemigos, 10 que verificaron colocandose a diez leguas delabandonado Deseaban, no obstante el peliglO, volver a esteporque a las inmediaciones tenian sus haciendas y las de doscofradias, y porque los pob,es carecian de los medios de sub·sistencia y anojados de sus casas Iloraban desesperados Ha­bian levantado en la nueva residencia sesenta bobios, estre·chos y dispersos Eran gobernados por un alcalde, dos 1 egi·dores y el fiscal Las familias ascendian a ciento cuarenta ylas personas a setecientas doce, las cuales pagaban de tributoanual doscientos ochenta pesos y daban al cura la\ racion yselvicio personal El territOlio a que se extendia ef cmato,desde el termino de Comalapa hasta Boacao, el a de veintidosleguas de longitud y doce de latitud En el habra cuarenta ydos haciendas de ganado mayOl y gran mimero de chaClas ylabranzas

Teustepe -Poblacion de indios y ladinos Tenia cual entacasas de paja situadas en un sitio pedregoso, muy quebradoy Ilene de monte Habitabanlas setenta y siete familias, concuatrocientas cuarenta y siete personas Gobernaban el pue­blo un juez nombrado a prevencion por los alcaldes de Gl ana·da, para los ladinos, un teniente del COll egidOl de Matagalpapara los indios, un alcalde, alguacil mayor, dos legidores yun fiscal Tenian Ol ganizada una compaiiia de ladinos, consu capitan, oficiales y soldados, armados de lanzas, picas ymachetes La renta del cm a, el cual administraba tambien

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en Boaco y Comalapa, importaba novecientos pesos y el tri~

buto anual que pagaban 61 a de ochenta y ocho.Comalapa sufrio como Boaco los grandes males que los

zambos asociados con ingleses causaron en la invasion de 1749Se hallaba en aquella epoca el pueblo de San Francisco de Ca­moapa situado en el Ingar denominado el Limon, cuatro le­guas hacia la montana, pero temiendo ob a coneria de losbarbaros, los moradores se lefugialOn a Comalapa, en dondepermanecian el ano a que hemos llegado en esta relacion Ocu­paba la poblacion un terreno montuoso, pedregoso y cercadode cerros, Y habia en ella cien familias 0 cuatrocientas ochen­ta y cuatro personas, indias y ladinas Cada parcialidad teniasu alcalde, alguacil mayor, dos regidores y fiscal Los deComalapa daban doce pesos de tributo y ambas parcialidadesorganizaban una compania de ladinGs, con su capitan, oficialesy cincuenta montados, fusileros y lanceros

Juigalpa era una poblacion de indios y ladinos, que solotenia treinta y cuatro bohios desordenados y cubiel tos de mon­te, en que vivian noventa y cinco familias 0 sean doscientasveinticuatro personas Setenta de estas se hallaban alistadasen una compania con su capitan y correspondientes oficialesy almada de fusiles y lanzas Eran gobernados por un alcal­de, el alguacil mayor, dos 1 egidores y el fiscal EI territodode este curato y sus tres anexos se extendia a dieciocho le­guas de longitud y catorce de latitud, y en el habia ochentay bes haoiendas de ganado mayor, tres bapiches y conside­rable numero de chacras y labl anzas Los indios pagaban detributo treinta y dos pesos un real

Lovig;;;sca y Lovago -En 1750 fue invadido el ultimo deestos pueblos pOl los zambos y mosquitos, quienes se llevaronpl esas al<\unas personas de ambos sexos Junto con Lovigtiis­ca se hallaba situado ados leguas de la montana, pero aquelacontecimiento doloroso obligo a sus habitantes a abandonar­10 y establecelse scparadamente, a una legua de la villa deAcoyapa Dnos y otros tenian sus cas'lS espal cidas para huirfacilmente, en nuevas corlerias de los enemigos Por ser ex­cesivamente pobres fncron eximidos del tributo y porque ha­bian salido voluntariamente de la montana Cada pueblo tenia

400 HISTORIA DE NICARAGUA

su alcalde, alguacil mayor, dos regidores y fiscal ConstabaLovigliisca de sesenta y cinco familias con doscientas cincuen­ta y ocho personas, y L6vago de cual enta y una familias, conciento noventa y ocho personas

GOBIERNO DE LEON -Se halla la ciudad de Le6n situada enun teneno llano en BU mayor palte (el mLsmo que ocupa des­de el 2 de Enero de 1610) y bajo la influencia de un climaseco y calmoso, principalmente en el vel ano En aquellostiempos Be pensaba que el calor del aile que en la ciudad serespira y corre en toda la llanura, viene de lOB volcanes deMomotombo, Telica y el Viejo, distantes solamente, \ el prime­ro como nueve leguas al Oliente, el segundo dos y el terceroonce hacia el Occidente Daban apoyo a esta conjetura los te­rremotos fl ecuentes en todo tiempo y los buenos y 1ayos enel invierno, aunque ya se notaba a mediados del siglo, que laelectricidad disminuia y que los temblores de tierra habianperdido su fuerza y solo en el cambio de 19' estaciones se pel­ciblan Esas incomodidades estaban compensadas con la abun­dancia de comestibles, con la pureza de las aguas, con una at­mosfera sana, acreditada por el crecido nfunero de ancianos,y can un cielo sereno y despejado Habia nueve iglesias, a sa­ber la Catedl ai, San Francisco, la Mel ced, San J uad de Dios,San Juan, San Nicolas, el Calvalio, San Sebastian y San Fe­lipe, y daban tambien importancia y helmosura a la ciudad elPalacio Episcopal, el Colegio Tridentino, las casas de Ayun­tamiento, el edificio de la Contaduria, ia Sala de Armas, y lasnumelOsas y bien fabricadas casas de los particulares LaCatedral era muy oscura, y el presbiterio tenia ademas deese defecto el de ser muy estrecho, con dos ambones de ma­dera tallados y las sillas de los ministros, pero se conservabaHesa, lesistiendo los frecuentes movimielltos de tierra que ha­bian arruinado casi todas las iglesias de la provincia Des­atendiendo esa buena cualidad del edificio, cuya fO! taleza ofre­cia aIm largos anos de dm aci6n, se apodero de los vecinos eldeseo de destruirlo para levantar OtlO de mejO! es condiciones,y poniendo manos a la obra (1747) comenzaron por dell ibarla Capilla de Jesus Crucificado, la sacristia y sucesivamenteel cuelpo principal, las naves y las otras capillas, sin contar

LIB VII -CAP XI -SITUACION GENERAL DE NICARAGUA, ETC 401

con mas fondos para la nueva construccion, que seis mil pe­sos existentes y los escusados, noveno y medio de las parro­quias de Cartago, Granada, Segovia y Realejo, que pOI' realprovision Ie fueron despues adjudicados Acaecio esta nove­dad durante el gobierno eclesiastico del Obispo Don IsidroMarin de Figueroa

EI pueblo del Sctuce, colocado en un valIe de monte bajo,fresco y de buen clima, se componia de indios y ladinos Losprimeros no tenian juez, y los segundos eran gobernados pOI'un alcalde y un regidor pagaban su tributo en los lugaresde donde eran originarios Solo habia treinta y tres casas ytrescientas setenta y siete personas. Una casa grande y de­cente servia de iglesia, la cual era asistida pOI' un eclesiasticoen calidad de cura, que gozaba de Ia renta de trescientos cin­cuenta pesos anuales Cincuenta y cinco hatos de ganado ma­yor y algnnas lahores formaban la riqueza del Iugar

Flteblo NuelJo 0 Momotombo era de cscasa significacion pOI'tener solamente treinta y cuatro bobios con cincuenta y seisfamilias 0 doscientas cincuenta personas, sin los parvulos EIvecindario se componia de indios y ladinos y era gobernadopOI' un alcalde, el alguacil mayor y un fiscal La iglesia erade tejas, con hes naves en mal estado, muy pobre y can unaltar

Nctgctwte -Tambien estaba poblado pOI' las mismas clasesde vecinos Tenia iglesia de tejas, de tres naveil, pobre y de­teriorada, cuarenta bobios, sesenta y cinco familias, 0 seantrescientas once personas, su alcalde, algnacil mayor y dos re­gidores NagalOte y Pueblo Nuevo pagaban juntos cincuentay nueve pesos de tributo anual y el an administl ados pOl' unsolo parroco EI territorio de ambos pueblos constaba de diezleguas de longitud y cuatro de latitud y en el se numerabansetenta y dos haciendas de ganado mayor y trapiches palaelaborar azUcar

Matea,e, pueblo pelteneciente en 10 civil a la jmisdiccionde Leon, la cual, cOIriendo hacia el Norte, constaba de cua­renta y cinco leguas, y de h einta de 01 iente a Poniente Ullagran cruz colocada tres legnas antes de lIegar a Managua erael limite de aquella jurisdiccion Mateare estaba poblado de

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indigenas y anexo a Managua en 10 espiritual Se contabanen el diecisiete bohios con otras tantas familias a noventa per­sonas Tenia un alcalde, alguacil mayor, dos regidores y fis­cal Su territorio se extendia a cuatro leguas y media de lon­gitud y cuatro de latitud, y habia en eI diez hatos de ganadomayor y algunas chacras Pagaban de tributo ciento cincuen­ta pesos

Managua~No hay en Centro-America otra poblacion queen su situacion topografica presente las hermosas vistas quela de Managua La plaza principal se halla como a doscientasvaras de la orilla de un lago de veintidos leguas de longitudy siete de latitud, que agitado por la brisa levanta ondulacionescomo madejas de seda, y cuando esta quieto, con las nubesagrupadas en confusion soble la supelficie, representa un opa­10 de admirable grandeza Hacia el Sur aparece una elevadacordillera de monte, cubierta hoy en su mayor parte de exten­sas haciendas de cafe, y de ella se desprende un aire frescoque mitiga los ardores del cHma y hace sana y agl adable latemperatura de la ciudad En aquel tiempo tenia Managua,ademas de la iglesia parroquial, las de Veracruz, San Miguel,San Mateo y San Sebastian, situadas en tres parcialidades conlos nombres de Telpaneca, Cuastepe y Masagalpa e 'igual mi­mero de alcaldes, un alguacil mayor, seis ,;egidores y tres fis­cales Componian la poblacion nueve casas de tejas, y cua­trocientas cincuenta y seis de paja, esparcidas en poco mas denna milia Todo el ten itorio jurisdiccional tenia catorce le­gnas de longitud y cinco y media de latitud, y en eJ se conta­ban cnaI enta y siete haciendas de ganado mayor y algunostI apiches Poblaban el lugar setecientas cincuenta y dos fa­millas, a sean cuatro mil cnah ocientas diez personas, indias yladinas, de todas edades Los indios pagaban el tribnto annalde mil doscientos pesos Un jnez a prevencion ncmbrado pOllos alcaldes de Granada conocia en las cansas de espaiiolesmestizos y mnlatos y ejercia las funciones de Teniente Gobel­nador sabre los tres alcaldes y los natUlales Tenian orga­ni~a<1as tres compaiiias, una de espanoles montados y dos dEmestizos y mulatos, compnestas de tIescientos setenta y dOlsoldados y sus correspoudientes oficiales

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Nindi, i 6 Lindiri -En el promedio del siglo anterior eraeste pueblo tan pobre como en estos tiempos Tenia iglesiaparroquial de tejas con tres naves sobre horcones, muy hUme­da y maltratada, y una ermita en construccion con el titulode Calvario EI numero de casas esparcidas en un espacio deterreno como de media legua, llano y montuoso, era de dos­cientas cincuenta y una, todas de paja entre platanares, habi­tadas por otras tantas familias de indios y ladinos, 0 sean milseiscientas cincuenta pelsonas Los indios eran gobelnadospor un alcalde, alguacil mayor y fiscal, y pagaban de tributola suma de ochocientos diez pesos Los ladinos estaban su­jetos al Juez de Masaya EI territorio jurisdiccional, de Orien­te a Poniente, constaba de cuatro leguas y un cuarto, contadasdesde el cerro de Coyotepe hasta el Malpais De Norte a Surtenia cuatro leguas y media, desde el trapiche denominado elZapotal hasta el cerro nombrado el Potrero, el cual era unvolcan que en el siglo XVlI revento arrojando fuego No ienianotra hacienda de ganado que una cofladia con pocas reses, nimas labOles que escasas huertas con maiz, alboles frutales yhortalizas, insuficientes, pal a la manutencion de los vecinosL1evaban el agua para el consumo, de la inmediata laguna, en­tonces como ahora con grandes trabajos y peligros, y por lainsalubridad de aquella y Is temperatm a desabrida y enfer­miza no recibia aumento la poblacion

M asaya -Siempi e fue una de las principales poblacionesde la provincia, aunque situada en un llano sucio de montey con agua poco agl adable y escasa pOl su dificil conducciondesde una laguna inmediata, por bajaderos escablOsos y conpeligro de descender al sbismo Componiase el pueblo de cua­tro paicialidades denominadas Diriega, Monimb6, Don Sebas­tian y Guillen, las cuales ocupaban un tcrreno como de medialegua Habia Cabildo de tejas, de ochenta varas, Venta 0Mercado, de veinticinco, casa del GobernadOl, veintiocho deteias pertenecientes a particulares ladinos y mil doscienta"treinta y cinco de paja habitsdas por indigenas, todas con susrespectivas oficinas, aunque ocultss bajo arboledas, sin guar­dar union ni formar calles Esas casas pel tenecian a ot! astantss familias, que daban el numero total de seis mil vein-

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ticuatro pelsonas de todas edades En Ill. parcialidad de Di­riega existia Ill. parroquia con dedicacion a Ill. Asuncion de Ill.Virgen, y las ermitas de San Miguel y Santiago: en Monimb6se haUaban las iglesias de San Sebastian y Ill. Magdalena: enDon Sebastian Ill. de San Juan; finalmente en Guillen habfatres, a saber, el Calvario, Veracruz y San JeIonimo Esostemplos estaban a cargo de dos curas, con Ill. renta de seis­cientos pesos cada uno y ademas el servicio pelsonal de losindios, ayudaban a los p{n rocos otros dos clerigos naturalesdel pais EI Gobernador que residia ordinmiamente en estelugar nombraba un juez para el gobierno economico de los in­dios, y los alcaldes de Granada elegian otro para los ladinosEn pocos pueblos tenian los indios el numero de autoridadesque en Masaya elan gobelllados pOl cuntro alcaldes, un 0.1­guacil mayor, ocho regidores y cuatI 0 fiscales, pertenecientesa las cuatro parcialidades Estas pagaban de tributo anualdos mil seiscientos treinta y tres pesos, un 1 eal y treinta ydos maravedis Aunque eran muy industriosos, ese impuestaaparece bastante excesivo, pOl 10 deficiente de Ill. agriculturay el poco valor de las manufacturas elaboradas por Ill. gene­ralidad de los indigenas Masaya y Nindiri tenian organiza­do. una eompania de mulatos, con un capitan espaiibl Noposeian un territorio proporcionado 0.1 numero de habitantesnada mas que dos leguas de Oriente a Poniente, que termina­ban por el plimer rumba metlcionado, en Apoyo, lago saladoque se comunica con el mar por algun condueto subterraneo,y Ill. Cruz de los Negros EI telmino del Occidente era el lagoo lagtma denominada de Masaya, distante del pueblo pocaseuadl as por algunos puntos El agtla de ese lago es pesadapero dulce y de ella se proveen los pueblos eil cunvecinos Entoda Ill. jurisdiccion habia eatOlce haciendas de ganado mayor,diez estancia~ de platanos, maiz, algodon y cinco trapichespara fabriear azuear

Niquinohomo y las dos Namotivas Tenia Niquinohomo ane­xos otros dos pueblos, ambos de indigenas y denominados Na­motiva, con sus respectivos alcaldes, legidOles y fiscales y so­bre un territorio de tres euartos de legua de Norte a Sur yde dos de Oriente a Poniente En una laguna redondo. de

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media legua de extension y salobre, tomaban agna para losanimales inmediata a ella se encontraba una fnente de agnadulce en donde se proveia la poblacion, llevando en hombroslos cantaros al pueblo que distaba mas de una legua EI cIi­ma de los bes pueblos ela el mismo Tenia la iglesia de Ni­quinohomo tres naves can retablos y frontales dorados, sa­grario de plata sobredorado y baldaquino de plata En cuantoa ornato y decendencia se consideraba la primel a parlDquiadel obispado La casa del cura era de tejas, las demas depaja, en numero de trescientas b einta y cuatro Santa Ca­talina Namotiva se componia de veintiocho casas de paja, encuatro calles, con doscientas dieciocho familias indigenas, quepagaban de tributo anual doscientos sesenta y seis pesos yseis maravedis San Juan Namotiva tenia sescnta casas depaja can cincuenta y ocho familias 0 doscientas veintinuevepersonas, las que pagaban ciento cuarenta y dos pesos un realy cuatro maravedis Por la administracion de estos tres pue­blos recibia el cura la renta de doscientos pesos, fuera delservicio personal de los indios

Masatepe, Jalata y Nandasmo -EI primero de estos trespueblos, situado en un llano escaso de monte, tenia poco maSde cien casas y habitabanlas ciento ochenta familias de espa­noles, ladinos e indios, 0 sean setecicntas pel sonas de todasedades Gobernaban a estos ultimos un alcalde, aiguacil ma­yOI, tres Iegidol es y el fiscal los ladinos y espanoles tenianun juez a prevencion nombl ado por los alcaldes de GranadaPagaban los primeros de tributo anual la suma de doscientosochenta y cuatro pesos dieciseis maravedis Jalata y Nan­dasmo, anexos a Masatepe, se componian de indios y teniansus alcaldes respectivos, aiguacil mayor, regidores y fiscalesEI primero de estos pueblos contaba solamente dieciseis casas,con igual numelD de familias 0 setenta personas, quienes pa­gaban de tributo ochenta pesos Las casas de Nandasmo eranveinticinco, habitadas par cual enta y seis familias, can cientob einta y cinco personas el tributo anual asccndia a sesentay nueve pesos, un real y diecisiete maravedis, y tenian lostres pueblos un territorio de trece legnas de NOlte a Sur ycuatro de Oriente a Poniente Sacaban el agua de la laguna

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de Masaya, con gralldes dificultades y aun perdida de vidaspor 10 precipitado y escabloso del camino

Dj,iamba -En 10 eelesiitstico era anexo it Jinotepe, del cualdistaba el corto espacio de una legua Habia en Diriamba,pueblo compuesto en su totalidad de indigenas, cuarenta ynueve casas de paja, habitadas por ciento diecinueve familias,las que cOlltenian trescientas tleinta y cinco personas ejercianel gobierno del lugal un alcalde, el alguacil mayor, tl es regi­dores y el fiscal Los vecinos pagaban el tributo de cientosetenta y seis pesos, y se ocupaban en las pequenas laboresde sus sementelas y en teiiir de mOlado hilo de algodon continta de caracoles, que abnndaban en el Mar del Sur EI eli­ma era humedo y frio tomaban el agua de unas fuentes in­mediatas: estas en el verano se secaban y entonces tenian losindios que llevarla al pueblo, desde un rio distante dos le­guas y media

Jinotepe ela en aquel tiempo de escasa significacion teniasolamente cincuenta y cinco casas de paja y una de tejas parael doctrinelO, colocadas en dispel sion dentro del monte y ha­bitadas pal sesenta familias, con el n6mero de doscientas ochen­ta pel sonas, ladinas e indigenas estas pagaban el tributoannal de cuarenta y ocho pesos, y tenian un alcalde, ~lguacilmayor, tl es regidOl es y fiscal Los ladinos estaban sujetos aljuez it prevencion de Nandaime

N andaime se componia de indios y ladinos en numero deochenta y seis familias, can seiscientas cuatro pel sonas Losindios tenian un alcalde, alguacil mayor, dos regidOl es y fis­cal los ladinos estaban sujetos it un juez it prevencion quenombl aban los alcaldes de Granada Tenian tambien una com­pania de negros, zambos y mulatos, organizada con cien hom­bres, nn Teniente de Gobernador, alfelez, dos sargelltos y doscabos de escuadra Se contaban en el pueblo ochenta casas,una de teja para el doctrinelo y las demits de paja La I entadel cura, incluso el servicio persoflal excedla de quinientospesos, y el tributo de los indios impOl taba sesenta y cuatloEn un terreno de ocho leguas en su longitud y cinco de lati­tud habia algunas chacras, doce haciendas de ganado nlayor,otras de cacao y tl apiches pertenecientes a vecinos de Gl anada

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Di, iomo tenia ciento cincuenta y nueve casas de paja y unade tejas, destinada al cura , ciento setenta y nueve familiaso setecientas trece personas, de todas edades Se hallaba si­tuado en un llano circunvalado de monte Veintiuna familiasClan de ladinos y el resto de natmales del lugal La rentadel cura, sin el servicio personal, importaba al ano quinientospesos cuatro reales, y el tributo de los indios trescientos se­tenta y siete pesos, un leal Un alcalde, el alguacil mayor,dos I egidOl es y el fiscal, formaban el Ayuntamiento del pueblo

Di1id -Tambi<,n este pueblo se hallaba situado en un llanomontuoso y con ejidos que se extendian como media legua deOdente a Poniente y algo mas de NOlte a Sm, en los cualesexistia una fuente de que se proveian los vecinos y algunaschaClas de poco valor Tenian iglesia, pero muy maltlatadapOl un temblor de tier, a ocm rido el ano de 1739 Las casasllegaban a ciento diecisiete, una de tejas, casi en el suelo, queservia de habitacion al cura, y las demas de paja, y habitadaspor otras tantas familias compuestas de algunos ladinos ydoscientos ochenta y cinco indios y algunos mas que andabanpor las haciendas cercanas Pagaban los indios el tributoanual de doscientos noventa y nueve pesos, cuatro reales y sietemalavedies La renta del cura, leducida a cualCnta pesos, sepagaba de las reales cajas, exclusive e! sel vicio personal EIvalor de las misas de cof! adias y otras festividades, matrimo­nios y racion, pertenecian al parlOco y se regulaba todo encuatrocientos diecisiete pesos cuatro I eales Un alcalde, al­guacil mayor, dos regidores y el fiscal eran las autoridades delos indios, y un juez a 1" evencion nombrado por los alcaldesde Granada, la de los ladinos de este pueblo y del de DiI iomo

Metapa--Este pueblo pertenecia a la jmisdiccion de lacapital Componiase de espanoles, mulatos e indios Los al­caldes de Leon nombraban jueces a los primeros para que juz­gasen a prevencion con ellos los mulatos tenian un aicaldede su clase y los indios otro de la suya, con su alguacll mayor,dos regidores y fiscal No haLia mas que ciento veinte casas,una de tejas y el resto de paja, situadas en un Hano sucio dehierbas y arboles Disfrutaban de un clima templado y sano,de un cielo despejado y de aguas saludables Se componia

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de trescientas familias 0 dos mil doscientas cincuenta y nuevepersonas Dos companias formaban la fuerza publica, con sucapitan y oficiales y cuatrocientos quince hombres, pero conpocas armas Las plimicias y obvenciones para el cura as­cendian a novecientos pesos: los indios no Ie daban racion,sino el servicio personal, y pagaban de tributo al ano sesentay cuatro pesos, seis reales EI territorio del curato tenia ca­torce legnas de longitud y diez de latitud

Acoyapa, poblacion formada de espanoles y ladinos y si­tuada en un terreno quebl ado y montuoso, en la cual habiacuatro casas de tejas y sesenta y nueve de paja, sin orden yocultas bajo arboles que a sus inmediaciones habia \ Un cle­riga administraba la parroquia de esta villa, la de Lovigiiiscay Lovago y la de Juigalpa de las tres recibia una renta anualde mil ochenta y un pesos Los alcaldes ordinarios de Grana­da, a cuya jurisdiccion pertenecia Acoyapa, nombraban unjuez que conocia a prevencion en los asuntos judiciales de lavilla Tenia esta dos companias de montados con ciento h ein­ta y ocho soldados, sus capitanes y oficiales respectivos, ar­mados de fusiles y lanzas y con dos pedreros de media libl apara la defensa por hallarse a poca distancia de la montanaSe contaban setecientas veintiocho personas que constituianciento cincuenta familias, dispersas en su mayO! parte' por loscampos inmediatos

G1 anada, segnnda ciudad de la provincia, en cuanto al nu­mew de habitantes, perc la primera por su comercio y lique­za Situada en un llano arenoso y seco, recibe del glan lago,que se halla a pocas cuadras, un viento fresco y sana que Ieda en ciel tas horas algun refrigerio, pero cuando no soplaaquella brisa el calor se hace sensible por los vapores de laarena Se pensaha entonces, que el hermos" aspecto de laciudad aumentalia y que aun mejoraria el clima derribandoel monte que se halla entre ella y el gl an lago Las principa­les casas, limpias y tersas por fuera, embellecian las calles, yhabria sido mayor el lucimiento si no se hubieran hallado otrasque carecian de aquellas cualidades EI numero de todas ex­cedia de seiscientas cuatlOcientas de tejas y el resto de paja,en cuatro calles de Oriente a Poniente, anchas y niveladas al·

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gunas La principal denominada de J alteva, se extendia hastaocho cuadras y terminaba en la playa del lago El agua deeste, que usaba la poblacion, era tenida por saludable, aunquepesada Se contaban en Granada siete iglesias: la Parroquiade cal, piedra y ladrillo, con hermoso frontispicio, altares de­centes y muy aseada en el interior, Guadalupe, San Francis­co, San Juan de Dios, la Merced, San Sebastian y Jalteva, casade Ayuntamiento y Sala de armas, todas de mamposteria y te­jas Se decia en aquellos tiempos, que en atencion a la defensade ia plaza se habia expedido una real cedula en que se orde­naba al Gobernador fijase su residencia en Granada La faltade cumplimiento hacia incierta la existencia de esa disposi­cion: los gobernadores residian en Masaya La real caja eraadministrada por uno de los oficiales reales de la provincia:ambos y un teniente que nombraban permanecian en Granada,pero por otra real cedula se les obligo a que fijasen su resi­dencia en Leon, y en Granada su tenlente, y asi 10 hicieronen el tiempo sucesivo No obstante las desgracias y grandespel didas que los granadinos recibieron de los filibusteros eraninclinados al luio El comercio habia quedado reducido altransporte de ganados, que en abundancia poseian, pero sinconsumo equivalente Llevaban a Guatemala grandes parti­das, que vendian por 10 que aHa querian dar/es, siempre enefectos valuados a precios muy subidos Puede calcularse laperdida que en el cambio 1ecibian, a la que se agregaba la delganado que en el camino moria a quedaba entumido Sin em­bargo, llamaba la atencion la decencia de las casas, en quelucian marcos dorados, pinturas de gusto refinado y costososmenajes: los vecinos usaban pelucas, brocados, tisues, fran­jas, calesas y trenes de grande aparato EI territorio a quese extendia la jurisdicci6n era de cuarenta y cinco leguas delongitud y treinta y dos de latitud, en el habia algunos pue­blos, once trapiches, cincuenta y dos hatos de ganado mayor,veinw haciendas de cacao, dieciocho chacras, labores de maizy otras cementeras Las familias residentes en la ciudad, ba­rrios y hacielldas, alcanzaban al numero de setecientas, y laspersonas al de cinco mil y ocho

El Castillo -Extensamente se ha hablado en varios capi-

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tnlos de esta obra, sobre todo 10 que concierne al Castillo dela Inmaculada Concepcion, considerandolo como el punta prin­cipal y de mas grande importancia destinado a la defensa dela provincia, raz6n por la cual nos limitamos ahara a mani­festar el estado de atl aso en que su pobJacion se hallaba amediados del siglo anterior A inmediaciones de la fortalezaestaba situada una casa de paja que Selvia de hospital, dosdel mismo matel ial para bayucas y veinte pequenos Lohios,dispersos en la COl ta campana que tenian limpia El climaes humedo y calida y tenido por malsano Las continuas lIu­vias 10 mejoran y quitan la gravedad a las enfelme1ades quecan frecuencia se padecen Los negros gozaban de mas ro­bustez y constante salud

Rivas -Tambien se ha hablado can alguna extensi6n deesta villa, en el capitulo VII del presente libro Resta solotratar de conocer el estado en que se hallaba a mediados delsiglo XVIII Tenia casas de Ayuntamiento, de adobes y tejas,capaces y con portales a la plaza se contaban otras ciento detejas y cincuenta de paja, formadas en cuatro calles cuadra­das, aunque no perfectas En 10 politico era gobernada parlas autoridades establecidas al principia, y en 10 militar porun comandante y un sargento mayor, jefes de nuev~ compa­nias de cien hombres, fuera de los capitanes y oficiales Esenumero de soldados no se hallaba en proporcion al de habi­tantes de la villa, aunque eran tornados tambien de otras docepoblaciones conocidas can el titulo de barrios, a saber Riode en medio 0 Aposonga, San Esteban, Popayapa, Potosi,Apompua, Obraje, Buenavista, San Antonio, Nagualapa, Chia­ta, los Cerros y San Juan de Tala El mas inmediato de esospueblos distaba de la villa un cuarto de legua, y tres leguasel mas distante Todos formaban una poblacion por los ca­cerios y haciendas de cacao que habia en los intermedios yque se extendian cuatro leguas, desde el Obraje hasta Aposon­ga San Antonio, Nagualapa y Chiata estaban incorporadasy tenian dieciocho caSas de tejas y cinco de paja San Estebany Popoyapa los seguian, can veintiseis de las primeras y cientocincuenta y nueve de las segundas Potosi y Apompua canveintio.cho de tejas !( cuarenta de paja los Cerros con catorce

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de aquellas y ciento diez de estas el Oblaje y Buenavista condieciocho de tejas y cuareilta y cinco de paja, y San Juan deTola, ventajosamente situado en una espaciosa llanura regadapor el rio que forma la barra de Brito, tenia veintiocho fami­lias y otras tantas casas de paja La fertilidad del terrenose prestaba a la ptoducci6n del anil, la vainilla, el cacao y decuantas semillas de Europa y America que en el se sembI aranLas mas lucrativas labores de los vecinos estaban en cincuentatrapiches, veintiun hatos de ganado mayor y trescientas diezhaciendas de cacao, en las que tenian 677,730 casas de cacaotal,que componian 1 355,450 arboles EI niimero de familias re­sidentes en toda la jurisdicci6n era el de ochocientas ochenta,y las personas cuatro mil quinientas treinta y cuatro

Debe hablarse tambien, por pertenecer a la misma juris­dicci6n, del pueblo de Nica, agua, capital del antiguo cacicazgo,en que habia un alcalde, alguacil mayor y dos regidores parael gobierno de los natul ales, y tenia el de los ladinos un jueza prevenci6n nomblado por los alcaldes ordinalios de la villaEn una plaza regular y tres calles habia veintitres casas deteias, con el cabildo, y noventa y siete de paja Entre estepueblo y la villa se haUaban dos barrios denominados, eJ unoApataco y el otro Espana: componiase de ciento catorce ca­sas, seis de tejas y las restantes de paja Las familias quehabitaban en aquel pueblo y estos barrios eran trescientasnueve: doscientas nueve de espanoles y ladinos, con mil cientonueve personas, y ciento de indios, con cuatrocientas sesenta,los cuales pagaban el tributo anual de cincuenta y tres pesosy veintitres reales Se ejercitaban en tenir hilo con tinta decaracol, y en labrar maderas de cedro

En la isla de Ometepe, jurisdicci6n de Rivas, se hallabaMoyogalpa, en un terreno llano y elevado, con aire suave yla hermosa vista del lago Su poblaci6n se componia de docefamilias de ladinOS, habitando en otros ta ntos bohios los in­dios se habian extinguido Habia otro pueblo, distante cuat, 0

leguas, y era el principal, cuyo nombre no explesa el ObispoMorel, pero suponemos era Alta-Gracia 6 Pueblo Grande, secomponia de dOB parcialidades, a saber: Hastagalpa y Coso­nigalpa, divididas por una calle que atravesaba por la plaza,

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y muy notables por la circunstancia de ser la una frigida yla otra calida EI gobierno de los naturales estaba a cargode un cacique, dos alcaldes y cuatro regidores, el de los la­dinos, al de un juez a prevencion, nombrado por los alcaldesde la Villa y aprobado por el Gobernador de la provincia Estejuez 10 era tambiiin de una escuadra de ladinos y de una com­pania de indios fIecheros y sus respectivos oficiales Paga­ban de tributo ciento nueve pesos, cuatro reales cada uno.Esos dos pueblos se hallaban a la falda del volcan occidental:en el oriental, denominado de la Madera, se encontraba otro,fundado el ano de 1748 Residian en iiI los caribes s(>lentina­mes, y se componia de diez bobios y treinta y nueve personasde ambos sexos y de todas edades Se numeraban en toda laisla quince hatos de ganado mayor y veintitres haciendas decacao, labores de maiz, legumbres y arboles frutales en abun­dancia Se producia en ella una especie de junco que serviaa los naturales para fabricar baules, papeleras y otros mue­bles de estimacion, todo 10 que vendian en Granada y puebloscomalCanos Gozaba la isla del privilegio de no tener ani­males ponzonosos y sabandijas, que abundaban por 10 generalen los montes de la provincia

Hemos ,ecorrido todos los pueblos que constituial1 la go­l;lernaci6n de Nicaragua a mediados del siglo antelior, paraconocer la situacion en que se hallaban, la caUdad de las ca­sas, el numero de las haciendas, la naturaleza del gobierno ylas comodidades y garantias de que gozaban, y en el examende todos esos puntos, que son elementos de existencia, resaltanla pobreza, la despoblaci6n y las dificultades propias de lospueblos incipientes Leon por las numerosas haciendas de ga­nado mayo" Granada por su comercio y Rivas por su agricul­tura formaban excepcion y daban senales de un progreso queno se detendria, pero no habia escuelas, ni otros estableci­mientos en que se ensenara a la juventud indigena siquieralos lUdimentos de la vida civilizada (1)

FIN DEL TOMO SEGUNDO

(1) Para esclilJiI este capitulo hemos tenido a Ia vista y aun seguidoa veces textualmente Ia Visita apost6lica, hist6lica, topog1<lfica y estadisticadel Obispo Don Fl ay Agu~tin MOl el de Santa Cl liZ